Introducción:
Clandestina no es solo una pizzería, es una declaración de principios. Nacida del salto valiente de Rodri —ingeniero que cambió algoritmos por fermentos— y Toto, esta propuesta en Heredia toma lo simple y lo eleva con técnica, cariño y autenticidad. Acá la masa se respeta: biga de 72 horas, hidratación alta, horno siempre encendido y un compromiso con el sabor que se siente desde el primer bocado. Es un lugar para quienes buscan la pizza napolitana estilo contemporáneo: bordes inflados, base suave, ingredientes bien elegidos y una ejecución que honra la tradición sin quedarse en ella.
Ambiente:
Oscura por fuera, cálida por dentro. Las paredes negras, la madera cruda y la luz tenue crean un espacio íntimo, casi secreto, donde lo importante es lo que llega a la mesa. Tiene alma de escondite, pero con detalles pensados para hacerte sentir en casa. En Clandestina todo te dice que lo que importa es comer bien y apreciar los sabores y el arte de hacer pizza.
Qué pedir:
Pizza Margarita: No importa donde vayas a probar pizza, la pizza margarita es el punto de referencia para comparar con otras pizzerías y también para ver si están haciendo las cosas bien. Esta es de mis favoritas en Clandestina.
Pizza Prosciutto y Burrata: Esta pizza contiene todo lo que uno ama de Italia: prosciutto, queso burrata, una buena salsa de tomate y arúgula. Estos son sabores que te transporta el paladar a Italia.
Pizza Calabrese: Para los amantes del picante, esta pizza contiene sabores intensos y concentrados que te hacen salivar y no te deja parar de comer.
