¿Tuvo dengue? Así debe alimentarse durante recuperación

Ante el aumento de la cantidad de casos de dengue durante este año, el Colegio de Profesionales en Nutrición (CPN) le recuerda a los pacientes con esta enfermedad el impacto que tiene una adecuada alimentación en el proceso de recuperación.

De acuerdo con el Dr. Daniel Gómez, representante del CPN, la alimentación adecuada es fundamental en el proceso de recuperación del dengue porque ayuda a mantener la hidratación, fortalecer el sistema inmunológico y proporcionar la energía necesaria para enfrentar la enfermedad.

El dengue puede causar pérdida de apetito, náuseas y vómitos, lo que lleva a la desnutrición y a la deshidratación, aumentando el riesgo de complicaciones. Una dieta bien equilibrada también ayuda a reducir la inflamación y a mantener normales los niveles de plaquetas en la sangre, esenciales en el tratamiento y recuperación de la enfermedad, agregó.

Por esto, brinda las siguientes recomendaciones de alimentación:

• Mantenerse bien hidratado: Ingerir agua, suero oral, agua de pipa, jugos naturales (sin azúcar añadida) y caldos claros. Evitar las bebidas con cafeína y azucaradas.
• Consumir alimentos ricos en vitamina C: Las frutas como naranja, guayaba y papaya fortalecen el sistema inmunológico y ayudan en la recuperación.
• Incorporar proteínas de fácil digestión: Consumir alimentos como pollo, pescado, huevos y leguminosas (frijol, garbanzo, lenteja) en pequeñas porciones, que ayudarán a mantener los niveles de proteínas.
• Optar por comidas ligeras y frecuentes: Si le falta apetito, intente consumir pequeñas porciones de alimentos blandos como purés, sopas y papillas, varias veces al día.
• Incluir alimentos con hierro y antioxidantes: Espinacas, remolacha y frutos rojos ayudan a mantener los niveles de hemoglobina y promueven la recuperación de las células.

Además, desde el CPN resaltaron una serie de errores que se dan continuamente en pacientes con esta enfermedad, los cuales son:

• No consumir suficiente líquido, lo cual es crucial para prevenir la deshidratación.
• Saltarse comidas o consumir una cantidad insuficiente de calorías debido a la falta de apetito, lo que debilita aún más el cuerpo.
• Consumir alimentos procesados o ricos en grasas, que pueden ser difíciles de digerir y que no proporcionan los nutrientes necesarios.
• Ignorar la ingesta de proteínas, que son esenciales para el sistema inmunológico.
• Consumir bebidas con cafeína o bebidas energéticas, que pueden aumentar la deshidratación.