Ordenan despido de juez acusado de violar a compañera; funcionario apelará decisión
Investigación disciplinaria acreditó los hechos narrados por la víctima
(CRHoy.com).— El Tribunal de la Inspección Judicial, del Poder Judicial, ordenó el despido de un juez, de apellido Reaves, acusado de, presuntamente, violar a una compañera de trabajo en un apartamento en Limón; el juzgador indicó a CRHoy.com que apelará el fallo y aseguró que se le acusa de algo que nunca ocurrió.
Por estos hechos también se tramita una causa penal, en los Tribunales de Guápiles, por el mismo delito. El expediente que se lleva en la Fiscalía es el 22-000157-0994-PE. CRHoy. consultó al Ministerio Público y por medio de la oficina de prensa indicaron que "la Fiscalía Adjunta de Pococí comunicó que la causa de su interés se encuentra en investigación".
El "por tanto" de la causa disciplinaria contra Reaves se dictó el 28 de abril pasado y el número de expediente es el 22-001451-0031-DI. En los hechos probados, la Inspección Judicial determinó que Reaves acosó sexualmente a la funcionaria y ante la gravedad de lo sucedido determinó que la sanción que se debía aplicar era la revocatoria del nombramiento.
Actividad en bar
Los hechos que se le atribuyen a Reaves ocurrieron cuando este se desempeñaba como Fiscal en Limón, el 11 de febrero del 2021, después de que ambos habían asistido a una actividad en un bar de la zona, la cual se había promovido como una "Noche Sabinera".
Ese día, según el Tribunal, en horas de la mañana, Reaves y la funcionaria se trasladaron desde Siquirres a Limón, como había sucedido en otras ocasiones, ya que ambos trabajaban en los Tribunales de Limón y en el viaje, el entonces Fiscal, le habría comentado sobre la actividad en el bar, el cual queda a un costado de los tribunales. Otro juez, amigo de ambos, también asistiría a la actividad, acompañado por otra mujer.
El Tribunal estableció en sus hechos probados, que los 4 estuvieron compartiendo en ese sitio, donde la funcionaria judicial cenó e ingirió bebidas alcohólicas tipo sangría. En algún momento de la noche, la funcionaria le dijo a Reaves que quería irse y presuntamente, este le respondió que se terminara lo que estaba tomando.
"Posteriormente, encontrándose en el referido restaurante, el señor Reaves se acercó a la ofendida y sin el consentimiento de esta, le sujetó los glúteos con sus manos y aproximó su rostro al de la joven con la intención de besarla en la boca, ante lo que esta reaccionó moviendo la cabeza en señal de respuesta negativa y para evitar ser besada; sin embargo, el acusado rozaba con su boca los labios de la quejosa y cuando esta detuvo la cabeza, el denunciado la besó en la boca, sin en el consentimiento de la víctima", determinó el Tribunal de la Inspección Judicial.
Al salir del restaurante, ya en horas de la madrugada del 12 de febrero del 2022, el entonces fiscal, sin consentimiento de la funcionaria, la volvió a besar cuando se dirigían al automóvil. Incluso, explicó el Tribunal en su fallo, estando dentro del vehículo, la joven se vomitó y Reaves habría metido su mano debajo del vestido de la funcionaria, a lo cual ella reaccionó quitándolo; sin embargo, le habría tocado las piernas en 3 ocasiones.
Lo último que recuerda la funcionaria habría sucedido en un apartamento en el barrio Siglo XXI en Limón. En ese sitio, según comentó la joven al Tribunal de la Inspección Judicial, recordó estar acostada en una cama y a Reaves, sin su consentimiento, sobre ella, manteniendo relaciones, donde además le habría dicho: "Usted sabía que yo le tenía muchas ganas".
La víctima explicó al Tribunal que ella tenía "lagunazos" y que recuerda estos hechos en unas tres ocasiones. Admitió que no denunció los hechos cuando sucedieron por vergüenza, incluso tenía fuertes dolores en sus zonas íntimas, al momento de caminar, sentarse y limpiarse.
Además, explicó que también sentía temor de verse perjudicada laboralmente, ya que estaba desempeñándose en el puesto de técnica judicial y en ese momento, Reaves era el fiscal coordinador.
Casi un año después de los hechos, presentó la denuncia en contra del Reaves, quien ya para ese momento ocupaba el cargo de juez por el presunto delito de violación ante la Fiscalía de Género del I Circuito Judicial de San José.
Un dictamen psicológico forense determinó que producto de los hechos de acoso sexual que experimentó la ofendida, presenta desajustes en las áreas en que se desempeña, a nivel académico, laboral, familiar y social, siendo que en los dos primeros se reportó desatención, dificultades en la concentración, problemas para recordar tareas, olvidos, enlentecimiento en su actuar y desorganización, lo que compensa con su compromiso y alto sentido de responsabilidad.
"Asimismo, experimenta un grado de afectación psicopatológica grave, con una alta intensidad de sufrimiento emocional y psicosomático, así como una alta severidad de los síntomas, expresado a través de un estado constante de ansiedad y sintomatología depresiva, que se asocia con los hechos aquí investigados, lo que la hace percibirse seriamente dañada. Previo a los hechos se describió a la ofendida como una persona feliz, tranquila, respetuosa, obediente, deferente, con un estilo de vida controlado; no obstante, posteriormente, se le señaló como irritable, hostil, aislada, descuidada, confundida y frustrada", se indica en el dictamen.
Apelará el fallo
CRHoy.com conversó con el juez de apellido Reaves, quien señaló que apelará el fallo del Tribunal de la Inspección Judicial porque nunca cometió los hechos que se le atribuyen.
El juzgador, quien se ha mantenido en su puesto, comentó que todo esto es producto de los celos de la pareja de la funcionaria y de otro compañero juez, cuñado de la presunta víctima.
Comentó que contrario a lo que señala el Tribunal de la Inspección Judicial, nunca estuvo junto con la funcionaria en la actividad del 11 de febrero del 2021, ni tampoco la invitó. Explicó que siempre estuvo con otras personas, algunos de estos compañeros de los tribunales de Limón.
Reaves dijo a CRHoy.com que esa noche, cuando se iba a ir del bar, la funcionaria estaba en mal estado, con su cabeza sobre una de las mesas del lugar. Fue en ese momento, cuando una mujer que estaba con él le dijo que no podían dejar a la joven ahí, porque le podía pasar algo.
El juez comentó que decidieron llevársela y en el carro siempre estuvo acompañado por dos personas más, además de la joven que lo denunció. La llevaron hasta el apartamento en el barrio Siglo XXI. La bajaron del carro y la acostaron en una cama, en uno de los cuartos de la vivienda.
Reaves negó haber violado a la funcionaria y, por el contrario, aseguró que siempre estuvo acompañado por otras personas mientras la joven dormía en la habitación donde la ubicaron.
Al otro día, el juez dijo que la llevó a la casa donde ella se estaba quedando en Limón, siempre acompañado por otra persona. La dejaron en la puerta y se fueron.
Explicó que uno de los testigos que declaró en el proceso fue el jefe de la funcionaria, quien le preguntó al siguiente día de la actividad, que cómo había estado, y ella le había dicho que todo había estado bien y que la próxima vez tenían que hacer un grupo para ir todos.
El juez manifestó que la presunta víctima también fue acusada por abuso sexual, ya que estando en el bar y al parecer, después de haber tomado sangría, le habría tocado un pecho a una mujer que la acompañaba y le habría dicho si le gustaban los tríos.
Señaló que después del 11 de febrero del 2022, la joven viajó con él durante 4 meses más hasta Limón en su vehículo.
"Por supuesto que vamos a apelar el fallo", comentó a CRHoy.com.
