¡La tercera es la vencida! Ella superó los retos y alcanzó su sueño
Academia instruye a futuros pasteleros y reposteros para que puedan crear su propio negocio
[samba-videos id='d26389e60a1f8f748be0f082bcb248ef' lead='false']
Hace más de 12 años, Candy Zamora inició una aventura que le costó sudor, lágrimas y sobre todo mucho esfuerzo. Aunque al inicio la tarea de ver consolidado su negocio no fue para nada sencilla, hoy disfruta de enseñar a otros su talento.
Candy es pastelera, panadera y decoradora de queques. Ella empezó horneando pan y pasteles "por necesidad", pues fue la única manera que encontró para sacar adelante a su hijo.
"Empecé haciendo queques para toda ocasión desde mi casa, conocí el sacrificio de ser mamá, hacer queques y tener que ir a entregarlos y montarlos, colocando todo en un taxi porque no tenía ni carro", contó.
Luego de un tiempo se animó a dar clases, pues enseñar a otros todo lo que ella había aprendido, se convirtió en su pasión.
"Inicié dando clases en un salón comunal en San Joaquín de Flores, desde ahí -con nada especializado- empecé lo que hasta el día de hoy es mi amada profesión. Por cuestiones de uso de local tuve que salir de ahí y trasladarme a Heredia", dijo.
A pesar de que en esa primera oportunidad las cosas no salieron tal y como lo esperaba, decidió volver a intentarlo desde su casa, y aunque esa segunda vez tampoco resultó, ella no se dio por vencida y siguió adelante…
"Con deudas al hombro y la sensación de ser una fracasada, me fui y puse el local en mi casa, en un lugar que ni parqueo tenía… Quité la sala, puse todas las mesas, armé todo. A esas alturas tenía una deuda con el banco de casi ₡5 millones", comentó.
Estas malas experiencias no fueron motivo suficiente para que esta emprendedora desistiera de perseguir su sueño.
¡Sueño cumplido!
Así fue como luego de dos intentos fallidos, Candy llegó a Barva de Heredia y logró establecer su academia.
"No me di por vencida luché y sigo luchando para enseñarle a la gente que sí se puede; a esas señoras que no ven cómo salir adelante, que no pueden salir de casa porque tienen hijos pequeños, o que están solas y yo sé con mi testimonio que vender quequitos -como dicen varios- sí deja dinero si se está bien organizado", aseguró.
El Centro Gastronómico Candy hoy ofrece a las personas la posibilidad de instruirse en pastelería, repostería y decoración. La idea es que aquellos que sueñan con crear su propio emprendimiento tengan las bases necesarias para cumplir su meta.
"En este largo camino hemos tenido muchas bajas y muchas altas, mi trabajo me ha permitido salir del país a instruirme, ver a mis hijos crecer estando más cerca de ellos, ser mi propia jefa, pero lo más importante llega cuando uno ve crecer a quien ha instruido, eso es lo que infla el corazón", agregó.
La academia se ubica en Barva de Heredia y si desea obtener información sobre los cursos que esta emprendedora ofrece puede contactarla al teléfono 4030- 4336 o visitar su página de Facebook (Haga clic aquí).