Tramo clave para nueva carretera a San Carlos tiene 179 expropiaciones al frente
Trayecto de 8.2 kilómetros conectara vía con autopista Bernardo Soto
(CRHoy.com). Un trayecto clave para que la nueva carretera a San Carlos se haga realidad requiere 179 trámites expropiatorios.
Es la punta sur, un tramo de 8.2 kilómetros entre Sifón de San Ramón y San Miguel de Naranjo, con enlace a la autopista San Ramón-San José.
Ileana Aguilar, gerente del proyecto en el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), explicó este 19 de julio ante la Comisión Legislativa de Ambiente que desde 2018 iniciaron la cuantificación de los terrenos necesarios a expropiar.
Las expropiaciones son un dolor de cabeza para cualquier proyecto vial. Un ejemplo claro es la ampliación de la ruta 32, entre Río Frío y Limón, la cual inició en 2017 y en este 2022 más del 50% de los trámites estaban pendientes.
Según Aguilar, el diseño trazado para que la ruta conecte con San Miguel de Naranjo es el más factible técnicamente.
"Desde el año 2018 se inició un proceso de prediseño. Ya tenemos un diseño definitivo y unos expedientes. El proceso está bastante avanzando. La meta de nosotros es tener este año, 2022, por lo menos el 90% de las expropiaciones, para 2023 tenerlas listas”, citó Aguilar.
La intención del MOPT es que las obras de construcción en este punto inicien en 2024. Para ese año, también se espera retomar las tareas en el tramo central (La Abundancia de Ciudad Quesada y Sifón de San Ramón).
De las expropiaciones requeridas, se estima que en 33 puntos existen edificaciones o inmuebles que deberán ser reubicados.
Luis Amador, ministro del MOPT, detalló que en diciembre de 2021 inició un estudio integral sobre todo el proyecto. Ese análisis de factibilidad técnica, legal y financiera, que estará listo en octubre de 2022, tiene un costo superior a los $1.1 millones, los cuales son financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
"Se está analizando todo el corredor total, desde la Bernardo Soto hasta Florencio, para analizar la viabilidad del proyecto integral”, añadió Aguilar, quien recalcó que se analizaron 9 propuestas de trazado en la punta sur.
El proyecto total, dividido en 3 tramos (punta sur, tramo central y punta norte), está compuesto por 43 kilómetros. También, hay: 11 intercambios, pasos a desnivel, 12 puentes y obras complementarias (puentes peatonales, estaciones de peaje y pesaje).
Vía de obstáculos
Cuando comenzó, hace 17 años, la construcción del tramo central (Sifón de San Ramón-La Abundancia de Ciudad Quesada) estaba a cargo de la empresa taiwanesa RSEA. Pero, en 2007, por el rompimiento de relaciones diplomáticas con Taiwán durante el gobierno de Óscar Arias (2006-2010), la compañía asiática abandonó el país.
Un año después, en 2008, la obra pasó a manos de la compañía costarricense Sánchez Carvajal mediante una cesión de derechos.
La empresa local estuvo a cargo durante 10 años, hasta que la Administración Alvarado Quesada (2018-2022) optó por romper el contrato y enderezar el rumbo de la obra. Desde agosto de 2018, la construcción está paralizada, con un 76% del trazado ya asfaltado.
Hasta 2018, el proyecto había consumido $291 millones de recursos estatales. Una cifra notablemente superior a los $61 millones estimados en 2005 cuando la obra comenzó a cargo de RSEA.
Una inspección realizada por el Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) de la Universidad de Costa Rica (UCR) en 2021 detectó la existencia de 5 fallas geológicas en distintos puntos de los 30 kilómetros que involucran el tramo central, las cuales agravan la vulnerabilidad de 68 taludes inestables identificados cerca de la carretera. Además, se encontraron 2 mil puntos con riesgo de deslizamiento.
El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) durante el gobierno de Alvarado estimó que, para concluir todo el trazado, que superaría los 50 kilómetros en total, se requieren $300 millones. De los cuales, $225 millones serán financiados por el BID y $100 millones por el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi).
El ministro Amador adelantó semanas atrás que, en octubre, cuando reciban el diseño, tendrán también listo el cartel de licitación para adjudicar las obras del tramo sur. A partir de esto, se deberán seguir procedimientos internos del BID y el interés es adjudicarlo en 2023.
Por mientras, hay numerosos pendientes por resolver: un hundimiento en el kilómetro 21, la necesidad de construir un nuevo puente sobre el río Laguna y una pugna legal por la existencia de un humedal en el sector de La Culebra. En total, hay 40 puntos críticos por atender debido a inestabilidades geológicas.
La carretera se dividió en 3 tramos independientes: la punta norte (Florencia-Ciudad Quesada, en operación desde 2018 tras inversión de $14 millones), el central y la punta sur (Sifón-San Miguel de Naranjo).