Robo de droga y venganza delataron al único solicitado por la DEA a Costa Rica que sigue prófugo

El robo de un cargamento de cocaína en Costa Rica en 2016 y una posterior acción violenta de un grupo armado en 2023 figuran entre las alertas que la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) ha presentado ante la Corte del Distrito Este de Texas para solicitar la extradición de Alexander Leudo Nieves, alias “Alex” o “Brando”. Nacido en Buenaventura (Colombia) y nacionalizado costarricense, Leudo es el único de los cuatro solicitados que permanece prófugo.

La DEA pidió también la detención del exmagistrado Celso Gamboa Sánchez, del exconvicto Edwin Danney López Vega (“Pecho de Rata”) y del empresario Jonathan Guillermo Álvarez Alfaro (capturado en la operación Venus). Todos ellos se encuentran bajo arresto provisional en Costa Rica, a la espera de que el Tribunal Penal de San José defina su destino.

En Costa Rica, Leudo fue condenado en 2012 por liderar envíos de droga a Norteamérica (expediente 10‑00463‑0622‑PE). En ese proceso, lo defendió José Miguel Villalobos Umaña, abogado del presidente Rodrigo Chaves Robles.

Según la documentación de la DEA, las pruebas incluyen conversaciones de exmiembros de la organización y testimonios de participantes en las operaciones. Se acusa a los cuatro de conspiración para fabricar y distribuir cinco o más kilogramos de una sustancia con detectables trazas de cocaína, con conocimiento e intención de importarla ilegalmente a Estados Unidos.

Uno de los Cooperating Witnesses o testigos cooperantes (CW‑1) declaró que, en 2016, “Alex” y dos cómplices —un costarricense (CC‑1) y un guatemalteco (CC‑2)— coordinaron el traslado de 43 paquetes de cocaína desde Costa Rica hacia Nicaragua. No obstante, el cargamento fue robado (“tumbonazo”) en el camino, lo que retrasó la operación.

Por otro lado, el informe señala una venganza armada en 2023: miembros del mismo grupo criminal increparon violentamente a uno de los involucrados en aquel robo de 2016, dejando claro el nivel de peligrosidad de la red a la que se le atribuye operar desde al menos 2008 en varios países de América.

Mientras los tres detenidos cumplen dos meses de prisión provisional, Leudo sigue siendo el “objetivo número cuatro” de la DEA, y su paradero continúa siendo un enigma para las autoridades costarricenses y colombianas.

"Según CW-3, el traficante y cómplice guatemalteco (en adelante, "CC-2") lo contactó en representación del señor Leudo Nieves y CC-1 para transportar aproximadamente 43 kilogramos de cocaína de Costa Rica a Guatemala. CW-3 recibió la cocaína en Costa Rica y luego proporcionó los 43 kilogramos de cocaína a su socio y cómplice (en adelante, "CC-3") para importar la cocaína a Nicaragua, pero CC-3 robó la cocaína", apunta la documentación.

Años después, en febrero del año 2023, Leudo y otro de sus socios (CC-4 cómplice) llegaron armados al negocio de CW-3 en Costa Rica para recuperar los 43 kilos de cocaína que les debía, sin embargo, no se detalla como terminó ese enfrentamiento.

Uno de los últimos movimientos de droga con el que se relaciona a Leudo Nieves y uno de sus socios identificado en el expediente de la DEA como CC-4 (cómplice 4) fue en febrero del 2023, cuando según relató el testigo de la DEA, el colombiano "robó uno de los camiones de CW-3 debido a la deuda por los narcóticos y pretendía que CW-3 saldara la deuda restante con dinero en efectivo o cocaína".

Finalmente, el 27 de julio de 2023, otro cómplice (CC-5), socio de "Brando", le informó al ahora testigo de la DEA que el ahora fugitivo le ofreció aproximadamente 49 kilogramos de cocaína, marca "Reina", a un precio aproximado de $4.700 por kilogramo, incluyendo los costos de transferencia de dinero.

Antes de eso ya se conocía que después de que Leudo Nieves salió de prisión en el 2015 tras aceptar los cargo de tráfico internacional y pasar solo 4 años tras las rejas, se dedicó nuevamente al mismo negocio, pues se le identificó en varios movimientos en el 2016 con cargamentos de Panamá a Costa Rica.

También lo vinculan con otro envío de 313 kilogramos de droga ocultos en una embarcación marítima en Pizarro, Chocó, los cuales fueron decomisados por la policía gracias a una alerta que ingresó a la agencia antidrogas de Estados Unidos, así como otros de 300 kilogramos de cocaína en el 2013 y una más en 2015 que movió junto a varios socios en Panamá.

Lo siguen buscando

De amplia trayectoria delictiva, Leudo desapareció del radar hace varios años. Incluso circuló el rumor en Colombia y Costa Rica de que había sido asesinado en su país natal; sin embargo, no existen reportes oficiales que confirmen su fallecimiento en ninguna de las dos naciones.

El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) ha coordinado esfuerzos con su homóloga colombiana para recabar información sobre Leudo, pero hasta la fecha no ha logrado ubicarlo.

“Existe la posibilidad de que se trate de un cuerpo hallado en Colombia, aunque no hay certeza de que sea el suyo. También podría ser información destinada a desviar su localización. Sabemos que, en determinado momento, salió del país”, explicó una fuente judicial vinculada al caso.

Otra fuente detalló que Leudo fue investigado en un reciente expediente por lavado de dinero vinculado al narcotráfico, pero que, al rastrear a los integrantes de la organización, fue el único cuya ubicación no pudieron determinar.

Incluso, en el Alcance n.º 204 del Diario Oficial La Gaceta n.º 229, del 10 de diciembre de 2018, aparece en una lista de propietarios de vehículos involucrados en colisiones, de quienes se desconoce el paradero.

Asimismo, el Juzgado de Tránsito del II Circuito Judicial de San José (Goicoechea) intentó notificarlo para que rindiera declaración por un accidente de carretera en el que estuvo involucrado en 2018, sin éxito.