Quitar obligatoriedad de la vacunación sería atentar contra la salud pública, advierten científicos
Gobierno entrante ha dejado en claro su posición de no obligar a inocularse contra el virus
(CRHoy.com) La salud pública estaría en riesgo, si se llega a concretar la intención del gobierno entrante de dejar sin efecto la obligatoriedad de la vacunación contra el COVID-19, así lo advierten los científicos que le llevan el pulso a la emergencia sanitaria en el país.
El presidente electo, Rodrigo Chaves, destacó previo a la segunda ronda que, en su gobierno, se iba a vacunar el que quisiera y el que no, que cumpliera los protocolos para evitar los contagios de esta enfermedad.
Entre tanto, a finales de marzo anterior, el vicepresidente electo, Stephan Brunner, fue más allá y se comprometió con un grupo de padres de familia a que no se les iba a imponer la inyección para el virus SARS-CoV-2.
El economista y ahora político afirmó a través de un video que, el Estado no tenía por qué obligar a la inoculación. "Les vamos a poner en claro las ventajas de la vacunación, pero si a pesar de esta asesoría, ustedes deciden no vacunarse, no los vamos a obligar", señaló.
Iniciar cuarta dosis
Para el demógrafo y salubrista, Luis Rosero Bixby, esta decisión no tendría sentido y sería un riesgo para la salud pública.
"En Costa Rica, las vacunas son obligatorias desde hace muchos años y no tiene sentido de que en esta pandemia no se continúe con esta medida de salud pública que ha demostrado ser efectiva", resaltó.
Según Rosero Bixby, quizás algunas personas no crean en la efectividad de la vacuna porque esta no logró el cometido de evitar los contagios, pero sí ha sido efectiva en hacer que -en caso de contagio- la enfermedad, sea menos severa y además reduzca el riesgo de muerte.
Rosero sugiere a la próxima administración que, lejos de dejar de lado la vacunación, inicien cuanto antes con la campaña para colocar el segundo refuerzo contra el virus, entre la población más vulnerable ante posibles surgimientos de otras variantes.
"Ojalá empiecen a aplicar la cuarta dosis a las personas con el sistema inmune comprometido, porque si esas personas se contagian la van a pasar muy mal", señaló Bixby.
Enorme retroceso
Para la exministra de Salud, María Luisa Ávila, quien era jerarca de esa cartera en medio de la aparición de la influenza AH1N1, la idea de omitir la inoculación obligatoria contra el COVID-19 o de cualquier otra que integran el esquema de vacunas del país, es una ocurrencia que sería un "enorme retroceso" para el sistema de salud.
"Estuve en Ecuador y los grupos que abogan por los derechos envidian el sistema de vacunación de Costa Rica y la Ley General de Salud y yo les decía ‘es increíble, en Costa Rica más bien lo quieren quitar'", dijo.
Sin embargo, la pediatra asegura que es baja la cantidad de personas que se resisten a la vacunación en el país.
"Las coberturas (de vacunación) han sido bastante buenas. Todavía quedan ahí uno que otro grupo que no quiere vacunarse y si no quieren y es un adulto, tiene su derecho, aunque uno desea que cambien (de pensamiento) pero no puedo amarrarlo y sostenerlo y vacunarlo a la fuerza. Es un llamado a la conciencia de cada quien".
Empero, Ávila recomienda seguir colocando esta inyección en los menores de edad, porque es "una vacuna que tiene tantos millones de dosis aplicadas y que le tengan confianza al sistema, porque a nadie se le va a ocurrir poner una vacuna para dañar a nadie".
Alta vacunación
Al corte de este 18 de abril, el Sistema Integrado de Vacunas (SIVA) de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) da cuenta de 10.508.830 vacunas aplicadas en el país desde el inicio de la campaña de inmunización contra el COVID-19 en diciembre de 2020.
De ellas, 4.386.191 han sido primeras dosis; 4.055.152 segundas inyecciones; y 2.067.487 dosis de refuerzo.