Pasó de ser ingeniero a conductor informal en un abrir y cerrar de ojos

(CRHoy.com) Óscar Rivas es un venezolano de 67 años, quien llegó al país hace dos años y comenzó su vida de cero con su familia tras huir de sus tierras por la dura realidad que atraviesa Venezuela.

Rivas es un Ingeniero en Telecomunicaciones y su vida dio un giro de 180° grados y ahora es un conductor informal acá en Costa Rica, trabajo que le permite salir adelante con su esposa e hijas.

En un principio no quería salir de mi país, pero en vista de unos problemas ajenos a mi voluntad tuve que abandonar mi país (…) analizando los países elegimos mi esposa y yo Costa Rica, por su gran bondad, por su gente y por su sistema político, más sólido"

Aquí estamos haciendo vida en un pequeño país, pero con un gran corazón, con gente muy bondadosa porque hemos recibido un gran apoyo moral de ustedes", contó Oscar a CRHoy.com

"Yo no me siento un extranjero acá, me siento un tico más, porque de verdad es la forma en cómo me han tratado, como una persona más de acá de Costa Rica y me siento muy complacido con eso", agregó

Rivas llegó al país con su esposa en busca de una nueva vida, un nuevo inicio donde pudieran estar tranquilos con sus hijas, quienes son igualmente profesionales.

"Mi hija arquitecta ya estaba acá en Costa Rica cuando nos vinimos, ya ella nos tenía apartamento, todo amueblado, con sala, cocina, con todas las comodidades para cuando llegáramos, entonces cuando ella pudo organizarse, nos vinimos para este país", puntualizó.

Cuando don Óscar y su esposa llegaron en "calidad de refugiados", el país les dio 3 meses para homologar su licencia y es así cuando comienza su travesía como conductor en una plataforma privada.

"A partir de ahí me dieron un permiso laboral para poder trabajar, y bueno, el trabajo que tengo me ayuda a lo que es tener una terapia ocupacional y a mi edad me ayuda a conocer muchas cosas", agregó Rivas.

Esta familia venezolana es un grupo de profesionales talentosos, Óscar es un Ingeniero en Telecomunicaciones, su esposa psicóloga y una de sus dos hijas es arquitecta y la otra médico.

La vivencia de este venezolano, quien dejó todo en su país para comenzar de cero en CR mantiene la esperanza en un trabajo que le permita hacer lo que ama de su profesión, las 'telecomunicaciones', carrera que le permitió tener una estabilidad para su familia, así como las experiencias que le acompañará por siempre.

"Yo trabajé en una empresa estatal de telecomunicaciones en Venezuela. Logré ser jefe en control de tráfico internacional, que fue mi último cargo. También fui presidente organizador de un congreso de telecomunicaciones", contó.

En casi un abrir y cerrar de ojos, la vida de esta familia cambió por completo. Rivas logró especializarse en telefonía móvil en Suecia, y visitar varios países para lograr su sueño, sin embargo, hoy su día a día es distinto.

El conductor tiene dos hijas que son profesionales en la carrera elegida, no obstante, Iraida Rivas -médico- y su otra hija, Diana Rivas -arquitecta- se encuentran igualmente en el proceso de homologación de sus títulos para poder ejercer en el país y recibir los salarios respectivos.

Tanto como Iraida y Diana se encuentran esperando su oportunidad laboral que les permita posicionarse como las profesionales que son.

Proyecto en mente

Como símbolo de agradecimiento, así como por la experiencia de vida que tiene don Óscar, el mismo desea emprender con una herramienta que estaría dirigida para la población de escasos recursos.

Se trata de calentadores solares que les permita a las personas que no tengan una economía alta, acceder a estos recursos.

"Es hacer unos calentadores solares para que la gente tenga agua caliente y de un precio muy pequeño para que cada uno tenga facilidad a un sistema de estos"

"Una vez que yo me capitalice haré algunos proyectos, si he tenido en mente de hacer esto para que la gente que tenga pocos recursos pueda tener agua caliente", aclaró.

Todas estas metas que planea Óscar son alimentadas por la fe y las ganas de superarse cada día, por lo que pide a las personas a no renunciar nunca a sus sueños.

"La migración no es fácil, pero está en la mente. Hay que tener fortaleza interna para poder hacerlo y enfocarse en el nicho, en la fortaleza de cada uno y explotar esa fortaleza", detalló.

Actualmente, don Óscar continúa conociendo y recorriendo el país en su vehículo, atendiendo a las personas que adquieren el servicio de traslado de un punto a otro. Y sus hijas esperan con paciencia que los documentos de sus títulos terminen convalidándose para de esta manera ejercer sus títulos como se debe.

Además, Rivas no descansa para lograr su sueño de aportarle al país con sus conocimientos y espera pronto tener buenas noticias con un trabajito en el área de telefonía móvil.