Participantes de Nace una estrella se robaron el show previo a Myriam Hernández
El escenario del anfiteatro Coca-Cola de Parque Viva se llenó de magia, color y mucha música para recibir a las estrellas del formato de Teletica Nace una estrella, quienes fueron los teloneros de la cantante Myriam Hernández.
El primero en salir a deleitar con su inconfundible voz fue Alberto Murillo, quien interpretó "Perfume de gardenias" con una energía inigualable. El público no dudó en aplaudir de inmediato la pequeña, pero poderosa, presentación con la que el cantante dio un inicio sin comparación a la velada.
La emoción subió aún más cuando Verónica Quirós salió al escenario para interpretar "Bésame mucho". Su vestido de satén amarillo contrastaba perfectamente con el juego de luces que acompañaba a los músicos.
Luego de esas encendidas presentaciones, Maribeth Rivas avivó la energía con "Derroche". Los coros que realizó provocaron la euforia de los asistentes.
Los más pequeñitos también brillaron en esta fabulosa noche. Santiago Abarca, desde el primer instante, no dudó en mover las caderas y dar lo mejor de sí con su interpretación de "Yerbero moderno". El público se mostró eufórico al ver cómo Abarca ofrecía no solo voz, sino una gran puesta en escena, luciendo un traje rojo con negro que combinaba su elegancia con entusiasmo. "Muchas gracias, espero les haya gustado", dijo el pequeño al finalizar.
Con el paso de los minutos, las presentaciones se ponían más intensas. Los grandes ritmos continuaron cuando Andrés Zamora salió al escenario con su inconfundible cabello crespo y un vestuario que elevó su show. La clásica chaqueta negra nunca falla. Interpretó: "Así es la vida".
Cada vez que un participante terminaba, otro salía de inmediato al escenario para que las emociones no bajaran. La pequeña Sofía Castro apareció luciendo un vestido veraniego blanco con negro para interpretar "Corre, corre corazón", de Jesse y Joy. Su rostro reflejaba la emotividad que puso sobre el escenario, lo que provocó la locura entre los asistentes gracias a su dulce voz.
A las 7:05 p. m., la emoción estaba al máximo, y se elevó aún más cuando José Martín salió al escenario a complacer a los fanáticos de Arjona con "Me enseñaste". Su interpretación, junto a la de la banda, transportó tanto a quienes apenas llegaban como a quienes esperaban desde horas antes. Las coristas que acompañaban a los participantes lograron que cada voz se elevara aún más.
"¿Cómo está Parque Viva esta noche?", exclamó Albin Fernández, "La Ardilla", al subir al escenario con un poderoso rock. Desde su ingreso al programa, ha demostrado ser un gran fanático del género.
El pequeño Maximiliano Cruz salió a escena con la conmovedora canción "Un velero llamado libertad". Con su traje negro, impregnó de emotividad su presentación.
"Pero es que en realidad no aceptan nuestro amor", coreaba el público cuando Karen Box apareció para interpretar la icónica canción, "Simplemente amigos", luciendo un vestido verde de lentejuelas que no pasó desapercibido.
Rosmery Navarro fue la siguiente en escena con "Ya te olvidé", de Yuridia, una canción con fuerza y emoción a la que Navarro le imprimió gran potencia. Sus altas tonalidades se sintieron con el corazón, haciendo que muchos vivieran la canción más allá de una simple interpretación. Su vestuario plateado hizo que su presencia brillara con luz propia.
El vestido beige que arrastraba la pequeña Vivianne Juárez le dio un aire de elegancia al interpretar Qué ganas de no verte más. Su actuación no fue solo una canción: fue una interpretación total que arrancó fuertes aplausos.
El ganador de la categoría infantil, Juan David Montero, subió al escenario para interpretar Un beso y una flor. Lo hizo impecablemente, portando un saco celeste. Al final, brindó un pequeño pero poderoso mensaje: "Muchas gracias".
A las 7:20 p. m., la emoción estaba al tope. En ese momento, Franciny Castillo subió al escenario con un vestido rojo y saludó con un enérgico "¡Buenas noches, Parque Viva!", antes de interpretar El triste.
El gran ganador de la categoría adulta, Yeris Lobo, apareció con un saco rojo —el color favorito de la noche, al parecer— para interpretar "Cuando quieras, donde quieras". Su poderosa y peculiar voz hizo que cientos de asistentes alzaran sus celulares para grabarlo. Su historia en el programa conmovió a muchos, y su presentación puso los pelos de punta. Se apoderó del escenario, y el público cantó con él.
"Muchas gracias a todos ustedes. Nosotros no hacemos Nace una estrella, ustedes lo hacen por venir a vernos. ¡Que disfruten de Miriam Hernández!", cerró Lobo para culminar la participación de los artistas en el show y esperar con ansias a la gran Myriam Hernández
