Vea la licencia de Diablo que le encontraron a sujeto muerto y por la cual investigan a agente del OIJ

Una licencia de conducir de Alejandro Arias Monge, conocido como Diablo y calificado por las autoridades como el hombre más buscado del país, originó una investigación interna contra una funcionaria del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y una causa paralela para esclarecer por qué un sujeto fallecido en un accidente de tránsito en Cariari de Pococí la llevaba entre sus pertenencias.

CR Hoy tuvo acceso al permiso de conducción del fugitivo, ligado con narcotráfico, homicidios, asaltos, robo de ganado y otros delitos. Ese documento provocó discusiones y reportes en la oficina del OIJ de Pococí por un supuesto ocultamiento por parte de la investigadora que ahora está bajo la lupa.

Se trata de una licencia tipo A3, expedida por el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi) para conducir motocicletas de alta cilindrada. La policía confirmó su autenticidad, aunque estaba vencida desde el 6 de julio del 2018.

Entre los datos personales del supuesto narco aparecen su número de cédula, año de emisión de la primera licencia, tipo de sangre, fecha de nacimiento y nombre completo.

Los agentes hallaron el documento en poder de Luis Guevara Corrales, de 51 años, quien murió en un choque entre una moto y un camión en Astúa Pirie de Cariari el 23 de setiembre del 2025.

La policía judicial llegó al sitio, revisó las pertenencias del fallecido y encontró la licencia del prófugo. A pesar de su relevancia, ninguno de esos dos elementos se incorporó en el libro de indicios ese día.

Expediente abierto

Dos investigadores atendieron la escena: una mujer de apellido Rojas y su compañero. Él reportó ante sus jefes el hallazgo de la licencia tras conocer que se omitió la incorporación al libro y ella lo hizo hasta dos días después, tras recibir una reprimenda por parte del director de la policía judicial, Randall Zúñiga.

La Inspección Judicial de la Corte Suprema de Justicia abrió el expediente 25-003541-0031-DI para indagar posibles omisiones durante esas diligencias.

Consultado sobre el caso, Michael Soto, director interino del OIJ, indicó que por ahora no puede referirse al tema por tratarse de un proceso en investigación, aunque reconoció que sí conocen lo denunciado.

CR Hoy reveló este caso el 17 de noviembre. El Poder Judicial confirmó entonces la apertura del expediente administrativo a inicios de octubre para determinar quién tuvo participación directa en las presuntas anomalías.

"(…) nos indican en la Inspección Judicial que efectivamente existe denuncia anónima del 8 de octubre de 2025. La investigación lleva el número de sumaria 25-003541-0031-DI, no hay persona acusada, no hay traslado de cargos, la misma se encuentra en investigación preliminar".

CR Hoy tuvo acceso al documento que llegó al OIJ denunciando los hechos. La queja señala que los agentes de la oficina del OIJ Pococí-Guácimo mantienen preocupación por lo ocurrido.

Recordaron que hace poco separaron a varios funcionarios por vínculos con un grupo criminal y ahora temen que una persona de rango medio pueda estar envuelta en situaciones similares, "poniendo en riesgo fuga de información delicada o inclusive ocultamiento de información del Crimen Organizado de la zona, específicamente con el grupo criminal del muy conocido Alejandro Arias Monge".

El expediente también revela el nombre completo de la mujer de apellido Rojas, a quien vinculan sentimentalmente con un juez de esa misma jurisdicción, cuestionado por resoluciones que beneficiaron a miembros de la agrupación de Diablo.

Los denunciantes destacaron que llamó la atención que Rojas acudiera al levantamiento del cuerpo en ese accidente, ya que no suele hacerlo salvo que se trate de un caso de especial atención. Lo más relevante, según la denuncia, es que los hechos estén bajo investigación precisamente el día en que ella asistió al sitio del suceso.

Tardó más de 24 horas en incorporar licencia

El relato indica que la funcionaria llevó la licencia de Diablo a la oficina, pese a que su compañero insistió en que debían reportarla de inmediato, ya que pertenecía al sujeto más buscado del país.

Esa situación trascendió y otros funcionarios alertaron a una jefatura de confianza distinta a la de Pococí para denunciar que algo irregular estaba ocurriendo.

En apariencia, Randall Zúñiga López, director del OIJ, se enteró de los hechos y llamó a la oficina regional para hablar directamente con Rojas y preguntarle qué había sucedido con el permiso de conducir que no reportaron en el libro de evidencias.

"(…) dichos hechos ocurrieron en día 23/09/25 y no fue hasta el día 25/09/25 que dicha funcionaria ingresó dicha licencia del Diablo como indicio, esto comprobable en el libro de indicios de la delegación, específicamente folio 085 del libro 122-2025, esto sí, posterior a la llamada del director del OIJ, don Randall Zúñiga".

Zúñiga, actualmente suspendido de sus funciones, explicó que, debido a esa condición, no puede referirse a temas vinculados con labores propias del OIJ.

Los denunciantes reprocharon que la funcionaria, especialista de escena, conoce que todo indicio debe ingresarse al libro en menos de 24 horas según el manual. Aun así, incumplió ese plazo y registró la licencia hasta que recibió presión de la jefatura.

"(…) ella es la que supervisa y revisa los formularios de inspección a sitios de homicidios, tentativas de homicidios, robos agravados y entre otras, la mayoría son relacionadas con crimen organizado.

Por lo que clamamos poder laborar en ambiente libre de investigadores corruptos donde su honor se vea comprometido, como ya ha sucedido anteriormente con Michael Mora Garita que fue relacionado a Alias Coco, o también como el caso de Randall Alias Míster Músculo, inclusive este último relacionado con el asesinato de nuestro querido y excelente exjefe Lic Geiner, del cual aún lamenta el fallecimiento esta delegación, más aun teniendo conocimiento que un ex OIJ corrupto fuera relacionado con los hechos de este", dice la denuncia.

Ante este panorama, los denunciantes pidieron apartar a la funcionaria para evitar que afecte las investigaciones en curso y para disminuir tensiones con la jefatura de esa oficina, que según la denuncia respalda a la funcionaria por su cercanía con ella.

La Inspección Judicial confirmó que, por ahora, la investigación no se ha individualizado; es decir, no existe una persona señalada de forma directa. Será necesario esperar más prueba para determinar si corresponde dirigir cargos contra algún funcionario o funcionaria.

¿Qué hacía esa licencia ahí?

Fuentes judiciales que investigan casos ligados con este líder criminal explicaron que muy pocas personas tienen acceso a una licencia o documento oficial de Arias Monge.

Generalmente se trata de personas de su círculo más cercano o de situaciones en las que necesita amedrentar a habitantes de sus zonas de influencia. En esos escenarios envía el documento como respaldo para que sus matones actúen en su nombre.

En este expediente, al tratarse de una investigación activa, aún no se determina si el fallecido tenía relación con Arias o con su organización. Justamente por eso el decomiso de esa licencia era fundamental y debió incluirse como evidencia desde el momento en que se encontró en la escena.

Un agente judicial añadió que también existen casos de cobradores de Monge que portan permisos o cédulas vencidas del fugitivo para actuar con su consentimiento. Esto sucede en situaciones vinculadas con préstamos "gota a gota", cobro de peajes, amenazas para imponer la venta de productos de contrabando —como cigarrillos y licores— o ultimátum contra personas que, según sus rivales o por traiciones internas, "tienen los días contados".