¿Tiene mascotas? EI inicio de año es ideal para revisarlas, vacunarlas y desparasitarlas
Imagen con fines ilustrativos. (CRH).
El inicio del año es una oportunidad para renovar rutinas y fortalecer hábitos de bienestar en los hogares costarricenses.
Entre ellos, el cuidado de perros y gatos ocupa un lugar esencial, ya que la revisión veterinaria, la vacunación y la desparasitación, tanto externa como interna, siguen siendo claves para garantizar su salud durante todo el año, recomendó MSD Animal Health, empresa biofarmacéutica.
Durante enero, muchas familias reorganizan horarios y actividades, lo que convierte este período en un momento ideal para actualizar el plan sanitario de las mascotas.
Una revisión anual, con el apoyo del médico veterinario, permite detectar de forma temprana cualquier condición de salud y definir las medidas preventivas necesarias para protegerlas frente a enfermedades transmisibles.
Estas son algunas recomendaciones para comenzar el año protegiendo la salud de perros y gatos:
- Agende un chequeo veterinario anual: permite evaluar el estado general de salud y adaptar un plan de cuidado según la etapa de vida de la mascota.
- Actualice los esquemas de vacunación: refuerce la protección contra enfermedades contagiosas y prevenibles.
- Desparasite interna y externamente: mantenga un control regular según el estilo de vida del animal y las indicaciones del profesional veterinario.
- Observe cambios en su comportamiento: variaciones en el apetito, la energía o los hábitos pueden ser señales tempranas de problemas de salud.
- Consulte con su veterinario: solicite orientación para un plan sanitario personalizado según las necesidades específicas de su mascota.
- Procure un entorno seguro e higiénico: una rutina de limpieza en el hogar ayuda a prevenir la proliferación de parásitos.
La medicina preventiva no solo favorece el bienestar físico de las mascotas, sino también la convivencia con sus familias.
Actualizar las vacunas, mantener el control de parásitos mediante el uso de tratamientos innovadores y de larga duración, así como vigilar el comportamiento animal, ayuda a prevenir riesgos que pueden afectar la salud pública y el entorno familiar.