Recursos escasos y baja calidad docente entre los principales problemas del sistema educativo
Ante falta de incentivos, formación profesional docente registra tasa de participación baja.
(CRHoy.com) Según el IX Informe Estado de la Educación (2023), Costa Rica enfrenta un panorama preocupante en su sistema educativo debido a una disminución en la inversión y un deterioro en las condiciones para el desarrollo profesional docente.
Estas tendencias, que ya estaban presentes antes de la pandemia, se han agravado durante el período 2020-2023, afectando a todos los niveles educativos, desde la etapa preescolar hasta el colegio.
El investigador Dagoberto Murillo Delgado destaca que el debilitamiento en la inversión es una de las tendencias más alarmantes.
"Respecto al Producto Interno Bruto (PIB), el presupuesto asignado para educación en 2023 ha sido el más bajo de los últimos nueve años, lo cual impacta fuertemente en las políticas que buscan la permanencia de poblaciones vulnerables en el sistema educativo, por ejemplo, mediante incentivos como becas, transporte o el servicio de comedor", explicó el investigador.
Mejorar la calidad del sistema educativo no solo requiere abordar los rezagos históricos en la educación del país, sino también enfrentar los desafíos surgidos a raíz de la pandemia. Para lograrlo, es indispensable que se destine los recursos necesarios, sin embargo, el presupuesto del actual Gobierno de Rodrigo Chaves es el más bajo de los últimos 9 años (5,6% del Producto Interno Bruto).
"El desarrollo profesional docente en el sistema educativo es un desafío permanente para el MEP y es un elemento fundamental para garantizar la educación de calidad. Especialmente después de la pandemia, es necesario atender los rezagos estudiantiles en aprendizajes y habilidades básicas", agregó Murillo.
Asimismo, el informe señala que la inversión en el sistema educativo ha disminuido, lo que pone en riesgo la calidad de la enseñanza.
Otro factor que afecta la capacitación docente es que, según lineamientos del MEP, ninguna persona docente puede ser convocada a participar de capacitaciones profesionales en horario laboral ni tiene la obligación de participar en su horario libre.
Ante la falta de incentivos para capacitarse, se observa un descenso de 79 puntos porcentuales en la tasa de participación docente en los cursos disponibles en el período 2018-2022", señaló el especialista.
Esta situación repercute principalmente en los estudiantes, quienes enfrentan un entorno de aprendizaje cada vez más precario.
"Si queremos calidad en la educación en términos de aprendizaje, entonces debemos tener solo docentes de alto nivel, de alta calidad y esto pasa por todos los procesos de reclutamiento, selección, nombramiento, capacitación, así como también en la parte disciplinaria".
Un docente mediocre o un docente con muy bajo rendimiento no puede mantenerse ahí como si nada pasara", según explicó a CRHoy.com Pablo Chaverri, investigador del Instituto de Estudios Interdisciplinarios de la Niñez y la Adolescencia (INEINA) de la Universidad Nacional (UNA)
Carreras en educación
La cantidad de graduados de universidades que mantengan sus carreras educativas acreditadas es uno de los factores que influyen en la calidad educativa.
La acreditación no solo garantiza un nivel mínimo de calidad, sino que también influye en el nivel de exigencia y excelencia de los planes de estudio.
"La amplia mayoría de las carreras de Educación que hoy por hoy en su mayoría están en manos de universidades privadas, algunas de ellas no están acreditadas ante el Sistema Nacional de Acreditación de la Educación Superior, es decir, no pueden dar garantía que su formación cumple con estándares de calidad. Lo que tienen para operar es el permiso de CONESUP, pero no controla estándares de calidad", agregó el investigador de la UNA.
Ante esto, la mejora del sistema de contratación, carreras acreditadas y demás es uno de los tantos pasos a aplicar, ya que se requiere una capacitación continua y especializada para los profesionales de la educación.
Esto implica no solo el desarrollo de habilidades técnicas, sino también el fortalecimiento de las habilidades blandas, como la empatía, la comunicación efectiva y la adaptabilidad.

Debilitamiento en inversión educativa
El incumplimiento al mandato de la Constitución Política por parte del Gobierno de Rodrigo Chaves es evidente, pues el artículo 78 de la Carta Magna es claro al indicar que se debe destinar el 8% del Producto Interno Bruto (PIB) a educación.
Según el informe, en términos reales, la inversión social en educación por habitante ha disminuido en un preocupante 6,4% durante el período comprendido entre 2017 y 2021.
Este desnivel ha tenido un impacto directo en los programas de equidad, los cuales tienen como objetivo promover el acceso y la permanencia de la población estudiantil en situación de pobreza en el sistema educativo.
Para garantizar una educación de calidad que prepare a los estudiantes para enfrentar los desafíos del futuro, es necesario reforzar el perfil de los docentes a través de una revisión integral del sistema de contratación, el desarrollo de habilidades blandas y la promoción de la capacitación continua, según detalla el informe.
El Ministerio de Educación Pública (MEP) debe cumplir un papel fundamental en este proceso y hacerse cargo para elevar los estándares profesionales en el campo educativo.
En resumen, Costa Rica enfrenta desafíos significativos en su sistema educativo, marcados por una disminución en la inversión y un deterioro en las condiciones para el desarrollo docente.
