Logo

Femicidio de Nadia Peraza irá a juicio: juez avaló elevar el caso tras audiencia preliminar

Por José Adelio Murillo | 3 de Dic. 2025 | 3:58 pm

El Juzgado Penal de Heredia dio visto bueno a la solicitud de la Fiscalía y de la familia de Nadia Jeanette Peraza Espinoza para que la causa penal por su femicidio sea llevada finalmente a juicio.

Jeremy Mauricio Buzano Paisano, expareja de la muchacha y padre de su hija, se sentará en el banquillo de los acusados. Este miércoles se llevó a cabo la audiencia preliminar, en la cual el Ministerio Público presentó la acusación con una solicitud de apertura a juicio.

Un juez de la República admitió darle trámite y ahora se deberá oficializar la fecha del debate oral y público, que se realizaría entre las primeras semanas del 2026. El proceso tomaría al menos dos meses, dada la cantidad de prueba y los casi 40 testigos que brindarán su relato. 

Joseph Rivera, abogado de la familia de la víctima, confirmó que tanto la querella como la acción civil resarcitoria que presentaron fueron admitidas por el Juzgado este miércoles.

"El mensaje es firme: que se cuiden los femicidas porque la ley es contundente. Existe cero tolerancia hacia los agresores y quienes odian a las mujeres", indicó al término de la audiencia preliminar.

Buzano es señalado de cometer al menos 20 delitos en contra de su expareja, a quien habría asesinado y desmembrado de forma cruel. Además del femicidio, tanto la Fiscalía como la familia —mediante la querella— esperan que se le castigue por delitos como sustracción patrimonial, suplantación de identidad y estafa informática.

Por ello, aguardan que la pena sea ejemplarizante y que al sujeto se le imponga el máximo castigo que permite la ley costarricense, que establece el límite en 50 años de cárcel. Mientras se espera el juicio, el sospechoso se mantiene en prisión preventiva al menos hasta el 16 de febrero.

playlist-video-0-0lfchb

La investigación por el femicidio de Peraza reveló un crimen sin precedentes en Heredia, tras el hallazgo de partes humanas en distintos sitios, incluido el interior de un electrodoméstico y un lote baldío cercano a la vivienda que compartía con su pareja, único sospechoso del asesinato.

La escena del crimen habría sido la casa en San Rafael de Heredia. Un familiar cercano fue testigo clave al observar un charco de sangre de unos 2,5 metros y un fuerte olor a putrefacción, que en un inicio el imputado atribuyó a un supuesto accidente.

Las pesquisas determinaron que, tras la desaparición de Nadia el 20 de febrero de 2024, la vivienda fue remodelada para ocultar evidencias: se pintaron paredes, se cambió el piso cerámico y se realizaron otros arreglos.

Pese a ello, la Unidad Canina del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detectó olor a sangre humana en el dormitorio y en una pila cercana a la sala. Pruebas forenses preliminares con Kastle–Meyer y luminol confirmaron la presencia de sangre de la víctima.

Posteriormente, un transportista contratado por Buzano trasladó pertenencias de Peraza, incluida la refrigeradora, que resultó inusualmente pesada, lo que despertó sospechas. En su interior, dentro de bolsas plásticas, fueron hallados restos humanos. Otros fragmentos aparecieron a unos 50 metros de la vivienda.

La madre de la víctima fue sometida a pruebas de ADN que confirmaron la coincidencia genética con los restos encontrados. La complejidad del caso aumentó por la dispersión de los restos, el uso de herramientas para el descuartizamiento y las remodelaciones para borrar evidencias.

El expediente judicial también revela que el sospechoso se hizo pasar por Nadia mediante mensajes de texto para engañar a la familia y retrasar la denuncia por desaparición.

Jeremy Mauricio, de 26 años, permanece recluido desde mayo de 2024 y ha sido trasladado entre distintos centros penitenciarios, donde ha sido objeto de agresiones por parte de otros reclusos.

Un informe del OIJ incorporado al expediente destaca un elemento especialmente macabro: los investigadores creen que existieron actos de necrofagia y canibalismo. El primer término se refiere al consumo de cadáveres y el segundo, al consumo de carne de la misma especie.

"En esta línea, es necesario referirse al concepto de necrofagia caníbal, el cual se refiere al consumo de los restos de un individuo muerto de la misma especie; en este caso el personal de investigación del OIJ de Heredia, maneja como hipótesis por la forma que se encontraron en el congelador (…), que pudo haber necrofagia caníbal, acto que podría tener como origen los deseos de dominación sobre su víctima, como consumación máxima de la dominación y poderío que podría ejercer en el ciclo violento que se encontraba la pareja; sin embargo, no existen más elementos que permitan afirmar la ocurrencia de este fenómeno", cita el documento.

Los investigadores sostienen que esta conclusión se apoya en la forma en que el imputado habría descuartizado a la muchacha y dispuesto los restos humanos, la mayoría de los cuales fueron hallados dentro de un refrigerador.

De acuerdo con la investigación, Buzano habría aprovechado la confianza preexistente con la víctima, ya que ambos residían en el mismo apartamento y mantenían una relación sentimental de la cual procrearon una hija.

Según la reconstrucción de los hechos obtenida de entrevistas familiares, el ataque habría sido repentino y violento, con uso de amenazas verbales y fuerza física.

El informe señala que el sospechoso golpeó contundentemente a Nadia, provocándole una incapacidad de reacción o defensa, lo que le permitió controlar la situación y acabar con su vida.

Este tipo de agresión, conocido como "ataque relámpago", se caracteriza por el uso inmediato y brutal de la fuerza física —controladora, sexual o letal— destinada a incapacitar o asesinar a la víctima.

Comentarios
0 comentarios