Estudiante tico gana medalla de bronce en la Olimpiada Juvenil Internacional de Ciencias

Estudiante Matías Andino Castellano recibiendo la medalla de bronce. Créditos de la Fotografía Kenneth Castillo Rodríguez
El estudiante Matías Andino Castellano obtuvo una medalla de bronce en la XXII Olimpiada Juvenil Internacional de Ciencias (JJSO, por sus siglas en inglés), celebrada del 23 de noviembre al 2 de diciembre en Sochi, Rusia.
Andino Castellano es estudiante del Colegio Saint John Baptist y, como parte de la competencia, tuvo que resolver problemas teóricos complejos, así como desafíos experimentales en las tres áreas científicas: Biología, Química y Física.
En esta edición participaron 24 delegaciones compuestas por seis estudiantes cada una, quienes pasaron un riguroso proceso de selección en sus respectivos países.
En el caso de Costa Rica, además de Andino, la delegación estuvo conformada por los siguientes estudiantes:
- Rafael Sancho Dive, del Colegio Yurusti (15 años);
- Mauricio Chaverri Trelles, del Colegio Yurusti (15 años);
- Ignacio Camacho Redondo, del Centro Educativo Niño Jesús de Belén (14 años);
- Gabriel Herrera Barrantes, del Complejo Educativo CIT (13 años);
- Santiago Bulgarelli Rivera, del Cornnell Academy (15 años).

De izquierda a derecha: Kattia Bermúdez Campos, Ignacio Camacho Redondo, Mauricio Chaverri Trelles, Santiago Bulgarelli Rivera, Gabriel Herrera Barrantes, Matías Andino Castellano, Rafael Sancho Dive, Kenneth Castillo Rodríguez y Randall Syedd León. Crédito: Universidad Nacional (UNA)
Todos ellos fueron ganadores de la Olimpiada Costarricense de Ciencias 2024 y, durante este año, se capacitaron en Química, Física y Biología.
La delegación costarricense contó con el apoyo y acompañamiento de los tutores Katya Bermúdez Campos (tutora de Física) y Kenneth Castillo Rodríguez (jefe de delegación y tutor de Biología), ambos de la Universidad Estatal a Distancia (UNED), así como de Randall Syedd León, de la Universidad Nacional (UNA), tutor de Química.
"Para nosotros como profesores es sumamente satisfactorio ver a los estudiantes llegar a estas instancias porque sabemos todo el trabajo conjunto que hay detrás. Eso significa participar en procesos selectivos a nivel nacional, ser parte de entrenamientos en las universidades públicas a un nivel mayor, invertir muchas horas de estudio adicionales a la carga académica que tienen en sus colegios e ir a clases inclusive los sábados. El entrenamiento fue muy fuerte, por lo que se requiere disciplina, compromiso, dedicación y mucha pasión por las ciencias naturales", señaló Castillo Rodríguez.
Mientras tanto, Syedd León destacó que "la inversión que hace el país en este tipo de actividades académicas nos parece que va en la dirección correcta, ya que nos permite visibilizar los logros obtenidos a nivel nacional, potenciar las habilidades científicas en nuestros estudiantes y promover las vocaciones científicas en la población juvenil".
El país anfitrión financió la estancia, alimentación y actividades educativas de los estudiantes en el Centro Educativo Sirius, un complejo de alto nivel dedicado al desarrollo de jóvenes talentosos. El transporte aéreo fue cubierto por el Consejo Nacional de Rectores (CONARE), mediante las Vicerrectorías de Investigación.