Amigos y colegas llenan redes de mensajes de despedida para doctor asesinado en Escazú

Amigos y colegas llenan redes de mensajes de despedida para doctor asesinado en Escazú
El fallecimiento de Rafael Omar Pérez Valdés, médico de 65 años asesinado el martes en Trejos Montealegre, Escazú, ha provocado una profunda ola de tristeza entre amigos, exalumnos y conocidos, quienes han inundado las redes sociales con mensajes de despedida y recordatorios del legado humano y profesional que dejó.
La usuaria Katrin Aason expresó la conmoción que dejó la noticia del crimen.
"No hay palabras para expresar mi tristeza. Te adoraré por siempre, mi Rafa".
Por su parte, Esteban Ugarte publicó varios mensajes despidiéndose del médico al que consideraba cercano.
"Despidiendo a un amigo. Buen viaje. Un abrazo grande donde quiera que estés".
Un segundo mensaje escrito por Ugarte, reflejó la huella que Rafael dejó como profesional y mentor.
"Gracias, mi profe Rafael Omar Pérez Valdés, por haber sido tan especial conmigo… por sacar lo mejor de mí en farmacología, por todos los consejos que me diste. Se me parte el corazón saber que pasaste a mejor vida. No me va a alcanzar esta vida ni las que siguen para agradecer que te cruzaras en mi camino".
Otro de sus amigos, Manrique Suárez, dedicó un mensaje extenso en el que recordó el carácter alegre y noble del médico.
"Querido Rafles, Rafael Omar Pérez Valdés. Hoy nos despedimos de tu presencia física, de tus historias y de ese espíritu maravilloso, lleno de bondad y simpatía. Te quedas con nosotros en los recuerdos, y cada vez que queramos volver a estar contigo, bastará con reunirnos en el mejor de ellos. Nos hubiera gustado tener un último abrazo, una última risa compartida, algún improperio lanzado al aire como solo vos sabías hacerlo. Pero la vida no siempre concede lo que uno desea; simplemente es. Y con ello nos quedamos: con la ilusión de que, cuando llegue nuestro momento de partir, estés ahí vos también, querida Rafita. Buen viaje, hermano… buen viaje a la luz"
Un reflejo del país que duele
El escritor y amigo de la familia Camilo Esteban Gamboa Sánchez aprovechó la despedida para reflexionar sobre el deterioro de la seguridad en el país. Su mensaje, ampliamente compartido, lamenta no solo la muerte de Rafael, sino el fallecimiento de Maureen y Toño, adultos asesinados hace 15 días en Alajuelita.
"Querido Rafael Omar Pérez Valdés y Finca Las Lajas Donde Toño Badilla amigos de la familia que fueron arrebatados de la forma más baja asesinados en su casa. Costa Rica ya no es ni la sombra de aquel país que nos arrullaba con paz. Hoy se siente herida, cansada, desconocida. Un lugar donde, en menos de un mes, dos amigos cercanos a mi familia fueron arrebatados de este mundo dentro de sus propias casas, con una violencia tan cruel que el alma se encoge solo de pensarlo. Estas tragedias no deberían formar parte de nuestra cotidianidad. No en esta tierra que alguna vez se enorgulleció de la calma, de la vida sencilla, de la seguridad que dábamos por sentada.
Pero esa Costa Rica parece desvanecerse, como un recuerdo que se va borrando con cada acto de brutalidad que nos golpea. Hoy el miedo se ha vuelto vecino. La impotencia toca las puertas y la tristeza se instala en los hogares de quienes hemos perdido, de quienes seguimos aquí tratando de entender en qué momento dejamos de reconocernos como país. Que estas pérdidas nos duelan lo suficiente como para no conformarnos. Que su memoria ilumine este tiempo oscuro y nos recuerde que merecemos algo mejor que esta Costa Rica rota que estamos viviendo. En paz descansen", escribió Gamboa.
Sobre la víctima
Rafael Omar Pérez Valdés, de 65 años, nacido en Villa Clara en Cuba, es costarricense por naturalización.
Pérez Valdés laboraba para el Ministerio de Justicia y Paz y se desempeñaba como médico en la clínica de La Reforma, así lo confirmó el departamento de prensa de la institución.
Además de su profesión como cirujano, en su perfil de Facebook destacaba su faceta como fotógrafo y artista visual.
En una de sus publicaciones resaltó una frase que lo definía:
"Me es imposible vivir sin Dios, sin amor y sin amigos".
El cuerpo del funcionario fue hallado la tarde del martes dentro de su vivienda en Escazú. Presentaba golpes en la cabeza y estaba atado de manos.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) mantiene el caso en investigación para determinar el móvil del crimen y dar con los responsables.