Madre Patria: Informe revela supuesto lavado de dinero con venta de buses deteriorados
En apariencia los vendían en Nicaragua para poder legitimar dinero proveniente de los fraudes.
Un español señalado como cabecilla de la presunta organización criminal desarticulada por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y el Ministerio Público, en el denominado Caso Madre Patria, habría utilizado el negocio de la compra de autobuses para legitimar capitales provenientes de fraudes registrales.
Así se consigna en el expediente 22-005018-0042-PE, en un informe de la Fiscalía Adjunta Especializada en Crimen Organizado, San José, al cual este medio tuvo acceso.
Esta presunta banda fue desmantelada tras la ejecución de 47 allanamientos en diferentes partes del país, que dejaron como resultado la detención de 36 personas hasta el momento.
El Ministerio Público confirmó que se investigan los presuntos delitos de asociación ilícita, falsedad ideológica, estafa mayor, legitimación de capitales, cohecho (en modalidad de penalidad del corruptor) y procuración de impunidad.
Entre los capturados figuran dos españoles que serían los líderes del grupo, según la policía. Se trata de León Muñoz y Gómez González, quienes en apariencia tenían una red para apropiarse de inmuebles por medio de fraudes junto a los dos hermanos Chaves Arias, hijos del exconvicto Omar Chaves.
Junto a ellos en apariencia operaron un juez de apellido Venegas, varios abogados y notarios, exfuncionarios judiciales, oficiales de tránsito, empresarios autobuseros, entre otros.
Según el expediente, una de las formas de blanquear las ganancias que el grupo obtenía de los aparentes delitos era con negocios en el exterior, uno de esos era comprar buses deteriorados a muy bajo costo para luego venderlos más caros en Nicaragua.
El informe revela que se hicieron pagos importantes en dólares en empresas autobuseras, por la negociación de unidades con un sujeto nicaragüense al que en el documento judicial llaman "Pedro".
"La organización, desarrolló el negocio de venta de buses, dado que observó que era un rentable, ya que les generaba un alto rendimiento económico, de manera tal que aprovechando la cercanía de la frontera nicaragüense, podrían movilizarse fácilmente y por vía terrestre los buses, sin necesidad de pasar por procesos engorrosos que retrasen y/o retengan los vehículos y utilizando esta logística, han logrado generar un proceso de legitimación de activos, ya que los dineros que obtienen de las estafas los
invierten en la compra de autobuses", explica el texto oficial.
Las sospechas de posibles ilegalidades no surgían, debido a que algunos de los involucrados en el caso tienen empresas de autobuses en Costa Rica, por lo que compras y ventas de bienes "resultarían
normales", no obstante, al conocerse el origen del dinero se empezó a detectar los delitos.
Las autoridades narran que se logró identificar transferencias y depósitos en sistemas financieros nacionales a cuentas empresariales, las cuales estaban abiertas para recibir dineros de origen lícitos como el negocio del transporte público.
Sin embargo, se logró encontrar que se aprovechaban de la gran cantidad de efectivo que reciben de los usuarios para mezclarlo con el dinero que supuestamente obtenían ilegalmente.
Usaban delegaciones deportivas
Fue gracias a la interceptación de comunicaciones telefónicas que los investigadores judiciales lograron descifrar que el dinero que se movía en esas vías en apariencia provenía de los delitos cometidos previamente.
Una de esas llamadas analizadas es la del 22 de abril del 2023, entre español Fernando Gómez y Mauricio Jiménez Espinoza, quien según la Fiscalía se relaciona con el extranjero en temas de venta de autobuses.
Ambos conversaron sobre reunirse con un comprador nicaragüense al que identifican como "Pedro", con el objetivo de ver unos buses y esperar una oferta, aprovechando que el sujeto estaba de viaje por Costa Rica.
El pinolero ingresó con un equipo de beisbol que venía al país a un juego, por lo que empezaron a coordinar el encuentro, ya que se estaba hospedando en Cartago.
Así se detalló una de las llamadas del 23 de abril del 2023 con otro sujeto no identificado:
Según el análisis de esta y otras dos llamadas en el informe, se expone que existe muestra de las negociaciones entre, Fernando Gómez, Jonathan Herrera y "Pedro".
"(…) en la que se puede observar que Jonathan hace referencia a que tienen que idear un plan para, que Pedro, le dé a Fernando el dinero, afirmando que Pedro podría andar cincuenta y siete mil de esos y que a la vez, se observa que se realizó, un comentario que hace referencia a que era mucho dinero para andarlo circulando en la calle. Sin embargo, manifiestan que Pedro cuenta con una ventaja y corresponde a que por ingresar él, con un equipo, nadie los revisa, lo que aprovecha Pedro, para trasladar grandes cantidades de dinero en efectivo, sin ser detectado", detalla el expediente.
Otra de las comunicaciones interceptadas el 28 de abril de ese mismo año, revela que "Pedro" pretendía negociar cuatro autobuses y que se tenía conocimiento que tenía $100 mil en Costa Rica para buscar un acuerdo.
"Comunicación entre Fernando Gómez y Jonathan Herrera (presunto testaferro), dejando en evidencia las negociaciones que mantienen entre ellos, específicamente la compra y venta de buses, en la cual, tanto Fernando como Jonathan, adquieren buses de terceros a un bajo costo, por el deterioro de los mismos, para luego posicionarlos a un elevado precio, a un comprador de nacionalidad nicaragüense", describe el documento.
Depósitos en Panamá
A esas movidas se suma otra de envíos de dinero hacia Panamá usando terceros que tienen negocios en ese país o bien, que lo frecuentan para concretar compras de automotores de transporte.
Para ello, Jonathan Herrera contactó a un empresario de apellido Solano con el fin de venderle vehículos pero con pagos en efectivo por medio de "un amigo de Panamá", a quien también le sugiere depositarle 27 millones de colones y a cambio "le regala algo" para que lo transfiera de inmediato.
Esa información se obtuvo en la interceptación de una llamada entre Solano y Herrera, realizada el 4 de setiembre del 2023:
La Fiscalía concluyó que esta comunicación deja al descubierto que la organización con la venta de buses, gracias a la logística de Herrera, puede movilizar dinero con el fin de evadir retenciones del mismo en las entidades financieras y así poder movilizarlo a sus arcas sin levantar sospechas.
Además que utilizan otros medios para movilizar plata por las fronteras, sin ser detectado, "siendo
este tipo de movimientos, propios del lavado de activos".
Entre otros aspectos también se destaca que Herrera involucra directamente a su hija "en los negocios ilícitos, con la finalidad de limpiarse y pasar desapercibido, ante las autoridades reguladoras, para poder seguir con sus actividades ilícitas sin poner en riesgo su organización".
El expediente sostiene que el grupo criminal recibe constantemente dinero de diferentes fuentes, el cual ingresa, a distintas cuentas bancarias, que son acreditadas a las empresas de buses, a familiares de los integrantes del grupo criminal y en forma de dinero en efectivo.