Él es Boligoma, el extraditable pescador de Golfito requerido en Panamá por trasegar cocaína
Se trata del sexto extraditable detenido, confirmó el Organismo de Investigación Judicial
José Villalobos López, alias Boligoma es vecino del kilómetro 5 de Golfito, de profesión pescador, según el registro que mantenía ante la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), sin embargo, en el 2016 fue detenido en aguas panameñas con media tonelada de cocaína junto a otros tres hombres.
Una juez de Garantías de Chiriquí dejó en libertad a cuatro vecinos de Golfito, quienes escaparon y se ocultaron durante casi 9 años en la zona sur de nuestro país. Sin embargo, con la aprobación de la nueva ley de extradición, la justicia panameña les pidió extradición. Es por esa razón que, la tarde de este lunes, agentes de Interpol Costa Rica detuvieron a Villalobos López alias Boligoma y lo pondrán a la orden del Tribunal Penal de San José.
Este sujeto fue detenido cuando transitaba en un vehículo por el centro de Golfito. Según su perfil de Facebook, vivía plácidamente en la zona de una forma pública, sin requerir ocultarse.
Alias Boligoma no está ligado directamente relacionado con una estructura criminal, en Golfito, sin embargo se cree que la droga que transportó junto a otros vecinos de la zona, en el 2016, podrían ser un encargado para David Caballero Mesén, un narco vecino de playa Zancudo, en Golfito, requerido por Estados Unidos y que actualmente está en fuga.
El caso en Panamá
El pleno de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Panamá, en el 2016, ordenó la destitución de Mixila Alicia Méndez Sánchez como jueza de garantías en el Circuito Judicial de Chiriquí.
La decisión de los magistrados del máximo tribunal de justicia panameño fue recogida en el Acuerdo No. 541 del jueves 29 de septiembre de 2016. Un memorándum de la Secretaría de Comunicación de la CSJ indica que esta decisión fue tomada después de que, el 25 de septiembre de 2016, la entonces funcionaria judicial no aplicó una medida de detención preventiva a los cuatro ciudadanos costarricenses aprehendidos en alta mar por el Servicio Nacional Aeronaval, en una embarcación que llevaba a bordo 500 kilos de cocaína.
En lugar de prisión preventiva, la juez de Garantías decidió aplicar como medidas cautelares como la prohibición de abandono de la provincia de Chiriquí, además de la obligación de reportarse todos los lunes en el edificio judicial y el deber de residir en un hospedaje ocasional (sin asignar custodia policial ni asegurarse que fuesen filiados en el Servicio Nacional de Migración), conociendo que los acusados no tienen arraigo en nuestro país, explicó la Corte de ese país en su resolución de despido de la jueza.
La Fiscalía de Drogas apeló la decisión de la jueza en una audiencia celebrada el 27 de septiembre de 2016. Sin embargo, los cuatro ciudadanos costarricenses no se presentaron.
La embarcación costarricense fue detenida en el Pacífico Occidental con 500 paquetes de cocaína. El buque fue conducido a la base de Quebrada de Piedra, al sur de la comarca Ngäbe Bugle, donde se detectó que la embarcación ocultaba en su doble fondo la sustancia ilícita.
En su momento, ante los medios de comunicación de ese país, la jueza dijo que nunca recibió sobornos o coima, por esta decisión que realizó con base en los elementos probatorios que le fueron presentados por la fiscalía el día del juicio de garantías.
"Yo les voy a decir que no hubo sobornos, porque el juez cuando entra por esa puerta no sabe ni a qué persona va a ver, sabe qué le van a pedir, pero no sabe qué le van a argumentar, sabe el número de la causa, pero no sabe cuál es la noticia criminal, ninguno de los jueces sabe qué se va a encontrar en esa sala de audiencias, entonces mal podríamos pensar que haya un juez de garantías corrupto, cuando el mismo sistema está hecho para que eso no sea posible", señaló Méndez.