Insuficiencia cardíaca: Estos son los principales síntomas que se experimentan
Es posible vivir con insuficiencia cardíaca

Fines ilustrativos
La insuficiencia cardíaca es una condición en la que el corazón es incapaz de bombear la sangre necesaria para suplir las necesidades del organismo, ya sea porque se encuentra muy débil o porque presenta rigidez que le dificulta relajarse.
De acuerdo con los doctores Melissa Rodríguez y Moisés Vázquez, especialistas en cardiología de los hospitales San Vicente de Paúl y Rafael Ángel Calderón Guardia, existen varios factores que la provocan.
Los menos comunes son de origen genético, pero en la mayoría de los casos se trata de una condición prevenible. Según Vázquez, entre el 60 % y el 75 % de los casos están relacionados con la enfermedad coronaria (obstrucción de las arterias del corazón), que constituye la principal causa de insuficiencia cardíaca.
Otra causa frecuente es la hipertensión mal controlada. Asimismo, condiciones como el tabaquismo, haber sufrido un infarto no tratado o con secuelas en el ventrículo también pueden desencadenarla. De hecho, la insuficiencia cardíaca es la principal causa de hospitalización en personas mayores de 65 años.
Los principales síntomas que experimentan las personas con insuficiencia cardíaca son:
- Falta de aire o disnea al realizar actividades sencillas, como caminar o ir al supermercado. A menudo refieren sentirse fatigadas y sin capacidad para realizar tareas habituales.
- Hinchazón en piernas y pies.
- Disnea nocturna paroxística: la persona se despierta de forma súbita porque siente que se ahoga.
- Dificultad para respirar al acostarse en plano (ortopnea), por lo que necesita varias almohadas.
- Crépitos o presencia de líquido en los pulmones.
Según el criterio de los especialistas, es posible vivir con insuficiencia cardíaca, pero se deben cumplir una serie de cuidados:
- Apego estricto al tratamiento médico optimizado y toma de medicamentos según la indicación.
- Asistencia regular a las citas médicas. También es fundamental colocarse las vacunas recomendadas para adultos (influenza, neumococo), ya que las personas con insuficiencia cardíaca son más vulnerables a enfermarse.
- Realización de actividad física acorde con la severidad del cuadro clínico. Mantenerse activo evita el debilitamiento muscular, lo que reduce la fatiga.
- Dieta baja en sal.
- Limitación de la ingesta de líquidos para evitar acumulación en piernas y pulmones.
- Evitar medicamentos de venta libre, especialmente los utilizados para el dolor.