Ingeniera de Google creció entre los cafetales de Naranjo
Se graduó de la UCR
Adriana Jara creció entre naturaleza y matas de café en Candelaria de Naranjo, salió de allí a estudiar a la Universidad de Costa Rica (UCR) en San José, sin imaginarse que se convertiría en una importante ingeniera de Google.
Su historia de vida es destacada en su trabajo como parte del blog "Mes de la Herencia Hispana", donde se celebran las culturas y los aportes de los colaboradores hispanos.
"Como ingeniero de software, ayudo a construir la infraestructura para que los anuncios comerciales en Youtube.com sean más relevantes y útiles. Cuando conseguí el trabajo en Google, me mudé a Sunnyvale, California, desde Candelaria de Naranjo, una pequeña ciudad en Costa Rica. Llegué en un vuelo el 27 de septiembre de 2013-hace exactamente cuatro años", expresó la joven.
Pese a haber crecido entre cafetales, Jara no toma café y cree que es de los pocos ingenieros que no lo hacen.
Pero… ¿cómo llegó a trabajar en una de las empresas más importantes del mundo?
Cuando estaba en la universidad, ella creó una cuenta de correo en Gmail e inmediatamente pensó que quería trabajar para la empresa que había logrado que el correo electrónico fuera más eficiente.
"Ha sido un sueño desde que Gmail salió, cuando estaba en la universidad. Recuerdo haber pensado ‘realmente quiero trabajar con la gente que construyó esta cosa'. El correo electrónico estaba bien, pero tomaron una cosa que estaba ‘bien' y lo mejoraron tanto… Quiero ser una de esas personas que no acepta cosas que están bien, sino que las cambia para mejorar".
Ocho años después de eso, Adriana consiguió un contacto en Google y le escribió por medio de correo.
"¡Estaba tan emocionada de poder trabajar con la gente que siempre había admirado! Nunca pensé que podía hacerlo y pasar de mi pequeña ciudad hasta el Googleplex. Nunca pensé que terminaría trabajando en un lugar donde uno puede impactar a millones de usuarios en todo el mundo", expresó.
Pese a lo ilusionada que estaba y al temor que sentía por mudarse a otro país, reconoce que en su primera entrevista telefónica no le fue muy bien.
"Recuerdo que en mi primera entrevista telefónica no me fue tan bien. En ese momento, estaba perdiendo la esperanza, pero me quedé pensando ‘soy una buena ingeniera y quiero trabajar en Google!'. ¡Esa confianza parece haber ayudado! Lo hice bien en mi segunda entrevista y ahora trabajo aquí", afirmó.
Adriana tiene 4 años de trabajar en Google y si hay algo que le encanta de su empleo es poder aprender de compañeros que siempre dan lo mejor de sí.
"Las personas con las que trabajo me inspiran a venir todos los días. También disfruto al solucionar problemas, especialmente aquellos que tienen impacto en nuestros usuarios. Es gratificante trabajar con tantas personas inspiradoras para ayudar a facilitar la vida de nuestros usuarios", añadió.
De las cosas que más extraña de Costa Rica es la olla de carne, especialmente la que hace su madre y agradece tener una comunidad hispana alrededor y poder hablar español en un lugar donde el idioma principal es inglés.
"Para mí, es extremadamente importante tener un grupo de personas que son ‘como yo', que comparten mi cultura y pueden hablar español conmigo a veces. Me da un sentido de pertenencia en Google", citó.
Su familia sin duda fue un pilar importante para que Adriana hiciera realidad sus sueños, pero su padre le abrió las alas para volar.
"Las cosas que me han empujado más me fueron dadas por mi padre. Él me enseñó el amor por los libros – siempre está leyendo- y me enseñó a ser autodidacta. Siempre habla de lugares maravillosos alrededor del mundo y me llevó en mi primer viaje fuera de Costa Rica, sembrando en mí el hambre de conocer el mundo".
Si hay algo que esta tica disfruta es servir de ejemplo para los demás. Muchas personas se han acercado diciéndole que quieren perseguir sueños tal como lo hizo ella, por eso siempre da mensajes de motivación y de esperanza, sobre todo a quienes quieren convetirse en colaboradores de Google:
"Si fallás, ¡no te rindás! Hay muchos factores que pueden hacer que a uno le vaya mal en una entrevista… ¡Todos tenemos malos días! Así que prepárese y vuelva a intentarlo".