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Informe DEA desnuda mentiras de Chaves y Zamora sobre Celso Gamboa, gobierno y narco

Chaves y el ministro Zamora incurrieron en falsedades al intentar desacreditar investigación de DEA que vincula al exministro con el ingreso de cocaína al país con apoyo gubernamental

Por José Adelio Murillo | 25 de Jun. 2025 | 3:20 pm

El mandatario Rodrigo Chaves Robles y su ministro de Seguridad, Mario Zamora Cordero, incurrieron en falsedades, imprecisiones y afirmaciones erróneas al intentar desacreditar revelaciones hechas por la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA), las cuales exponen aparentes colaboraciones desde el Gobierno hacia Celso Gamboa Sánchez, exministro detenido y requerido en extradición por tráfico internacional de drogas.

Este miércoles, durante el habitual programa televisivo del mandatario y su gabinete, tanto Chaves como Zamora intentaron argumentar contra el planteamiento de la DEA en su solicitud de extradición.

Gamboa, quien fue viceministro de Seguridad durante la primera gestión de Zamora (2011-2014), está a punto de convertirse en uno de los primeros costarricenses extraditados a EE. UU. para enfrentar cargos por conspiración y tráfico internacional de cocaína.

Esta mañana, CR Hoy reveló en primicia que durante 2023, Celso Gamboa le aseguró a dos de sus aparentes socios criminales que el Gobierno chavista le concedía acceso para que sus cargamentos de cocaína ingresaran a Costa Rica.

Tras conseguir acceso a una parte de la solicitud de extradición, se conoció que en septiembre de 2023 las autoridades policiales grabaron un encuentro entre el exmagistrado y dos supuestos cómplices, quienes luego se convirtieron en informantes confidenciales de la DEA.

Aunque el lugar exacto no fue especificado, se confirmó que la reunión tuvo lugar en San José. Durante el intercambio, Gamboa garantizó que podía introducir droga al país por el Caribe o el Pacífico, gracias a las facilidades que —según dijo— le ofrecía el Gobierno.

Mentira #1: gobierno chavista es el señalado

El ministro Zamora intentó desvirtuar las revelaciones asegurando que el expediente solo hace referencia a presuntas colaboraciones para Gamboa por parte del Servicio Nacional de Guardacostas y no todas las instituciones.

Añadió que los hechos investigados ocurrieron únicamente entre 2020 y 2022. Dijo:

"En esa nota se menciona: se atestigua que Celso Gamboa participó en movimientos de traslado de droga a los Estados Unidos entre el 2020 y el 2022. Sin embargo, CR Hoy titula que este gobierno colabora con Celso Gamboa. 

Este periodista transforma la palabra "Guardacostas" y la transforma en Gobierno por arte de magia. Entonces se dice que se duda de este gobierno

En primera instancia, la publicación es clara en decir que la aparente negociación y los supuestos favores se fecharon para 2023. Incluso cita textualmente fragmentos del expediente, incluyendo el siguiente extracto:

Alrededor del 20 de setiembre de 2023, las autoridades policiales grabaron, con consentimiento previo, reuniones entre la Fuente Confidencial 1 (en adelante, «CS-1»), la Fuente Confidencial 2 (en adelante, «CS-2») y el señor GAMBOA SÁNCHEZ en San José, Costa Rica. 

El señor GAMBOA SÁNCHEZ les dijo a CS-1 y CS-2 que el gobierno concede a la DTO el acceso para que los cargamentos de cocaína ingresen al país, pero que la DTO (organización de tráfico de drogas) controla cómo se introduce la cocaína a Costa Rica, así mismo, les dijo a CS-1 y a CS-2 que la recepción de la cocaína está 100 % garantizada.

Para esa fecha, el Gobierno de Rodrigo Chaves llevaba casi año y medio en el poder y Zamora tenía ya cuatro meses como ministro.

Además, aunque una fuente cercana al caso mencionó posibles influencias de Gamboa en Guardacostas, en ningún momento el reportaje señala que los beneficios provistos se limitaran únicamente a esa institución.

Es el término “Gobierno” el que figura en el documento como la fuente de acceso para los cargamentos de droga.

Por otro lado, Zamora afirma que la investigación de la DEA se limita a 2020 y 2022. Pero el expediente no establece ese rango como exclusivo: simplemente indica que uno de los informantes estuvo vinculado a Gamboa durante ese periodo y presenció la llegada de varios cargamentos para esas fechas.

Como ya se detalló, las diligencias continuaban hasta finales de 2023. Cabe destacar que el propio Zamora admitió que el expediente es confidencial, por lo que como jerarca formal no debería tener acceso a esa información por canales oficiales.

Mentira #2: no fue por intermediación de Zamora

Zamora ha tratado de atribuirse la captura de Gamboa y de otros dos extraditables, presentándola como un logro de su gestión y del Gobierno.

Según él, estas acciones operativas fueron producto de su intervención ante el secretario de Estado de Donald Trump, Marco Rubio, más una visita suya a Estados Unidos en abril.

"Lo que estamos viviendo no es obra de la casualidad. La visita aquí a Casa Presidencial de Marco Rubio, la visita que tuvimos hoy de la secretaria de Seguridad, ratifican el apoyo y el compromiso a nuestro gobierno y nuestro país por lo que estamos haciendo. 

Ahora que las medidas que negociamos se están implementando, aparecen personas intentando desviar la atención", dijo Zamora.

Sin embargo, la documentación oficial demuestra que la DEA solicitó la extradición de Celso Gamboa desde el 1.º de octubre de 2024, antes de la visita de Rubio al país o siquiera estuviera en el cargo. Ni Trump había asumido. Así consta en el oficio de petición:

El extraditable GAMBOA SÁNCHEZ es requerido para ser juzgado en Estados Unidos por delitos de tráfico de drogas y conspiración. Es sujeto del pliego acusatorio número , presentado el 1 de octubre de 2024 en la Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito Este de Texas.

No existe evidencia que respalde que Chaves, Zamora o el Ejecutivo hayan sido determinantes en el inicio del proceso de extradición.

Por el contrario, el trámite no avanzó antes porque la Constitución costarricense lo prohibía hasta que, semanas atrás, la Asamblea Legislativa aprobó la reforma legal para permitir la extradición de nacionales.

Fue a partir de ese cambio que Estados Unidos pudo formalizar las solicitudes ante el Poder Judicial. Así lo confirmó el director del OIJ, Randall Zúñiga:

"Cuando ya se da la aprobación de la ley de extradición que quita la prohibición constitucional, se genera una solicitud de parte de un juez en Dallas, Texas, que llevaba una causa", indicó el jefe policial.

En resumen, los arrestos actuales no se deben a gestiones del Ejecutivo, sino a la reciente habilitación legal para aplicar extradiciones a costarricenses.

Mentira #3: OIJ sí investigó

El mandatario Chaves afirmó falsamente que el OIJ no investigó a Celso Gamboa e hizo alusiones en tono de burla, a las complicaciones de investigación que alertó la policía judicial.

Qué difícil investigar a Celso Gamboa porque él tiene muchos amigos: Don Randall, ¿le pagan para dejarse llevar por los amigos de Celso Gamboa? (…) Todos lo sabíamos. 

Sin embargo, Zúñiga ratificó públicamente que el OIJ ha venido colaborando con la DEA durante más de un año. Además, este sujeto ha estado bajo la lupa en 17 investigaciones penales.

"Esta es una investigación que ha venido llevando la DEA hace más de un año con colaboración de OIJ", ratificó el día de la detención.

Mentira #4: exdirector de Guardacostas

Tanto Zamora como, principalmente, el mandatario Chaves intentaron vincular al coronel Martín Arias, exdirector del Servicio Nacional de Guardacostas (SNG), con los supuestos favores brindados desde el Estado a Gamboa. Incluso insinuaron que él fue removido por esa razón.

"Tenía contactos con el Guardacostas y nosotros despedimos a un director de Guardacostas que estaba en ese momento. Vamos a ver si ese señor está durmiendo, porque si es él quien estuvo ayudando y nosotros lo despedimos, Dios quiera que lo agarren. Saludos, excoronel", indicó el mandatario.

Lo cierto es que Arias no fue despedido. Se acogió a su jubilación a inicios de 2024 por razones personales y de salud. Además, el propio Ministerio de Seguridad, bajo la gestión de Zamora, le organizó un acto oficial de despedida con honores, reconociendo sus más de 20 años de servicio y su colaboración constante con agencias estadounidenses, una confianza que pocos funcionarios públicos costarricenses han obtenido.

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