Hijo de estudiante asesinada revela mensaje de gatilleros: “Esto es parte de Diablo”
Hechos ocurrieron pasada las 6 de la tarde en un centro educativo.
(CRHoy.com).-"Esto es parte de Diablo" fueron las palabras de los sicarios que jalaron el gatillo y dieron muerte a Jazmín Torres Rankin en un centro educativo en Tortuguero, Limón, mientras se impartían lecciones.
En una entrevista con el hijo mayor de la víctima, Yohanzel Centeno, contó a CRHoy.com que cuando los encapuchados ingresaron al salón de clases, le dijeron una frase a su madre antes de asesinarla.
"Según me informan, dos personas encapuchadas de contextura delgada entraron por la puerta y le dijeron 'Esto es parte de Diablo' y procedieron a disparar", detalló Centeno.
De esta forma, se trataría de un mensaje directo de Alejandro Arias Monge, alias "Diablo", un sujeto que permanece en fuga y al que las autoridades le siguen la pista desde hace meses como sospechoso de liderar una temida banda en la zona del Caribe.
Estos hechos ocurrieron pasadas las 6 p.m. de este martes 20 de junio en el Centro Integrado de Educación de Adultos (Cindea), cuando en apariencia, la víctima se encontraba realizando un examen junto a su hijo, momento donde ingresaron los sospechosos y disparan contra la mujer.
"Al llegar a la escena veo a mi madre tirada en el suelo, había un charco de sangre. Mi hermano estaba afectado porque ellos eran estudiantes del centro educativo y los dos cursaban el mismo grado"
"Ellos estaban haciendo un examen de pruebas nacionales, el examen de español, mi madre se encontraba haciendo la parte final que es una redacción de un cuento y ya ella estaba por terminar cuando sucedieron los hechos", contó el hijo de la víctima.
En apariencia, minutos antes de saber que su madre había muerto por el ataque armado, Yohanzel se encontraba trabajando cuando escuchó varias detonaciones.
El hermano menor de Centeno fue quien le dio aviso, ya que él presenció el momento donde los gatilleros ingresaron al salón de clases para asesinar a su mamá.
De acuerdo con las autoridades, la mujer de 42 años recibió varios impactos por arma de fuego, en la cabeza, tórax y en los glúteos. Tras el ataque, los gatilleros se dieron a la fuga. Mientras, el cuerpo de la mujer quedó tendido en el aula, en medio de los pupitres de sus compañeros.
Los agentes del OIJ, recopilaron varios indicios balísticos que serán analizados. Asimismo, la policía judicial informó que por la forma en la que se dieron los hechos se presume que el móvil podría tratarse de un ajuste de cuentas.
El caso se mantiene en investigación para esclarecer lo ocurrido y dar con el paradero de los sicarios.