Hábitos saludables: ¿Qué son y por qué los necesitamos?
¡Qué tal! Hoy les quiero compartir un pequeño secreto sobre hábitos saludables y hábitos en general. Qué son, cómo funcionan y por qué son tan importantes en nuestra vida.
Todos sabemos lo que son buenos hábitos y conocemos claros ejemplos de ellos. Nuestros conocidos los practican y se ve ven bien. Se levantan temprano, hacen ejercicio frecuentemente, comen muy saludable y parecen conocer su cuerpo de formas meticulosas. No se ven tensos ni agotados. "¿Cómo lo logran?", nos preguntamos.
Sabemos que los buenos hábitos son importantes y que los necesitamos en nuestras vidas. Muchas personas y profesionales hablan del tema y nos animan a empezar a cambiar para mejorar los nuestros.
¿Pero qué son los hábitos? Son esas pequeñas cosas que podemos hacer en el día a día y que por más simples que parezcan, generan un gran impacto positivo en nuestra vida. Así ha sido mi experiencia en los últimos años, no solo como médico con mis pacientes, sino también en mi vida personal.

Existen herramientas para adquirir hábitos saludables. ¿Sabe cuáles son?
Está claro que todos necesitamos buenos hábitos…pero lograr que esos hábitos lleguen a nuestra rutina diaria para quedarse ¡es otra historia!, una lucha constante. Tanto que después de unos intentos nos acabamos sintiendo aburridos y frustrados…y dejamos de intentar.
El problema no somos nosotros, ni tampoco los profesionales que nos explican cada vez. El problema está en que no contamos con las herramientas necesarias para poner manos a la obra y tener éxito en la tarea de forma permanente. ¿Y cuáles son estas herramientas? Pues un set de herramientas mentales, lo que me gusta considerar una mezcla de tres cosas:
- Actitud
- Fuerza de voluntad
- Acción
Hacer cambios en nuestra vida no resulta nunca fácil, especialmente cuando se trata de hábitos saludables. ¿Cuántas de esas resoluciones de año nuevo han logrado completar este año? Ojo, ¡que el año casi acaba!
Pero no es para desanimarse, al contrario. Las verdades hay que afrontarlas. Solo así es como podremos ver, analizar, sentir lo que nos provocan esas verdades y finalmente decidir "agarrar el toro por los cuernos." La única finalidad de esto es sentirnos mejor día tras día, con las pequeñas y grandes cosas.
¿Y cuál es el gran secreto?
¡Consistencia!
Los hábitos se logran fácilmente y en forma permanente cuando 1) decidimos tomar acción y 2) somos consistentes en esa acción. Repetir y repetir hasta que se vuelva naturalmente gustoso.
Por ejemplo: ¿qué pasa cuando una persona adquiere el hábito de fumar? ¿O cuando una persona adquiere el hábito de ir al gimnasio cada mañana? Pues en el cerebro sucede lo mismo tanto para un hábito bueno como para uno no tan bueno.
La señal que se envía y recibe es la misma: el cuerpo desea algo, envía una señal, esa señal provoca una acción, el cerebro siente satisfacción y luego volverá para pedirnos más. Por decirlo en palabras simples, los hábitos se refieren a una acción, un premio y el deseo de más premio. ¡Como los niños!
Entonces, los pasos para proponernos un cambio y tener éxito van así:
- Definir qué queremos cambiar o mejorar.
- Definir porqué queremos cambiar esa cosa en particular.
- Definir qué queremos poner de bueno en su lugar.
- Decidir qué tarea pequeña, simple y fácil vamos hacer cada día que nos recuerde el nuevo cambio.
- Escribir esa pequeña acción en un papel o lugar donde lo veamos cada mañana.
- Poner una fecha límite a corto plazo y anotarlo en nuestro calendario.
- Hacer una promesa con nosotros mismos (ojalá frente al espejo) sobre el nuevo pequeño ejercicio que vamos a emprender a partir de hoy.
- ¡Y comenzamos!
Si le comunicamos a nuestra mente que queremos realizar un cambio y lo anotamos en un lugar visible, nos será más fácil definir nuestro plan de acción personal y llevarlo a cabo sin tener que pensarlo cada vez que queremos iniciar; lo que en inglés llaman un no-brainer, es decir, un pan comido.
Repito el secreto: pequeña acción cada día, todos los días. De grandes acciones instantáneas nadie logra grandes resultados. Es solo a través de pequeños pasos día con día en que podremos notar el avance hacia nuestra pequeña gran meta, sea lo que sea.
Y si además aplicamos esto no solo a la salud sino también al trabajo, al hogar o cualquier tema personal, veremos igualmente resultados.
Un reto
Dicho lo dicho, les propongo hacer juntos un reto:
- Escoger una cosa que quisiéramos hacer con más frecuencia y que sea para mejorar nuestra sensación de bienestar.
- Anotarla en un papel.
- Decidir qué cosa pequeña haremos cada día para acercarnos a esa meta.
- Empezar hoy mismo y llevarla a cabo cada día, hasta nuestra próxima conversación.
¿Trato hecho? ¡Excelente!
Envíeme sus consultas al correo doctoramariana@crhoy.com
Hasta la próxima,
Dra. Mariana Calleja