Gobierno suma cuatro fracasos en intento por obligar a diputados a decidirse sobre vuelos baratos
Por cuarta ocasión consecutiva, el Gobierno del presidente Rodrigo Chaves fracasó en su intento de que los diputados discutieran el proyecto de ley vetado sobre vuelos baratos. Pese a los esfuerzos del Ejecutivo, el Plenario no ha logrado conocer el expediente debido a una serie de maniobras de receso y falta de estrategia política
El plan fue convocado por el Gobierno con la intención de que se definiera, de una vez por todas, el destino de la iniciativa. Sin embargo, al tratarse de un expediente vetado previamente por el propio mandatario, la Asamblea Legislativa solo puede conocerlo en la primera parte de la sesión del Plenario, la cual concluye a las 4:00 p. m.
Este martes 3 de junio, en un intento por mantener con vida el proyecto, los diputados repitieron la misma estrategia utilizada en ocasiones anteriores desde que el Ejecutivo insiste en forzar la discusión del veto: irse a receso minutos antes del cierre de la primera parte, lo que impide cualquier avance sobre el expediente.
En esta ocasión, fue el diputado Gilberto Campos, jefe de fracción del Partido Liberal Progresista (PLP), quien solicitó un receso de 10 minutos poco antes de las 4:00 p. m. Al finalizar el receso, el quórum del Plenario se rompió momentáneamente.
Una vez restablecido, los diputados rechazaron una moción presentada por la fracción del Partido Progreso Social Democrático (PPSD) para extender el tiempo de esa primera parte, lo que habría permitido discutir el proyecto. Con esta decisión, el expediente vetado por Chaves obtuvo un día más de vida, pero sin avances.
El lunes ocurrió una situación idéntica. Faltando pocos minutos para el cierre de la primera parte, Campos solicitó un receso de tres minutos. Al concluir ese lapso, se conoció una moción de Pilar Cisneros, jefa de fracción del PPSD, para extender la sesión, pero la propuesta no alcanzó los 38 votos requeridos para ser aprobada.
El pasado jueves 29 de mayo ocurrió lo mismo. Un receso solicitado por la diputada Alejandra Larios, del Partido Liberación Nacional (PLN), impidió que el Congreso votara el eventual resello del proyecto. Como el Ejecutivo había desconvocado toda la agenda legislativa para presionar a los congresistas, no se pudo conocer otro asunto.
El 7 de mayo, el Gobierno intentó la misma maniobra, pero, como en las demás ocasiones, le resultó infructuosa.
Estos constantes reveses han dejado en evidencia el fallido cálculo político del Gobierno, que no ha logrado, pese a su insistencia, obligar a los legisladores a definir si resellan o desechan el plan.
La propuesta legislativa, impulsada por el PLP, permitiría pasajes de ida y vuelta por hasta $100 (¢51.000) hacia Centroamérica y $120 (¢61.000) hacia República Dominicana. La reducción en las tarifas se lograría mediante una exoneración temporal del impuesto a los combustibles.
Aunque el proyecto ya había sido aprobado previamente por el Congreso, fue vetado por el presidente Chaves en febrero de este año. Para convertirse en ley, ahora requiere el respaldo de al menos 38 diputados mediante un resello. Si no alcanza esos apoyos, el plan será descartado.