Fiscal pide 30 años de cárcel para sospechoso de ordenar homicidio de hermano
“Es dantesco”, afirma fiscal en conclusiones del juicio seguido contra alias “Luigi”
(CRHoy.com).-La Fiscalía Adjunta del II Circuito Judicial de San José pidió 30 años de cárcel contra un hombre sospechoso de planear y ordenar el homicidio de su hermano, el empresario Jorge Jiménez Berrocal.
Durante sus conclusiones, el representante del Ministerio Público, Ricky González Farguharson, calificó de "dantescos" los hechos juzgados, antes de entrar a hacer un análisis de la prueba indiciaria (reconociendo la ausencia de evidencia directa) y de los testigos evacuados durante el debate.
"Estamos en presencia de un evento contra natura", afirmó el fiscal.
Dado el "cinismo" y "crueldad", considerando el comportamiento del imputado de apellidos Jiménez Berrocal y de alias "Luigi" (incluidas celebraciones que el acusado supuestamente hizo después del asesinato), González Farguharson apuntó la necesidad de que se dicte un monto cercano a los extremos máximos previstos para el homicidio calificado (35 años de prisión, de acuerdo con el artículo 112 del Código Penal).
A ello abonó la planificación detrás del crimen, toda vez que los sicarios alcanzaron a superar varias barreras de seguridad con las que contaba la víctima, dadas las múltiples amenazas y atentados de los que fue blanco. Entre esos elementos de resguardo del ofendido -conocido como "Macho"- estaba su vehículo blindado, su guardaespaldas, su chaleco antibalas y su arma de fuego.
Recordó que, además, el testigo clave para el Ministerio Público, José Fabricio Arce Rodríguez (sujeto cercano al sospechoso, quien declaró de forma anticipada por el riesgo que corría su vida), había alertado a Jiménez Berrocal del plan que tenían sus hermanos "Luigi" y "Calica" para terminar con su vida. Esa descripción, en apariencia dada en un encuentro en la casa de la víctima frente a Carlos Humberto Salazar Salazar (mano derecha del agraviado), incluida un pago de ¢20 millones a sicarios para que le desgastaran el magazine de un arma.
Esa presunta característica -de agotar las balas que se tenían en la pistola- coincide "simétricamente" con el actuar que tuvo el asesino, ya que este fue captado por cámaras cuando tras propiciarle un tiro en la cabeza a Jiménez Berrocal, el arma se le traba, la recarga para continuar con los disparos y asegurarse la eliminación del objetivo.
Los hechos en cuestión ocurrieron la tarde del 31 de enero de 2015 en vía pública, a las afueras de un parqueo de la víctima en Cinco Esquinas de Tibás. Incluso, previo al crimen se dio una inspección previa del tirador y su acompañante, en alrededores de la Clínica Clorito Picado Twight.
Súmese que, posterior al hecho, la Fuerza Pública "peinó" la zona y encontró una motocicleta con denuncia por robo, junto a una pistola en una bolsa y ropas, todas supuestamente utilizadas por los sicarios.
A todo esto debe abonarse que Arce Rodríguez afirmó que "Luigi" supuestamente pagó a los sicarios en varios tractos que entregaba en las inmediaciones de las paradas de San Carlos en el Paso de la Vaca, en Merced de San José. Ese detalle también encaja con la activación de radio bases del celular del encartado, que mostró algunas visitas que este hacía a esa zona los fines de semana (análisis policial arrojó que el 90% de sus actividades con el dispositivo se daban en San Carlos, en un rango de 70 días naturales).
"Me causa vergüenza"
Dentro de sus conclusiones, Ricky González Farguharson también mostró su indignación con la respuesta que dio la institución en la que labora a las varias denuncias que hizo Jorge Jiménez Berrocal y por la "forma extraña" en la que se perdieron varias grabaciones que hizo el guardaespaldas de la víctima, Armando Sandoval Penedo, de aparentes conversaciones que tuvo con el imputado en las que se le ofreció un reloj de lujo y dinero a cambio de matar a su patrono.
El representante del Ministerio Público calificó ese actuar como "nulo e ineficaz".
"Me causa vergüenza como fiscal la respuesta dada", aseveró González Farguharson.
El funcionario además solicitó un testimonio de piezas (es decir, una investigación separada) contra los testigos Jean Carlo Arce Rodríguez y Fabián Mauricio Alfaro (no se precisó el segundo apellido) por presunto falso testimonio en sus deposiciones ante el Tribunal Penal del II Circuito Judicial de San José.
Se espera que el contradictorio continúe el próximo 26 de mayo a las 8:00 a.m. con las conclusiones del querellante (representante de la familia del ofendido), Francisco Campos Aguilar.