Fallida refinería china con vía libre para seguir devorando recursos
Tribunal reafirma rechazo a congelar millones para polémica iniciativa
El Tribunal Contencioso Administrativo rechazó -por segunda ocasión- el pedido de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) para congelar el envío de recursos estatales a la Sociedad Reconstructora Chino Costarricense S.A (Soresco) por el fallido proyecto de la refinería china.
Recope y la Compañía Nacional Petróleo de China Internacional (CNPCI, por sus siglas en inglés) invirtieron $50 millones -cada una- en el capital social de Soresco. Se trata de la empresa conjunta conformada para impulsar el proyecto de modernización de la instalación ubicada en Moín de Limón.
La refinadora procuraba 'congelar' casi 8 mil millones de colones como parte de los fondos remanentes de la millonaria inversión estatal hecha en la fallida obra mediante el planteamiento de una medida cautelar provisionalísima.
Con la petición se procuraba bloquear cualquier uso de recursos mientras se resuelve un arbitraje planteado por la contraparte china ante Cámara Internacional de Arbitraje de Londres (LCIA, por sus siglas en inglés).
En el voto 2028-2017, emitido el 12 de setiembre de 2017, el juez Elías Baltodano Gutiérrez rechazó los argumentos expresados por Recope y los consideró 'insuficientes' para acoger la petición.
En respuesta, la empresa estatal presentó una apelación para anular la sentencia. La misma fue acogida mediante una nueva resolución dictada el 9 de noviembre del año pasado.
Otro rechazo
La refinadora confirmó que el pasado mes de mayo el juez emitió un nuevo fallo y rechazó -otra vez- la medida cautelar. Así las cosas, la institución planteó una acción recursiva en apelación de lo resuelto por el tribunal.
"La medida cautelar provisionalísima fue solicitada el 17 de mayo del 2017 y pretende que Soresco se abstenga de utilizar de cualquier manera, por cualquier mecanismo, para cualquier fin, para cualquier actividad, el remanente del aporte realizado por Recope", hasta que se resuelva el proceso arbitral por la Cámara de Comercio Internacional para la terminación del acuerdo de empresa conjunta", subrayó la refinadora, ante una consulta hecha por CRHoy.com.
A mayo del año pasado, la empresa conjunta demandaba más de ¢30 millones mensuales para 8 empleados: 4 costarricenses y 4 chinos. Con salarios que van desde los ¢1.8 hasta los ¢6.9 millones cada mes.
El planteamiento de la compañía estatal radica en que no existe fundamentación técnica para mantener la planilla de Soresco en un proyecto sin futuro y que -además- fue frenado por la Contraloría General de la República (CGR) desde mediados de 2013 ante anomalías en los estudios de factibilidad. Es decir, "apelan a la protección del interés público".
Larga data
La idea de modernizar la refinería, con un ambioso proyecto proyectado en un total de $1.500 millones, nació en la administración de Óscar Arias (2006-2010).
Luego, se intentó desarrollar con Laura Chinchilla (2010-2014), quien siempre lo defendió a pesar de las críticas y el freno del ente contralor.
Se mantuvo en la primera mitad del gobierno de Luis Guillermo Solís (2014-2018), quien lo retomó para tratar de llevarlo a buen puerto.
El exmandatario, junto con los entonces jerarcas de Recope y el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), viajaron a China donde buscaron renegociar la iniciativa, frenada por una orden de la Contraloría General de la República (CGR) desde 2013.
En abril de 2016, ante la falta de acuerdos con la contraparte china, la refinadora anunció que se separaría de Soresco. Tras largos "estiras y encoges" las discrepancias quedaron por dilucidarse en el arbitraje internacional.
Ahora el caso será asumido por la actual administración de Recope encabezada por Alejandro Muñoz, quien conoce bien el asunto debido a que fungió como director de Soresco.