Exdirectivos del BN: Irregularidades señaladas por Chaves en elección de gerente son falsas

Las irregularidades señaladas por el presidente Rodrigo Chaves y el vicepresidente Stephan Brunner en el proceso de nombramiento de la gerente general del Banco Nacional de Costa Rica (BNCR), Rosaysella Ulloa, como argumento para justificar la destitución de la junta directiva de esa entidad, son falsas.

Así lo aseguran los exdirectivos del banco, quienes fueron cesados de sus cargos por la Presidencia de la República el pasado 28 de mayo, tras la designación de Ulloa en septiembre de 2024.

En conferencia de prensa el 4 de abril, Chaves afirmó que el proceso de selección para el cargo de gerente general del BNCR estuvo totalmente viciado.

Por su parte, Brunner citó cuatro razones para la remoción de los directivos:

• Que el concurso no tuvo divulgación pública.
• Incumplimiento de las fases recursivas.
• No se entrevistó a dos de los candidatos de la terna final escogida para el puesto.
• El proceso se realizó en nueve días hábiles.

Chaves también aseguró que la junta directiva bajó los requisitos para el cargo y calificó el proceso como vergonzoso.

“Mentiras”

Sin embargo, los exmiembros de la junta directiva del banco sostienen que las afirmaciones de Chaves y Brunner son falsas.

Marvin Arias, expresidente de ese órgano colegiado, explicó que el proceso de selección de candidatos para la Gerencia General fue encargado al Departamento de Recursos Humanos del banco, el cual se apoyó en la empresa Doris Peters & Asociados, especializada en reclutamiento y selección de personal, que ya había sido contratada para esos fines.

“La junta directiva se limitó a solicitar la selección de candidatos. No participamos en modo alguno en el proceso de selección; no definimos los plazos, ni los medios en que debía publicarse el concurso, ni las pruebas o exámenes a aplicar a los aspirantes. Eso no le corresponde a la junta directiva y nunca, en su historia, lo ha hecho”, alegó Arias.

Subrayó que el proceso se llevó a cabo sin que ningún integrante de la junta directiva emitiera directrices, solicitara condiciones especiales o se reuniera con alguna persona relacionada.

Arias detalló que, de un total de 14 candidatos, se identificaron tres que cumplían con los requisitos. De esos tres, se eligió a Ulloa por haber sido la única persona que obtuvo una calificación de 100.

“Pretender endosarnos responsabilidad por trámites administrativos en los que no participamos, ni podemos participar, es un absurdo que contradice la lógica y la práctica bancaria, o de cualquier empresa grande”, expresó.

Como ejemplo, mencionó que la Presidencia alegó que no se aplicó una prueba de inglés a los aspirantes.

“Sí se hizo prueba de inglés”, enfatizó Arias.

Montserrat Buján, exdirectora, comentó que cuando se actualizó el perfil para el puesto, se elevó el nivel de inglés requerido.

“El nivel anterior era ‘deseable intermedio’. Nosotros lo cambiamos a ‘obligatorio intermedio’ y ‘deseable avanzado’. La persona seleccionada obtuvo una calificación de ‘avanzado’, es decir, cumplía en demasía con el requisito de inglés”, indicó.

Rodolfo González, también exdirectivo, afirmó que la Presidencia ha sostenido “una mentira muy importante” que merece aclaración.

“Se dijo que habíamos ajustado el perfil para que la señora Ulloa Villalobos pudiera ser nombrada. Eso es absolutamente falso”, manifestó.

Explicó que los perfiles para ese tipo de puestos se ajustan periódicamente conforme a la normativa del Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) y de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).

“Eso fue lo que se hizo meses antes: ajustarlo a las nuevas disposiciones. Nunca se hizo ninguna variación para favorecer o perjudicar a alguien”, agregó.

Buján precisó que el perfil es el punto de partida de todo proceso de selección y que, desde diciembre de 2023, su elaboración fue asignada al Comité de Compensación del BNCR.

Fue a partir de ese momento que se inició el proceso de reclutamiento para la Gerencia General, y no nueve días antes, como afirmó Brunner.

Además, señaló que la normativa 15-22 del Conassif exige que todos los miembros de la alta administración de los bancos cumplan con ciertos requisitos.

“El BNCR contaba con un perfil elaborado en 2018, el cual presentaba deficiencias en su estructura y requisitos. El perfil que se aprobó en el comité y posteriormente en junta directiva es mucho más estricto que el anterior”, concluyó.

Cuestionamientos

El miércoles 28 de mayo, la Presidencia de la República comunicó la destitución de los siete miembros de la junta directiva del Banco Nacional, tras un cuestionado procedimiento conducido por Brunner.

Aunque la Presidencia alegó “irregularidades” en la designación de Rosaysella Ulloa, un exdirectivo aseguró que la verdadera causa de la destitución fue no haber nombrado en el cargo a un allegado del presidente Chaves.

Tras el cese de los directivos —realizado sin un informe técnico emitido por la Sugef, como establece la Ley Orgánica del Sistema Bancario Nacional—, la Presidencia anunció, en cuestión de hora y media, la designación de una nueva junta directiva temporal.

El caso fue remitido al Tribunal Contencioso Administrativo y Civil de Hacienda, la Sala Constitucional y la Asamblea Legislativa.