Este es el desgarrador testimonio del papá de la mujer decapitada

Desde hace mucho tiempo Shirley Jiménez era víctima de agresión. Su compañero sentimental la maltrataba constantemente, pero ella no lo denunciaba porque él la tenía amenazada.

El jueves, le dijo que se iría de la casa y él terminó decapitándola con un machete.

El hijo de la pareja llegó atacado, pidiendo ayuda a sus abuelos: ‘¡Están matando a mi mamá!' y don Ulises Jiménez salió corriendo hacia la casa de su hija. Cuando llegó, familiares del sospechoso llevaban a su otra nieta alzada.

"Ellos me dijeron que fuera porque había pasado una tragedia. Yo llamaba a Shirley desde la calle, pero ella no me respondía… ¡No me imaginé que él me la había matado! Un compañero que iba conmigo me dijo que mi hija se estaba muriendo", expresó.

Don Ulises entró a la casa y ya no había nada que hacer por su hija. 

"Cuando llegué estaba con los brazos para atrás y con la cabeza macheteada, hecha un picadillo. Él se dio gusto, se ensañó con mi hija. No pude hacer nada, lo único que le dije a mi compañero fue: ‘¡Me mataron a mi hija!'. La mamá del muchacho y otras personas vieron cuando él la estaba matando, y no hicieron nada. Eran tres contra uno. Ellos fueron muy culpables porque pudieron haber hecho algo", expresó con dolor.

Este vecino de Palmitos de Naranjo aseguró que nunca hubiera pensado que la vida de su hija acabaría a manos del hombre con el que había compartido 11 años, pese a que las agresiones eran constantes.

"El muchacho la agredía con palabras, y ella aguantando y aguantando hasta que el carajo la mató. Él le dijo que si lo denunciaba la mataba y ella estaba asustada. La maltrataba…él es muy malcriado (…) uno no puede meterse en cuestiones de pareja porque si se contentan uno es el que queda mal pero… ¡Qué iba a saber!", añadió.

Quería huir

Shirley llamó a su padre a eso del mediodía del jueves y le pidió dinero para huir con sus hijos hacia San Carlos, por las constantes agresiones que sufría.

"Yo le dije: ‘sí mi amor, yo le doy la plata', fue lo único que pude hablar con ella. Todo estaba preparado: cuando él se fuera a trabajar ella se iría. Lo que me di cuenta fue que ella le dijo a su pareja que se iba a ir y que lo iba a dejar…allí mismo él decidió matarla", narró don Ulises.

Está muy afectado por la situación pero agradece a Dios que el sujeto de apellido Gómez no le hiciera daño a su nieto, quien presenció todo. Ahora, solo le queda el recuerdo de su hija mayor, a quien describió como "un ángel del Señor".

Gómez está detenido a la espera de medidas cautelares, mientras la familia de Shirley pide ayuda para poder darle santa sepultura.

Si usted desea cooperar, puede llamar al 8284-6155.