En solo seis meses el PLP perdió a casi todos sus diputados
Todas los legisladores que abandonaron la fracción acusaron al PLP de alejarse de sus valores liberales
El Partido Liberal Progresista (PLP), presidido por el diputado Eliécer Feinzaig, perdió a la mayoría de sus integrantes en tan solo seis meses. La bancada inició en 2022 con seis diputados, pero poco a poco se fue desgranando hasta convertirse en el partido con menor representación en el Plenario.
La salida más reciente del PLP se dio este martes 27 de mayo, cuando Luis Diego Vargas se declaró independiente. Con esta pérdida, la bancada quedó con solo dos legisladores: Feinzaig y el diputado Gilberto Campos, quien para este año fue designado como jefe de fracción.
La primera en apartarse de la bancada fue Kattia Cambronero. En noviembre de 2024, tras marcadas diferencias con la línea del PLP, la diputada anunció que se separaba de la fracción y renunciaba a su militancia en la agrupación.
Cambronero argumentó que su salida se debía a que el PLP se había transformado en "una plataforma de cálculos políticos a corto plazo". Además, aseguró que dentro de la agrupación todo giraba en torno a una figura cuya visión se alejaba de los valores liberales que ella profesaba.
Las siguientes en salir fueron Johana Obando Bonilla y Cynthia Córdoba Serrano, quienes decidieron dar un paso al costado y renunciar al PLP el pasado mes de marzo. Su separación dejó al partido reducido a tres legisladores.
Las ahora independientes abandonaron la bancada por considerar que sus compañeros Feinzaig, Vargas y Campos las habían dejado solas en la polémica surgida por la tecnología 5G y el retiro de sus visas por parte del gobierno de los Estados Unidos, ocurrido en el mes de febrero.
Luego del anuncio de Obando y Córdoba, los tres diputados que permanecían en la agrupación emitieron un comunicado solicitando la renuncia de ambas legisladoras a sus curules.
En respuesta, los tres negaron que Obando y Córdoba hubieran sido excluidas de los procesos de toma de decisiones dentro de la fracción, y aseguraron que el grupo ha sostenido reuniones de coordinación de manera semanal.
Este mes de mayo, tan solo 27 días después de ser electo como subjefe de fracción, Luis Diego Vargas anunció que se apartaba del partido tras una reflexión que, según afirmó, había iniciado diez meses atrás. De inmediato, el congresista se declaró independiente, alejándose de la postura que había adoptado tras la salida de Obando y Córdoba del partido, a quienes insistió en que debían renunciar a sus curules.
Vargas envió un comunicado informando su separación del PLP y su renuncia a la militancia por diferencias de "visiones" con la agrupación, a la cual acusó de haber perdido el rumbo.
"Mi ciclo en el PLP se agotó. Renuncio porque el partido perdió el rumbo en su propuesta de transformación del país. Porque existe una ruptura entre la cúpula y las bases del partido con las que me identifico y veo que les han cerrado espacios y porque la visión que tiene la dirigencia actual difiere en mucho de mi visión y la de otros liderazgos que creímos en los principios que dieron origen al PLP", expresó el legislador.
Sin embargo, tres horas después del anuncio, los dos diputados restantes del PLP acusaron a Vargas de actuar con "oportunismo político" al dejar el partido y la fracción para apoyar a Natalia Díaz, exministra de la presidencia.
Eli Feinzaig aseguró que a su excompañero lo "encandilaron las luces del escenario político" y afirmó que Vargas había recibido una oferta para acompañar en la fórmula presidencial a la exministra del gobierno de Rodrigo Chaves.
Consecuencias por declararse independiente
Los congresistas que se declaran independientes enfrentan diversas limitaciones al dejar de formar parte de la fracción legislativa por la que fueron electos. Entre las principales restricciones están:
-
No participan en la elaboración ni modificación de la agenda legislativa del Plenario.
-
No pueden hacer uso pleno de la palabra en sesiones clave, como el análisis del informe presidencial o los debates reglados.
-
Acceso limitado a oficinas, equipo y personal.
-
No pueden votar en reuniones de jefes de fracción ni solicitar recesos.
-
Su presencia en comisiones depende de cortesías parlamentarias.
-
No pueden proponer procedimientos legislativos especiales, como mociones de abreviación.