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Empresario agroexportador: Caída del tipo de cambio ha llevado a empresas al límite

Por Alexánder Ramírez | 20 de Ago. 2025 | 12:02 am

Imagen con fines ilustrativos. (CRH).

Al borde del límite se encuentran muchas empresas del sector agroexportador debido a la caída del tipo de cambio del dólar con respecto al colón, y el futuro no es esperanzador.

"Hemos recurrido a todo lo que podemos hacer para seguir flotando con el agua al cuello, porque hemos creído que esto ya va a pasar, pero seguimos en la misma situación. Es como estar nadando hacia la orilla y que la orilla se aleje; uno nunca llega", comentó un empresario que produce y exporta banano en una entrevista concedida a CRHoy.

Asegura que el impacto de la política cambiaria del Banco Central de Costa Rica (BCCR) desde 2023 ha llevado a los agroexportadores "al agotamiento, al límite".

Aunque reconoce que hay compañías que han logrado sostenerse, duda que puedan hacerlo por mucho tiempo.

"De aquí en adelante, o esta situación cambia o se tendrán que cerrar empresas y declarar quiebras. Han hecho todos los recortes posibles, han readecuado deudas, no han aumentado los salarios, pero llega un momento en que el abandono del paquete tecnológico pasa factura. Ahí sí se da una caída en la producción y ya no hay forma de sostenerse", advirtió con preocupación.

Golpe

En el caso de su empresa, ha debido implementar varias medidas para sostenerse en medio de un panorama cada vez más adverso.

Una de ellas ha sido reducir el paquete tecnológico aplicado en las fincas bananeras. Este se refiere a un conjunto de técnicas y conocimientos que se aplican de manera integrada para optimizar la producción y rentabilidad del cultivo, e incluye aspectos como la selección de variedades, el manejo del suelo, la fertilización, el control de plagas y enfermedades, y las prácticas de cosecha y poscosecha. El objetivo es mejorar la productividad, la calidad del fruto y la sostenibilidad de la finca.

Este agroexportador, como otros del sector, tuvo que cambiar los fertilizantes que utilizaba para la producción, con el fin de disminuir costos.

"Se ha pasado a fórmulas que cuestan un 30 % menos en toda el área de producción. Por ejemplo, en un paquete tecnológico se deben aplicar 13 fertilizaciones al año; en nuestro caso, lo hemos bajado a nueve, pero hay fincas en el país que han reducido a tres o cuatro aplicaciones. Al bajar las aplicaciones, las futuras cosechas serán menos productivas", explicó.

Otra medida ha sido congelar los aumentos salariales.

"En el tema laboral, como los salarios están por encima del mínimo, llevamos aproximadamente tres años sin incrementos. El salario en la actividad bananera es mucho más alto que el mínimo, entonces los trabajadores han visto congeladas sus remuneraciones", comentó.

Además, se redujo los aportes patronales a la asociación solidarista destinados a financiar adelantos de prestaciones: antes era un 6 %, ahora solo un 2 %.

La contracción también lo llevó a comprar productos de limpieza de menor calidad, pero más baratos, para las plantas empacadoras.

Aunque en su caso no ha recortado personal —porque la planta empacadora y las labores de campo requieren un número fijo de trabajadores—, mencionó que otras empresas han eliminado tareas y despedido personal.

En mayo de 2024, por ejemplo, la multinacional Dole, dedicada a la producción y exportación de banano, despidió a 412 empleados debido al impacto del tipo de cambio.

"Lamentablemente, por la apreciación abrupta que ha habido en Costa Rica, el sector agrícola enfrenta una situación muy difícil de competitividad frente a otros países, y nuestra empresa tuvo que prescindir de 412 personas en todas las fincas de banano que tenemos en el Atlántico", informó Dole en aquella ocasión.

El empresario reconoció que algunas compañías han atrasado el pago de las cuotas obrero-patronales a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), una decisión que "trae consecuencias muy complicadas".

Pérdidas y deudas

La zozobra se respira en el sector: recortes para bajar gastos, congelamiento de aumentos salariales, despidos, cierre de áreas productivas y disminución de exportaciones.

Las utilidades de esta empresa, como las de otras dedicadas al banano, han sido nulas en los últimos tres años; otras incluso registran pérdidas. Planear nuevas inversiones es impensable mientras el tipo de cambio siga bajo.

"Han sido tres años completos de cero utilidades, cero inversiones y deudas crecientes", relató.

Algunos empresarios mantienen deudas con los bancos que crecen con el tiempo. Esto los ha llevado a negociar con las entidades financieras para readecuar las obligaciones y, en algunos casos, solicitar que solo se paguen los intereses y no se amortice capital, una medida que agravará el flujo de caja en los próximos meses.

Y aunque aseguró que "la banca privada se ha portado muy bien porque espera que este sea un problema de corto plazo", reconoció que no es una medida sostenible por mucho tiempo debido a la supervisión de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).

En sus palabras, el panorama es aún más desfavorable si se considera la aplicación del arancel del 15 % a las exportaciones costarricenses que ingresen a Estados Unidos, ordenada por el presidente de esa nación, Donald Trump.

"Cuando el arancel era igual para todos los países (10 %) no representaba mayor problema. Pero ahora que para Costa Rica es de un 15 % y para Colombia y Guatemala sigue en 10 %, es más fácil comprar banano en esos países, porque es más barato. Se vea por donde se vea, el manejo que ha hecho el Gobierno ha sido insuficiente", concluyó.

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