“El poeta de la calle” dejó los vicios para ayudar a otros
Hombre pasó 17 años en las calles y logró salir de las calles por medio de la poesía
Y de repente un indigente subió al escenario principal del Festival de Poesía que se desarrollaba en el Parque de la Democracia en el año 2007.
Hubo un silencio absoluto. Aquel hombre sucio, con mal olor y una bolsa de basura de esas de jardín se apoderó del micrófono y proclamó dos poemas.
La sorpresa fue total. Se trataba de Óscar Castro, un hombre que desde niño se había apasionado por la poesía, mas por decisiones erróneas terminó como un indigente de las calles cartaginesas y josefinas. Allí vivió por más de 17 años.
Aquella noche en la que la lluvia cesó, Castro sintió que podía dar más. Ese día entendió que la calle no era lo suyo y que debía cambiar su estilo de vida.
"Comprendí que no era mi sitio, la calle me estaba diciendo 'hasta luego', porque la vida te va dando mensajes y así lo entendí. Yo tenía que salir y años después comprendo que la poesía es una herramienta social que transforma y libera", comenta Castro.
Durante su estancia en las calles, escribía los poemas que en el 2012 quedaron plasmados en un libro llamado "Indigente". En total publicó 40 poemas. Este hombre que estudió en Cuba y Rusia todavía no puede olvidar aquel silencio que provocó la expectativa del público.
Allí Castro relató el poema 'Indigente', el auto retrato de las personas en condición de calle. Luego leyó otro poema sobre los niños que deambulan por las vías costarricenses y esa noche decidió salir de las calles.
Después un grupo de personas a quienes él describe como "ángeles 5 estrellas" lo ayudaron a salir de las drogas y desde hace varios años es el encargado de un plan de prevención de drogas en el cantón de Paraíso, Cartago.
Castro indicó que cada quien tiene derecho de tomar las decisiones y hacer lo que quiera con su vida, pero asegura que las elecciones no se deben tomar a la ligera.
"Las drogas no son el mejor camino ni la mejor alternativa para vivir. Existen una y mil justificaciones para mucha gente que defiende a capa y espada su consumo. Sin embargo, hay otras mejores formas para vivir y con las drogas simplemente te montás en un autobús que te da una vuelta y te lleva a un mismo destino. Cuando te bajás aparece un problema más y otro más que -al final- lo único que produce es cárcel, cementerio u hospital", comentó.
Aquella noche, al terminar de declamar el público reconoció su arte. Al recordar, sus ojos se llenan de brillo y sabe que en la bolsa negra de basura llevaba material para reciclar, pero también -como una vez le dijo Alfonso Chase- ‘iban sus sueños y poemas'.
Indigente
A muchos que en silencio gritan:
Cadena disfuncional tu vida,
empapada, curtida de tristeza.
Cadena irracional mezquina
en cartones, calles, estrellas
Cero a la izquierda social,
estadística de prensa.
Hombre esclavo de la calle,
hombre antorcha, hombre acera.Mal necesario existente,
noctámbulo de la vida,
ángel inmolado penitente,
hombre hambre,
hombre espina.Eslabón de la cadena
del Paraíso perdido,
viajero de última clase por la indiferencia,
mi amigo.Resurrección del dolor,
carcelero de la pena,
mis lágrimas son para ti,
aún cuando tu vida es ajena.