El Arenal y sus 11 años de reposo ¿Es posible el regreso a la actividad en un corto plazo?
Plumas y vapores de agua, vistas ocasionalmente, no significan incremento de actividad
(CRHoy.com). El Arenal, uno de los volcanes más icónicos de Costa Rica, cumple 11 años en un período de reposo que se caracterizó en este lapso por una actividad sísmica decreciente.
Pese a que en estos años, en reiteradas ocasiones, se han visto plumas de gases, eso no tiene nada que ver con una reactivación del coloso ubicado en las cercanías de La Fortuna, en San Carlos de Alajuela.
Este 18 de noviembre, el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori) publicó un análisis sobre el estado actual del volcán y detalló que la salida de vapor de la cima del macizo ocurre primordialmente en los meses más lluviosos (de mayo a octubre).
Estas plumas, cita el análisis, se presentan alternadas entre las mañanas o las tardes soleadas. Incluso, también se han visto durante las tardes o las mañanas lluviosas.
"Durante esta época es común poder apreciar el volcán en todo su esplendor con 1 o hasta 3 plumas de vapor de agua", expuso el Ovsicori.
¿Por qué se forman estas plumas de vapor? La explicación más lógica tiene que ver con el contacto del agua de lluvia con el material caliente que aún persiste en el interior del volcán. El agua ingresaría mediante fracturas que posee el edificio volcánico.
"Al llegar (el agua) a fuentes de calor (rocas calientes o zonas de alta temperatura) en niveles profundos, se vaporiza saliendo con fuerza a través del conducto principal del volcán. Es normal que estas plumas de vapor de agua se observen por años o hasta décadas después de la última actividad de un volcán, ya que el magma y las coladas de lava duran muchos años en enfriarse", acotó el observatorio.
Las mediciones más recientes revelan que existe una contracción del edificio volcánico. Además, las emisiones de los gases magmáticos son bajos, con valores menores a 0.5 toneladas de gas de dióxido de azufre (SO2).
"Otros parámetros medidos, tales como la evolución geoquímica de las aguas de algunas fuentes termominerales alrededor del Arenal, muestran el comportamiento de un volcán en reposo", añadió el informe.
¿La actividad puede regresar de "la noche a la mañana"? Si el volcán se reactiva, sería un proceso lento. Así lo indicó el Ovsicori. "Por eso es que se mantiene la vigilancia en el volcán, para detectar posibles cambios", indicó la institución.
En las etapas de mayor actividad, la lava en el Arenal salía a casi 1.000 grados centígrados. En el interior, a cientos de metros de profundidad, aún hay cuerpos muy calientes arriba de los 500 grados centígrados. Como ya se explicó, cuando hay mucha lluvia el agua se infiltra y logra llegar a profundidades donde está el material caliente.
Javier Pacheco, vulcanólogo del Ovsicori, explicó tiempo atrás que este proceso de "enfriamiento" tardará muchos años y podría repetirse.
"Puede tardar 100 o 200 años en enfriarse esos cuerpos: las piedras y las rocas que componen la superficie terrestre son un 'mal conductor' y, por lo tanto, costará mucho que se enfríe", dijo el científico.
Para comprender los ajustes en el panorama, hay aspectos necesarios para considerar que un volcán se reactivó: aumento en sismicidad, aparición de enjambres y sismos previos a un tremor (temblor interno), deformación del edificio volcánico, presencia de gases magmáticos; dióxido de carbono, azufrados y aumento de temperaturas y acidez de aguas termales asociadas con el sistema hidrotermal.
La erupción más recordada del Arenal ocurrió el 29 de julio de 1968, la cual provocó 78 muertes y múltiples daños en poblados situados cerca.