Economista alerta sobre peligros en idea de que el BCCR financie créditos de rescate
(CRHoy.com).- El Banco Central de Costa Rica (BCCR) anunció que evalúa la factibilidad de financiar líneas de crédito para bancos comerciales con el objetivo de que estos presten los recursos al sector empresarial golpeado por la pandemia del coronavirus.
Para Fernando Naranjo, doctor en Economía y presidente de la firma Consejeros Económicos y Financieros S. A. (Cefsa), la propuesta de que el Central destine parte de sus recursos para tal propósito implica elevados riesgos para la economía y no resuelve problemas estructurales, como el desempleo, que se agravaron producto del impacto de la COVID-19 en la salud de los mercados.
Según el experto, el país abandonó la ruta de las emisiones de dinero inorgánicas del Central para financiar líneas de crédito desde hace por lo menos tres décadas por los riesgos que están implícitos en la impresión de billetes.
"Es muy peligroso emitir dinero inorgánicamente. Usted sabe dónde empieza el problema, pero no sabe dónde va a terminar", alertó Naranjo, exgerente general del Banco Nacional (BN).
"Lo veo como una ocurrencia en el marco de una emergencia. Sería como volver 30 ó 40 años atrás en materia de banca central y no pienso que Costa Rica deba retroceder. Debemos ver hacia adelante y no volver a fórmulas que fueron desterradas de América Latina desde hace mucho tiempo", continuó.
El economista comentó que ese instrumento quedó en desuso en la región por las malas experiencias que tuvieron los países que lo utilizaron, entre estas, tener que lidiar con hiperinflaciones y con economías que se ralentizaron posteriormente.
Naranjo dijo, además, que una medida de ese tipo no resolvería los problemas relacionados con el frenazo que dio la economía costarricense producto de la pandemia.
El propio BCCR estima que la caída en la producción sería de alrededor de un -3,6% del producto interno bruto (PIB) para el 2020.
La semana pasada el presidente del Central, Rodrigo Cubero, dijo al periódico La Nación que desde hacía varias semanas había instruido a las áreas técnicas del Banco a que realizaran un estudio para determinar la viabilidad de establecer líneas de crédito para la banca comercial. En sus declaraciones a ese medio, Cubero dijo que la Junta Directiva del ente emisor analizará el tema en junio.
Fue la Cámara de Bancos la que hizo la propuesta para que el BCCR use sus recursos para financiar líneas de crédito para los bancos comerciales para que estos den préstamos accesibles para la pequeña y mediana empresa, así como para hoteles y otras empresas del sector turismo, uno de los más acongojados por los efectos en su actividad de las medidas que decretó el Gobierno para impedir mayores brotes de la enfermedad respiratoria COVID-19.
Alternativas para la reactivación de la economía
El presidente de Cefsa criticó la hoja de ruta para la reactivación de la economía que fijó el Gobierno del presidente Carlos Alvarado y consideró que muchas de las decisiones que tomó la administración, como el Bono Proteger y las ayudas con alimentos para las familias más necesitadas y sin empleo, son solo paliativas y no resuelven los problemas de fondo.
Naranjo opinó que la situación amerita tomar decisiones radicalmente distintas para recuperar la capacidad de los mercados de generar empleos y de levantar los ingresos de los trabajadores.
Entre las medidas que él considera que el Gobierno debería impulsar citó:
- La aprobación en el Parlamento de una Ley de Emergencia Nacional que elimine, durante 18 meses, los precios mínimos, las tarifas máximas y los salarios mínimos en todos los sectores.
- Con ese paso, según el economista, se estimularía la contratación de personal con salarios negociados por debajo de los rangos mínimos por un periodo definido y se activaría el consumo de servicios (por ejemplo, los de médicos y abogados y otros profesionales independientes) quienes hoy están sin clientela por la caída en los ingresos de la población.
- Su propuesta es que, además, la seguridad social rebaje en un 50% las cuotas obrero patronales para incentivar la contratación de personal en las empresas y para que se formalicen aquellos trabajadores que hoy no lo están.
- Estima que el riesgo de emisiones inorgánicas del Central para financiar líneas de crédito blandas para las empresas se podría sustituir por la canalización de parte de los recursos que el Gobierno está obteniendo a través de créditos con organismos financieros multilaterales y que Hacienda ha anunciado que destinará para gasto corriente, como los salarios del sector público, las pensiones y el servicio a la deuda pública.
- Un cambio en la política cambiaria del Banco Central para que el colón se devalúe con respecto al dólar con el objetivo de que a los productores costarricenses y empresarios del sector turismo se les haga más fácil ser competitivos con respecto al resto de países de la región.
En cuanto a su propuesta de eliminar los salarios mínimos y la fijación de tarifas durante un plazo definido, el economista dijo aunque implica un sacrificio de parte de todos, sería preferible la generación de empleos, aunque sea mal remunerados temporalmente, que manejar una tasa de desempleo que, estima, podría rondar ya un 20%, es decir, entre 400.000 y 450.000 personas.
Respecto de la idea de canalizar parte de los dineros que el Gobierno ha obtenido a través de créditos con entes multilaterales, a plazos y tasas de interés más beneficiosas que las que habría obtenido a través de la colocación de deuda, Naranjo no cree oportuno que todos esos recursos se destinen al gasto corriente.
"Considero que muchos funcionarios del Gobierno no se han dado cuenta de que estamos en los albores de una crisis como la que este país, muy posiblemente, no había tenido ni siquiera en los años 80. Siento que les está faltando fuerza e imaginación para plantear cosas diferentes. Y creo que una porción importante de esos recursos debería de canalizarse para que los bancos públicos puedan reestructurar las deudas de empresas sanas pero que las afectando muy severamente esta pandemia. Es cierto que son créditos concesionales a buenas tasas de interés, pero igualmente habrá que pagarlos en el futuro", explicó.
Y sobre la urgencia de un giro en la política cambiaria, Naranjo sostiene la tesis de que Costa Rica debería seguir la misma ruta de otra naciones latinoamericanas que han empezado a devaluar sus monedas frente al dólar como parte de la estrategia de recuperación del impacto de la pandemia.
Según el economista, Brasil ha devaluado su moneda en un 30%; México en más de un 20%, Colombia en un 25%; Chile en un 15% y República Dominicana entre un 7% y un 8%.
"Solo así nuestros empresarios turísticos, hoteleros y touroperadores podrían competir con destinos como Acapulco o Cartagena. Hay que partir de que hoy hay cero turistas y de que necesitamos enamorarlos de nuevo para que vengan a Costa Rica. El tipo de cambio artificialmente apreciado, entre otros factores por la elevada deuda del Gobierno, no nos permite ser competitivos", destacó.