DIS niega presencia del hijo de “Chapo” Guzmán en Costa Rica, tras publicaciones internacionales
Director Jorge Torres dice que no existen evidencias
La Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) negó la presencia en Costa Rica de Iván Archivaldo Guzmán Salazar, uno de los líderes del grupo narcotraficante conocido como “Los Chapitos” e hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.
Medios internacionales replicaron una información publicada por el periodista José Luis Montenegro, quien, mediante un video en YouTube, aseguró haber realizado una entrevista exclusiva con un presunto integrante de la facción antes liderada por Ismael "El Mayo" Zambada García.
Ese supuesto miembro de La Mayiza, una facción del Cártel de Sinaloa liderada por alias El Mayo y rival de "Los Chapitos", habría revelado el paradero de Guzmán Salazar.
"Soy alguien de la facción MZ/MF […] en este momento Iván Archivaldo se encuentra en Costa Rica, gracias a su primo Jaziel Abdiel, El Gabacho, un objetivo importante para nosotros también", dice la grabación publicada por el periodista.
No obstante, según el director de la DIS, Jorge Torres Carrillo, no existen pruebas que confirmen la presencia de ese peligroso criminal en suelo nacional y la información divulgada solo pretende generar preocupación en la población.
Esa información es completamente falsa. No tenemos ninguna evidencia de que dicha persona se encuentre en nuestro país. (…) Somos 100% transparentes y en los casos que hemos que tenido que alertar a la población sobre algún tema en particular, lo hemos hecho, es falso que haya alguna evidencia que se encuentra en el país el hijo del "Chapo" Guzmán.
Según la versión del sujeto entrevistado, el "Chapito" habría pasado semanas escondido en Jesús María, en Culiacán, o en Badiraguato, en el estado mexicano de Sinaloa, donde normalmente opera.
No obstante, ante un aparente temor de ser detenido o atacado por otra estructura criminal, habría viajado por tierra hasta Guatemala para luego abordar un avión privado con destino a Costa Rica, donde "Los Chapitos" tendrían grandes negocios, según las versiones de este mando medio de "El Mayo".
“Allá en Costa Rica lo recibió la gente del Clan del Golfo”, afirmó. Además, indicó que el hijo de El Chapo estaba acompañado por un par de escoltas.
En febrero pasado, surgieron reportes sobre la supuesta fuga de Iván Archivaldo de un operativo en Sinaloa. Sin embargo, en esa ocasión solo fue capturado un sujeto apodado El 200, señalado como colaborador cercano.
Iván Archivaldo asumió un rol de liderazgo en la organización tras la captura y extradición de su padre a Estados Unidos en 2017, donde cumple cadena perpetua.
Desde joven, se involucró en el narcotráfico y, en 2005, fue arrestado por lavado de dinero. Sin embargo, fue liberado en 2008 tras un fallo judicial.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos lo señala como uno de los principales responsables del tráfico de fentanilo, cocaína, metanfetaminas y marihuana hacia el país norteamericano.
Además, figura en la lista de los 10 más buscados por la Administración de Control de Drogas (DEA), que ofrece una recompensa de $10 millones por su captura.
Los Chapitos
Joaquín Guzmán López, Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, conocidos colectivamente como "Los Chapitos", han adquirido una creciente influencia en el tráfico de drogas sintéticas y otras economías delictivas en el norte y el oeste de México, de acuerdo con Insight Crime.
Se cree que Ovidio, Iván y Jesús Alfredo fueron integrados en las operaciones delictivas del Cártel de Sinaloa cuando eran adolescentes, por su padre y por Ismael Zambada, con el fin de que aprendieran los detalles de la organización.
Comenzaron a asumir un papel más prominente entre mediados y finales de la década de 2010, aproximadamente cuando su padre fue detenido y extraditado a Estados Unidos.
En 2016, Jesús e Iván formaban parte de un grupo de hombres secuestrados por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en un restaurante de lujo en Puerto Vallarta, en el estado de Jalisco, territorio del CJNG. Ambos hijos fueron liberados más tarde.
El CJNG, responsable del secuestro, es una organización liderada por Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, uno de los narcotraficantes más buscados en el mundo.
A inicios de marzo, apareció en Costa Rica un grafiti en una barrera jersey que mencionaba a este capo mexicano, conocido también como “El Señor de los Gallos”. Se halló en el sector de La Uruca, en la autopista General Cañas.
Tras la extradición de El Chapo a Estados Unidos en enero de 2017, los conflictos entre "Los Chapitos" y otros líderes del Cártel de Sinaloa se han intensificado. También han enfrentado una creciente presión de las autoridades.
A finales de 2021, el Departamento de Estado de EE. UU. aumentó su recompensa a $20 millones por información que permitiera capturar a los cuatro hermanos. El Departamento del Tesoro de EE. UU. también ha sancionado a "Los Chapitos" en virtud de la llamada Ley Kingpin.
A pesar de estar en la mira de las autoridades estadounidenses, "Los Chapitos" han intensificado sus esfuerzos para dominar el grupo que una vez dirigió su padre. Su principal negocio, al igual que el de El Chapo, es el narcotráfico internacional.
Según varios pliegos acusatorios en Estados Unidos, los hijos están involucrados en el tráfico de grandes cantidades de drogas, desde cocaína y marihuana hasta metanfetamina, hacia ese país, utilizando una amplia red de contactos en toda la región.
En particular, el grupo se ha adaptado a los cambios en los mercados de la droga y ha incursionado en el comercio de drogas sintéticas, especialmente en el tráfico del potente opioide fentanilo.
De hecho, "Los Chapitos" han ampliado sus actividades para incluir la explotación de centros de rehabilitación de consumidores de droga como método de reclutamiento de nuevos traficantes, lo que ha intensificado la violencia entre ellos y la facción de El Mayo, su mayor rival interno.
El Departamento de Justicia de EE. UU. presentó cargos contra ellos en 2021 por conspiración para distribuir cocaína, metanfetaminas y marihuana, y ofreció recompensas de 5 millones de dólares por cada uno.