Director del OIJ: Asesinato de Geiner Zamora “no va a quedar impune”

El crimen de Geiner Zamora Hidalgo, subjefe del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) asesinado a inicios de año por un gatillero, no quedará impune.
Así lo manifestó a CR Hoy el director de la policía judicial, Randall Zúñiga, quien confirmó que las indagaciones aún siguen su curso para llevar a los responsables ante la justicia.
"Este crimen no va a quedar impune, eso lo tenemos totalmente claro. Es cuestión que pasen los días o semanas para poder tener toda la prueba que nos hace falta, pero este crimen nunca va a quedar impune", puntualizó Zúñiga.
Este jueves, la institución rindió un homenaje póstumo a Zamora, cuatro meses después de su fallecimiento, durante un tributo anual que realiza el Organismo para conmemorar la vida y el sacrificio de sus trabajadores que murieron en el ejercicio de sus funciones o como consecuencia de su labor.
A Geiner lo mataron debido a su trabajo como investigador, enfrentándose a estructuras de crimen organizado que operan en el Caribe costarricense. Su esposa, su hija y su hermana estuvieron presentes hoy en el acto de reconocimiento que se le realizó al agente.
Zamora se convirtió en el oficial número 23 fallecido a causa de su labor como policía judicial. Desde la fundación del OIJ hasta la fecha, se contabilizan 20 hombres y 3 mujeres que han perdido la vida en el cumplimiento de su deber.
Han transcurrido 131 días desde el ataque armado que sufrió el subjefe mientras se encontraba dentro de un establecimiento comercial. Desde entonces, la investigación ha incorporado a varios sospechosos, y actualmente las autoridades buscan al presunto autor material del homicidio.
En la investigación figuran al menos cinco personas plenamente identificadas y otras en proceso de ser reconocidas. Dos sujetos habrían fotografiado a Zamora y luego compartieron la imagen en un chat, con el fin de facilitar su identificación al sicario.
Ambos se encontraban dentro del restaurante donde ocurrió el atentado. El OIJ difundió un video que permite dar seguimiento al sujeto que presuntamente disparó contra Zamora Hidalgo.
Según la investigación, el sicario accionó varias veces un arma de fuego que portaba en su mano derecha. Se ha determinado que salió desde Toro Amarillo en una bicimoto, con la cual llegó al lugar del crimen.
Tras el ataque, huyó hacia el sector de Los Lagos, en Guápiles, y se internó en un charral, donde abandonó el vehículo y algunas prendas de vestir. Minutos después, fue captado caminando con otra ropa, cerca del estadio Ebal Rodríguez.
El sospechoso sería un hombre de entre 25 y 30 años, de tez trigueña clara, aproximadamente 1,70 metros de estatura, con tatuajes en brazos y piernas. El OIJ solicita la colaboración ciudadana para ubicar su paradero.
La policía judicial también le sigue la pista a otros sospechosos de apellidos Azofeifa Ugalde, Coto Vega, Delgado Mora (alias Míster Músculo) y Guadamuz Flores. Asimismo, se señala a Jorge David Núñez Aguilar, conocido como Coco Pastilla, como uno de los principales implicados.
Los tres primeros habrían colaborado en la autoría intelectual del crimen, mientras que, en un principio, Guadamuz Flores fue señalado como el presunto gatillero. No obstante, con el avance de la investigación, su participación fue reconsiderada.

El 4 de febrero, el Juzgado Penal de Pococí ordenó la liberación de Azofeifa Ugalde, Coto Vega y Delgado Mora, debido a que las pruebas presentadas no permitieron establecer un grado de probabilidad suficiente para imponer medidas cautelares restrictivas de libertad.
En el caso de Guadamuz Flores, inicialmente se le impuso un año de prisión preventiva. Sin embargo, el 7 de febrero, el Poder Judicial informó que, a solicitud del Ministerio Público, se modificó esa medida y se ordenó su inmediata libertad.
A partir de entonces, se le impusieron medidas cautelares alternativas: fijar domicilio, firmar una vez al mes en el despacho judicial correspondiente y abstenerse de contactar a testigos del proceso. Estas medidas rigen mientras se mantenga activa la investigación.
Por su parte, Coco Pastilla es requerido por la policía judicial, al ser señalado como el presunto líder del grupo criminal que estaba siendo investigado por Geiner Zamora. El director del OIJ, Randall Zúñiga, ha afirmado que el asesinato fue una represalia criminal.
Geiner Zamora tenía 38 años de edad y más de 15 años de servicio en el Poder Judicial. La noche del viernes 31 de enero, mientras cenaba en un restaurante ubicado en Guápiles, fue abordado.
Inicialmente, fue trasladado a un centro médico local, pero debido a la gravedad de sus heridas fue remitido al Hospital Calderón Guardia. Durante varios días permaneció internado, aferrándose a la vida con asistencia respiratoria, ya que presentaba un severo daño cerebral.
Pese a los esfuerzos médicos, su condición era crítica, hasta que el 4 de febrero falleció. La causa judicial es la 25-000269-0066-PE.