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Reportaje Especial

Un dulce talento se convirtió en el exitoso negocio de esta joven

Por Yaslin Cabezas | 7 de Oct. 2018 | 12:01 am

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Catalina Chacón tiene 22 años y desde hace 4 encontró su pasión, algo que además le ayuda a generar ingresos. Es así como esta joven desarrolló un exitoso negocio y demuestra que la edad no es un impedimento cuando los objetivos están claros.

Cuando salió del colegio, decidió especializarse en pastelería, así que llevó varios cursos para aprender las técnicas. Sus primeros y más fieles clientes han sido sus familiares y poco a poco la clientela se fue extendiendo.

"Empecé siempre con la idea de vender, de tener un ingreso después de salir del colegio y mi mamá me apoyó mucho. Cuando ya sabía lo básico me tiré al agua y las ganancias de lo que vendía las invertía en material. Llevé varios cursos y he ido aprendiendo porque en esto nunca se deja de aprender. ¡Todavía recuerdo lo mucho que sudé con el primer queque que me pidieron, que tenía lustre de chocolate!", señaló.

Poco a poco fue perfeccionando sus destrezas y cada vez los pedidos aumentan más y más. Tiene clientes que empezaron con ella desde sus inicios y que siguen confiando en su trabajo para las actividades especiales.

"A una pareja le hice el queque de bodas, después el del baby shower y hace poco el del primer año del bebé, entonces es muy bonito porque eso quiere decir que valoran mi trabajo, a pesar de que tenía 20 años cuando les hice el primer queque. También hice uno para un niño que estaba con una enfermedad terminal y que querían hacerle una fiesta, ese me marcó mucho", expresó.

Demostrar todo su talento y su gran sentido de responsabilidad ha sido un gran reto para ella, porque los clientes a veces dudan de su capacidad.

"Siempre me ha dado miedo mostrarme en fotos y que la gente me vea, porque muchas veces no creen en la capacidad que tiene uno para hacer ese pedido, entonces es satisfactorio cuando les llevo el queque y me preguntan si yo lo hice, en ese momento se quitan esa mentalidad", dijo entre risas.

El pasatiempo se convirtió así en un próspero con el que Catalina ahora paga sus estudios en Administración de Empresas y algunos de los gastos que tiene.

Catalina hace un trabajo cuidadoso y además siempre piensa en el gusto del cliente y en su bolsillo. "En esta industria hay gente que cobra muy barato y hay otra que cobra muchisísimo y no por un trabajo bueno… pero todas son experiencias y uno va aprendiendo poco a poco", aseguró.

Su sueño es tener su propio local, donde las personas puedan probar todas las delicias que prepara.

Si usted desea contactarla puede hacerlo a través de la página en Facebook haciendo clic: Creative Cakes Costa Rica. 

 

 

 

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