Logo

Coloso activo: 4 puntos para entender lo que pasa en el volcán Poás

Empuje de magma provoca actividad reportada en últimas semanas

Por Pablo Rojas | 12 de Abr. 2017 | 12:03 am

Acostumbrados a escuchar repetidamente del Turrialba, a muchos se nos olvidó que en Costa Rica existen cientos de volcanes.

Pero, mejor tarde que nunca, reapareció de nuevo el Poás para recordárnoslo.

La última semana dejó noticias del coloso alajuelense, el cual desde hace días no daba de qué hablar.

Una reactivación empujada por erupciones freáticas, gases, vapores y fumarolas lo puso de nuevo en el mapa.

María Martínez, química y vulcanóloga del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), explicó minuciosamente qué es lo que está pasando con el macizo.

  • Cambios geofísicos: Modificaciones en actividad sísmica y una deformación en la corteza. De enero a la fecha hubo un aumento en la actividad sísmica, con temblores internos de baja frecuencia. Esto significa un incremento en el movimiento de fluidos (agua, gas o magma) en el interior del volcán.
  • Cambios drásticos en gases y lago: Salen a través del domo y el lago. La temperatura del lago pasó de 35°C a 45°C. Su química cambió, cerca del playón sale agua hirviendo y vapor. Son sedimentos, mezclados con vapor de agua, canalizados por un drenaje que va al domo.
  • Magma empujando: Hay un volumen de magma (lava) fresco empujando. Viene de niveles profundos del cráter hacia otros más superficiales. Ese movimiento hacia la superficie empuja flujos hacia arriba. Donde hay grietas y poros llenos de agua, el magma que empuja ejerce una presión sobre los fluidos y salen, como las fumarolas.
  • Cámara magmática cerca: Se estima que a 500 metros o a 1 kilómetro de profundidad hay un reservorio de magma. El magma bombeado a niveles más profundos llega a esta pequeña cámara. En ella, de vez en cuando, el magma intenta subir más y rompe rocas. Se forman grietas, por ahí salen gases.

Desde enero los científicos notaron un incremento en la actividad sísmica del volcán. Esto significaría que el magma ya generaba una presión interna rompiendo rocas internas.

"Este es el patrón típico del Poás. Unos días estará sin erupciones, otros con. El volcán presenta períodos de actividad freática impulsados por el empuje de magma", citó Martínez.

Si esos volumen de magma que se mueven a la superficie suben bastante cerca, pasaría a ocurrir lo de 2011, cuando hubo magma fresco a pocos metros de la superficie. Esta actividad también se presentó en 1981. 

El monitoreo del coloso, uno de los cientos que existen aquí, seguirá constante.

Comentarios
0 comentarios
OPINIÓNPRO