NASA halla partículas esenciales para la vida en el asteroide Bennu
La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) dio a conocer que el asteroide Bennu ha aportado nuevas pistas sobre la formación del sistema solar y los orígenes de la vida.
Estudios en curso han analizado las muestras que la nave OSIRIS-REx (Origins, Spectral Interpretation, Resource Identification, and Security–Regolith Explorer) entregó a la Tierra.
Este martes 2 de diciembre, en las revistas Nature Geoscience y Nature Astronomy se publicaron tres hallazgos destacables:
- Azúcares esenciales para la biología
- Una sustancia similar a un "chicle o goma" no vista antes en astromateriales
- Una inesperadamente alta abundancia de polvo producido por explosiones de supernovas.
Azúcares esenciales para la vida
Los científicos liderados por Yoshihiro Furukawa encontraron ribosa, un azúcar de cinco carbonos, y, por primera vez en una muestra extraterrestre, glucosa de seis carbonos.
Aunque estos azúcares no son evidencia de vida, su detección muestra que los bloques básicos de moléculas biológicas estaban muy extendidos por todo el sistema solar.
En Bennu ya se habían encontrado muestras previas de aminoácidos, nucleobases y ácidos carboxílicos.
Por ejemplo, para la vida en la Tierra, las azúcares desoxirribosa y ribosa son los bloques clave del ADN y el ARN, respectivamente. El ADN es el principal portador de información genética en las células, mientras que el ARN cumple numerosas funciones, y la vida tal como la conocemos no podría existir sin él.
Las cinco nucleobases utilizadas para construir tanto ADN como ARN, junto con fosfatos, ya se han encontrado en las muestras de Bennu traídas a la Tierra por OSIRIS-REx. (…) El nuevo descubrimiento de ribosa significa que todos los componentes que forman la molécula de ARN están presentes en Bennu, dijo Furukawa.
La NASA explicó que el hallazgo de ribosa en muestras de asteroides no es una sorpresa total, ya que previamente se había encontrado en dos meteoritos recuperados en la Tierra.
Sin embargo, lo relevante en las muestras de Bennu es que los investigadores no encontraron desoxirribosa, lo que podría significar que la ribosa fue más común que la desoxirribosa en los entornos del sistema solar temprano.
Los investigadores consideran que la presencia de ribosa y la ausencia de desoxirribosa apoyan la hipótesis del "mundo del ARN", donde las primeras formas de vida dependían del ARN como molécula principal para almacenar información y catalizar reacciones químicas esenciales.
La vida actual se basa en un sistema complejo organizado principalmente por tres tipos de biopolímeros funcionales: ADN, ARN y proteínas. (…) Sin embargo, la vida temprana pudo haber sido más sencilla. El ARN es el principal candidato para el primer biopolímero funcional porque puede almacenar información genética y catalizar muchas reacciones biológicas, explicó Furukawa.
Misterioso y antiguo 'chicle o goma'
La investigación dirigida por Scott Sandford reveló la presencia de un material similar a un chicle o goma en las muestras de Bennu, nunca antes visto en rocas espaciales, y que podría haber ayudado a preparar el terreno para que surgieran en la Tierra los ingredientes de la vida.
La sorprendente sustancia probablemente se formó en los primeros días del sistema solar, cuando el joven asteroide progenitor de Bennu se calentó.
Antes era blanda y flexible, pero desde entonces se ha endurecido. Esta antigua "goma espacial" está compuesta por materiales parecidos a polímeros extremadamente ricos en nitrógeno y oxígeno.
Desde la agencia aeronáutica detallaron que moléculas tan complejas pudieron haber proporcionado algunos de los precursores químicos que ayudaron a desencadenar la vida en la Tierra.
En este asteroide primitivo que se formó en los primeros días del sistema solar estamos viendo eventos cerca del principio del principio. (…) Con esta extraña sustancia estamos hablando, muy posiblemente, de una de las primeras alteraciones de materiales que ocurrieron en esta roca, aseguró Sandford.
Polvo abundante de supernovas
Asimismo, la investigación dirigida por Ann Nguyen analizó polvo de estrellas anteriores a nuestro sistema solar, encontrado en dos tipos diferentes de roca en las muestras de Bennu.
Se cree que el polvo presolar estaba generalmente bien mezclado a medida que se formaba el sistema solar.
No obstante, las muestras contenían seis veces más polvo de supernova que cualquier otro astromaterial estudiado, lo que sugiere que el cuerpo progenitor del asteroide se formó en una región del disco protoplanetario enriquecida con polvo de estrellas moribundas.
Estos fragmentos retienen una mayor abundancia de materia orgánica y granos de silicato presolares, que se sabe se destruyen fácilmente por alteración acuosa en asteroides. (…) Su conservación en las muestras de Bennu fue una sorpresa e ilustra que parte del material escapó a alteraciones en el cuerpo original. Nuestro estudio revela la diversidad de materiales presolares que el progenitor acreció durante su formación, señaló Nguyen.
Misión del explorador OSIRIS-REx
Este explorador fue lanzado el 8 de septiembre de 2016 hacia Bennu (anteriormente 1999 RQ36). Allí recogió una muestra de rocas y polvo de su superficie el 20 de octubre de 2020.
La nave espacial entregó la muestra a la Tierra el 24 de septiembre de 2023, cuando liberó una cápsula con granos de Bennu sobre la atmósfera terrestre. La cápsula descendió en paracaídas hasta el Campo de Pruebas y Entrenamiento de Utah, del Departamento de Defensa.
Los científicos esperan que la muestra de Bennu revele si los asteroides que colisionaron con la Tierra hace miles de millones de años entregaron agua y otros ingredientes para la vida a nuestro planeta, explicó la NASA.



