Célula ligada a Tren de Aragua también está detrás de doble homicidio producto de riña
Agrupación criminal explotaba sexualmente a mujeres venezolanas en modalidad exprés y cobros por Sinpe Móvil
Varios de los sujetos relacionados con una célula del peligroso grupo internacional Tren de Aragua, que operaba en Costa Rica y que están siendo detenidos este martes, no solo estarían vinculados con la explotación sexual de mujeres venezolanas en el país, sino también con un doble asesinato.
El homicidio ocurrió el pasado 20 de noviembre de 2024, minutos antes de las 10:00 p.m., durante una balacera dentro de un local comercial tipo bar, en las inmediaciones del Museo de los Niños, en San José. En el sitio, tres personas resultaron heridas por proyectiles de arma de fuego.
En la escena murió un hombre venezolano de apellido Pérez, de 25 años, mientras que otro sujeto de apellido Piñate, de 34 años y también venezolano, falleció minutos después en el Hospital San Juan de Dios.
El tercer herido, quien sobrevivió, fue identificado como de apellido Lima, de 24 años y de nacionalidad ecuatoriana, según el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Tras realizar las diligencias, los agentes de la Sección de Homicidios lograron establecer que, en apariencia, el móvil del crimen fue una riña motivada por supuestos desacuerdos entre varios sujetos de nacionalidad extranjera.
Según la investigación, el tiroteo habría sido producto de disputas internas por jerarquías dentro de la organización y por conflictos relacionados con mujeres, a quienes pretendían explotar sexualmente.
"El tema del doble homicidio ocurrido el pasado 20 de noviembre, alrededor de las 9:30 p.m. en un lugar cercano a las inmediaciones del Paso de la Vaca, en el cual murieron dos personas y también hubo un herido, se están imputando a cuatro personas, en este caso cuatro masculinos venezolanos.
Al final son 11 en total debido a que un masculino figura tanto como sospechoso en el homicidio como también en la trata de personas", explicó Randall Zúñiga, director del OIJ.
Los investigadores lograron identificar a cuatro sospechosos de haber participado en el doble homicidio y en la tentativa de homicidio. Todos pertenecían a la misma agrupación criminal.
Estos cuatro figuran entre los objetivos que la policía judicial y la Fiscalía Adjunta contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes intentan capturar mediante un amplio operativo desarrollado este martes en varios puntos del país, incluido un hotel donde se encontraban algunos de los imputados.
En total, hay once hombres investigados —uno de ellos ecuatoriano— y una mujer de nacionalidad nicaragüense.
Sello "Tren de Aragua"
La red criminal de trata de migrantes que operaba en territorio tico, vinculada con el Tren de Aragua, ofrecía los "servicios" sexuales de mujeres explotadas mediante páginas web, citas personales o coordinando su envío en vehículos, acompañadas por otros miembros de la banda.
Según el Ministerio Público, el grupo operaba bajo la modalidad exprés, ofreciendo estos "servicios" a domicilio.
Una vez en el lugar indicado por el cliente, el sospechoso —integrante de la organización— permanecía en las afueras de la vivienda a la espera de que concluyera el acto sexual, para luego trasladar nuevamente a la víctima al sitio donde era mantenida cautiva.
El director del OIJ, Randall Zúñiga, detalló que estas mujeres eran explotadas por montos cercanos a los ₡45.000, los cuales debían ser pagados mediante Sinpe Móvil.
Este método es idéntico al que el Tren de Aragua ha utilizado en países como Chile, Colombia, Perú, Ecuador y Bolivia, lo cual refuerza la hipótesis de una operación criminal transnacional.
"La distribución de funciones que realizaban era la de publicar en redes sociales los servicios sexuales, posterior otros miembros de la agrupación recibían el pago normalmente mediante SINPE móvil.
Otro grupo hacía el traslado de las femeninas hacia diferentes hoteles o las viviendas de los clientes explotadores donde eran sometidas al servicio sexual que siempre tenía el rédito económico en favor de la agrupación criminal", detalló el fiscal Asdrúbal Montero Chacón.
La Fiscalía Adjunta contra la Trata de Personas y el Tráfico Ilícito de Migrantes, junto con la Sección Especializada en Violencia de Género, Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes, y la Sección de Homicidios del OIJ, realizaron al menos siete allanamientos para desarticular esta red criminal.
Los operativos se ejecutaron en Barrio México y en el distrito Merced, en San José; así como en Jacó de Garabito y en el cantón central de Alajuela, con el objetivo de recopilar pruebas clave y detener a los imputados.
La Fiscalía logró acreditar que los sospechosos traían mujeres desde Venezuela, cubriendo todos los gastos del traslado, a cambio de que, una vez en Costa Rica, ofrecieran servicios sexuales para pagar una supuesta deuda.
No obstante, las víctimas eran sometidas a un sistema de multas constantes por acciones mínimas, lo que dificultaba su liberación. Además, se identificó un patrón de maltrato físico y psicológico, así como restricciones severas en la comunicación con sus familias.