¿Aviación Civil y regulación efectiva? Solo 9 empresas están registradas para operar drones

(CRHoy.com). En el país solo existen 9 empresas autorizadas para hacer uso comercial de los drones. Posiblemente muchísimas compañías más (o personas) se dediquen a eso, sin embargo esa es la cantidad registrada –al 10 de junio de 2019- ante la Dirección General de Aviación Civil (DGAC).

Esta es solo una pincelada de la realidad tras más 16 meses de vigencia de una cuestionada directriz operacional destinada a regular los Sistemas de Aeronaves Piloteadas a Distancia (RPAS, por sus siglas en inglés), entre los cuales destacan los drones.

La normativa contaba con requisitos considerados burdos por parte de sectores ligados a esta actividad, algunos de los cuales fueron derogados posterior al 14 de febrero de 2018.

Por ejemplo, se establecía que solo personas con bachillerato en secundaria podían operar dispositivos con fines comerciales o se urgían exhaustivos dictámenes médicos para conseguir la licencia operativa.

Roberto Gallardo Loría, presidente de la Asociación Costarricense de Operadores de Drones (Acodrón), explicó que la escasa cantidad de empresas registradas formalmente ante la institución estatal es solo una muestra de que los alcances de la directiva –tal y como el sector lo señaló en el pasado- eran restrictivos.

De hecho, la asociación libra un pulso para que una resolución contenciosa se traiga abajo la normativa creada por la DGAC.

“Lo que se hizo fue asfixiar el sistema de esta tecnología y su desarrollo. Lo dejó en manos de gente que tenía recursos económicos y tiempo para poder hacer toda esta ‘megatramitación’ y pagar esa cantidad de recursos e inversión de dinero que hay que hacer para poderse certificar”, explicó Gallardo.

La normativa establece un proceso de certificación comercial que costaría $1.874 (casi 1 millón de colones) y una licencia para operadores cuyo costo asciende a $94 (53 mil colones).

Mientras, las actividades que no son de este tipo no requieren requisitos exhaustivos que solo deben limitarse a no volar en zonas prohibidas (como cercanías de aeropuerto), entre ellas se enlistan: fines científicos, investigación, búsqueda, salvamento, lucha contra incendio u otras actividades de interés.

“Es lamentable que esto (la directriz) sea lo mismo que tenemos desde hace 5 años. La normativa es ilegal porque deja a personas con discapacidad sin posibilidad de pasar el examen médico que se solicita. Un sordo no podría operar un drone o tener una empresa de operación de drones”, indicó el representante de Acodrón.

Álvaro Vargas, subdirector de la DGAC, señaló que desde febrero de 2018 hasta la fecha se han emitido 107 certificados de idoneidad (comercial) para personas. Bajo la óptica del funcionario, la publicación de la normativa y su cumplimiento son necesarios para crear consciencia en los usuarios.

Sobre las apenas 9 compañías registradas, Vargas agregó que “son las únicas autorizadas a realizar actividades comerciales, las que no están en esa lista, no cuentan con la Certificación Apropiada para realizar esas actividades”.

“Los sistemas de aeronaves pilotadas a distancia son un nuevo componente del sistema aeronáutico global reconocido por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y la DGAC haciendo uso de sus facultades, establece las normas básicas para su operación y así garantizar que la actividad mantenga una seguridad operacional parecida a la actividad de la aviación civil convencional. También estableció las bases de un futuro marco jurídico con relación a las condiciones de explotación de esas aeronaves para la realización de los diferentes trabajos aéreos, incluyendo los trabajos técnicos o científicos, vuelos de prueba de producción, mantenimiento, demostración y programas de investigación para el uso de drones”, recalcó Vargas.

Requisitos para volar drones comerciales

• Certificado médico entregado por médicos avalados por la DGAC. Renovado cada 60 meses. Cada 24 meses si son mayores de 40 años.
• Curso teórico y práctico del dispositivo que se pretende operar llevado a cabo por el fabricante, un operador autorizado por el fabricante del RPAS o por un centro de instrucción aeronáutica o por un instructor calificado. Que contemple como mínimo lo estipulado en el Apéndice I de esta directiva operacional.
• Tener 10 horas de experiencia en la operación de drones fuera del espacio aéreo controlado. Las horas serán anotadas y certificadas con una bitácora de vuelo.
• Se podrán convalidar cursos o licencias sacadas en el extranjero, siempre y cuando se apruebe el examen teórico de la DGAC.
• Cancelar costo aprobar cursos teórico-prácticos dispuestos por la DGAC.
• Para emisión de certificado de idoneidad expedido por la DGAC hay que pagar.
• Instructores prácticos (que enseñan a operadores) deben realizar examen aprobatorio en la DGAC.
• Se estima que todo el proceso de certificación y consecución de licencia para que las personas operen comercialmente puede costar hasta 900 mil colones.
• Las normas regularán todos aquellos dispositivos que pesen menos de 150 kilogramos (kg).
• El proceso de certificación para las empresas cuesta $1.874 (casi 1 millón de colones) y una licencia para operadores cuyo costo asciende a $94 (53 mil colones).