10 preguntas para entender el pulso entre Noboa y los pueblos indígenas en Ecuador
Ecuador atraviesa una crisis que combina economía, política y seguridad. Lo que comenzó como un rechazo al aumento del precio del diésel se transformó en un enfrentamiento directo entre el gobierno del presidente Daniel Noboa y los pueblos indígenas, con cientos de heridos, un muerto y decenas de detenidos.
El conflicto refleja no solo la presión social sobre el alza de combustibles, sino también la histórica fuerza de las comunidades indígenas en la política ecuatoriana, la polarización del país y un gobierno joven que aplica medidas de seguridad extremas mientras impulsa una consulta para una nueva Asamblea Constituyente.
1. ¿Por qué comenzaron las protestas en Ecuador?
Las manifestaciones estallaron el 22 de setiembre tras la decisión del presidente Daniel Noboa de eliminar el subsidio al diésel. La medida elevó el precio del combustible de $1,80 a $2,80 por galón, afectando principalmente a agricultores, transportistas y comunidades rurales que dependen del transporte de productos agrícolas.
2. ¿Qué papel tienen los pueblos indígenas en estas protestas?
Los pueblos indígenas de Ecuador tienen una larga tradición de lucha social en Ecuador. Desde los años 90, la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) ha logrado influir en la política nacional, incluso provocando la caída de presidentes. En esta ocasión, lideran el paro y han ampliado sus demandas a mejoras en salud y educación, reducción del IVA y rechazo a la consulta popular para una Asamblea Constituyente.
3. ¿Cuál es la relación histórica de Noboa con los pueblos indígenas?
Daniel Noboa es un presidente joven y relativamente nuevo en la política nacional, pero su relación con los movimientos indígenas ha sido tensa desde el inicio de su mandato, marcado por un estilo de gobierno rígido y poco dispuesto al diálogo con sectores sociales críticos. Las comunidades indígenas, históricamente marginadas, reclaman mayor participación en las decisiones del Estado y denuncian que su voz sigue sin tener peso en las políticas públicas.
Durante las elecciones presidenciales, Conaie y su brazo político, el movimiento Pachakutik, no respaldaron la candidatura de Noboa. En la segunda vuelta, la dirigencia indígena —incluido su líder, Leonidas Iza— manifestó su apoyo a la candidata correísta Luisa González, en rechazo a la agenda económica del actual mandatario.
Sin embargo, la base indígena no se alineó completamente con esa postura. En varios cantones con fuerte presencia indígena, Noboa terminó ganando la segunda vuelta, lo que reveló una fractura interna entre la dirigencia y los votantes. Esa división explica parte del clima de desconfianza mutua: mientras los líderes acusan al presidente de "cerrarse al diálogo" y aplicar políticas que profundizan la desigualdad, el gobierno lo percibe como un movimiento opositor más, con fines políticos y no solo sociales.
4. ¿Qué medidas de seguridad ha tomado Noboa para contener las protestas?
El presidente declaró el estado de excepción en 10 de las 24 provincias del país. Esta medida suspende temporalmente la libertad de reunión, permite el despliegue militar y refuerza la acción policial para mantener "el orden público". En Quito, se movilizaron más de 6.000 militares y 1.000 policías adicionales para impedir lo que el gobierno calificó como una posible "toma de la capital".
5. ¿Cuál ha sido el saldo de las manifestaciones hasta ahora?
Hasta el momento, las protestas han dejado un manifestante muerto, al menos 160 heridos y cerca de 110 detenidos. Entre los arrestados hay una veintena de personas acusadas de terrorismo tras ataques a estaciones policiales y quema de vehículos. La Conaie denuncia que estas acusaciones buscan criminalizar la resistencia indígena, mientras organizaciones internacionales alertan sobre el uso excesivo de la fuerza y violaciones de derechos humanos.
6. ¿Cómo afecta esta crisis a la economía de Ecuador?
El paro indígena ha provocado bloqueos de carreteras y restricciones al comercio, generando pérdidas estimadas en $140 millones. Sectores afectados incluyen turismo, floricultura y transporte. En provincias como Imbabura, los bloqueos han retrasado hasta 16 horas los viajes hacia Quito y limitado el abastecimiento de gas doméstico.
7. ¿Qué otros factores agravan la crisis en Ecuador?
Ecuador enfrenta un problema creciente de violencia vinculada al narcotráfico y crimen organizado, especialmente en las provincias costeras. El despliegue militar para contener las protestas coincide con la atención sobre el crimen organizado, generando un escenario complejo donde las fuerzas de seguridad deben actuar en distintos frentes.
8. ¿Qué papel juega la consulta popular sobre la Asamblea Constituyente?
Noboa convocó un referendo para el 16 de noviembre que plantea instalar una Asamblea Constituyente, eliminar la obligatoriedad del Estado de financiar partidos políticos y definir la presencia de bases militares extranjeras. La Conaie y otros sectores sociales han llamado a votar "No", argumentando que la medida busca concentrar poder y debilitar a la Corte Constitucional.
9. ¿Qué opinan los ecuatorianos sobre el gobierno y las protestas?
La sociedad ecuatoriana está dividida frente a la crisis. Según una encuesta de la consultora Cedatos, el presidente Daniel Noboa cuenta con un respaldo de 52,7 %.
En ese mismo sondeo, el 50,8 % de los encuestados expresó su desaprobación a la eliminación del subsidio al diésel, mientras que el 44,6 % admitió aceptarla. Además, alrededor del 27 % manifestó que apoyaría las manifestaciones.
Estos datos sugieren que, aunque Noboa mantiene un nivel de aprobación relativamente alto, su decisión sobre el subsidio y el creciente descontento social han erosionado parte de su respaldo, especialmente en zonas rurales y comunidades afectadas por el alza del combustible.
10. ¿Cuál es el horizonte de la crisis?
La situación sigue siendo incierta. La postura rígida del gobierno, la radicalización de las protestas y la falta de diálogo elevan el riesgo de escalada. La influencia histórica de la Conaie y el amplio descontento social podrían determinar la estabilidad política de Ecuador en los próximos meses. Cada decisión del Ejecutivo y cada movilización indígena tendrá un impacto directo en la resolución de la crisis.