Vladimir pasó de tetracampeón a un puesto que pocos conocen

Vladimir Quesada ha tenido 365 días de contrastes, con hasta tres diferentes puestos dentro del organigrama del Deportivo Saprissa.

En abril de 2024, Quesada Araya trabajaba día y noche en busca de llevar al equipo a ganar un histórico tetracampeonato.

Al final, alcanzó el objetivo y los morados lograron la estrella número 40 de la institución, escribiendo así un capítulo dorado en su historia.

Sin embargo, con el pasar de los meses, las cosas cambiaron. Los resultados no lo acompañaron y los altos mandos del club tomaron la decisión de darle las "gracias".

Fue a inicios de octubre cuando quedó fuera del primer equipo, pese a los títulos de campeón alcanzados. A pesar de su salida, se mantuvo ligado a la institución de sus amores y le fue asignado el equipo sub-15.

Con las categorías menores se mantuvo, hasta que esta semana, tras un altercado con el director de divisiones menores, todo cambió.

Rumores iban y venían sobre una posible salida de Vladimir; sin embargo, al final la dirigencia le asignó una nueva función, cada vez más alejada de la dirección técnica.

Desde este viernes, Vladimir asumió el cargo de encargado de mejora individual del jugador (tecnificación).

Según explicó Saprissa, se trata de una posición estratégica para el desarrollo integral de las nuevas generaciones dentro de la institución.