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(VIDEO) Fuerte discusión: Johnny Araya empuja a regidor tras concejo municipal

Por Carlos Castro | 12 de Jul. 2023 | 9:26 am
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(CRHoy.com) Insultos, empujones y violencia, así denunciaron el alcalde de San José, Johnny Araya y el regidor, Diego Miranda, que terminó la sesión ordinaria #166 del Concejo Municipal de la noche del martes.

La situación se generó luego de un amplio debate por la resolución que la Procuraduría General de la República (PGR) emitió sugiriendo al ayuntamiento que no es necesario pagar ¢4 mil millones al Hospicio de Huérfanos, como beneficiario de las ganancias de los Festejos Populares de San José, pese a que existía un fallo judicial de agosto del 2022 que así lo ordenaba.

Araya solicitó a la dirección jurídica plantear una moción con la que se da 10 días hábiles al Hospicio para que demostrara y documentara que sigue operando, con el objetivo de corroborar la existencia de la organización y por ende que los fondos llegarían a un destino específico.

Esta propuesta se sometió a votación y los regidores Miranda y Andrea Rudín la votaron negativa, asegurando que no podían tomarse a la ligera la votación, en la que algunos regidores no tenía claridad de lo que se estaba haciendo.

"Es irresponsable que se puede presentar una moción así sin que se pueda leer y sabiendo que se presta para enredar la cosa, con lo que viene sucediendo y con lo que un juez ya dictó, que es lo más grave de todo. Es fundamental que nosotros podamos tener clara la información", dijo Miranda.

Por esa razón, el liberacionista criticó la posición de estos representantes en el Concejo.

"Dijeron que era una irresponsabilidad votar esa moción, y don Diego me había hecho una pregunta que yo no pude contestar porque se había hecho una votación nominal, por lo que no podía hablar. Por eso, al final pedí la palabra para responder y además le cuestioné por su actitud su relación con Boris Molina, abogado del Hospicio, es que ¿cuánto se puede estar ganando el abogado del Hospicio?, entonces el regidor se salió de las casillas", explicó a CRHoy.com.

En la discusión, Araya insistió en cuestionar la relación de Molina con el regidor del Frente Amplio y el destino de los ¢4 mil millones que se había ordenado a la municipalidad transferir a la representada del abogado.

"Quiero decir algo que me llama la atención, el abogado del Hospicio de Huérfanos se llama Boris Molina y al mismo tiempo ha sido abogado del señor Miranda Méndez (Luis Diego), aquí en un órgano director lo representó ¿qué relación hay entre el abogado del Hospicio de Huérfanos y el regidor Miranda Méndez? Y eso me llama la atención de su posición contraria a que actuemos para ver como hacemos para no pagarle al Hospicio de Huérfanos, me llama la atención esa coincidencia. En vez de estar contentos y celebrando que la PGR le da la razón al auditor, están bravos, vienen a atravesar como siempre el caballo", comentó  en la sesión.

Todo esto generó un debate que terminó con una fuerte discusión entre Araya y Miranda, este último de inmediato intentó responder usando el micrófono de su curul para replicar lo dicho por el alcalde, pidiéndole que dijera lo que realmente le llamaba la atención, sin embargo, ya se había terminado la sesión.

"¿O tiene miedo?", le decía Miranda en repetidas ocasiones mientras cortaban la transmisión.

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Seguidamente el regidor se acercó a Araya para buscar "una réplica", alegando que lo había difamado con su último comentario.

Pese a que el primer acercamiento se resolvió con risas, burla y chotas, el asunto subió de tono con dos gestos que molestaron al frenteamplista.

"El alcalde me empujó después de la sesión e intentó quitarle el celular contra su voluntad a la compañera Andrea Rudín cuando lo grababa después del hecho de empujarme. Es una actitud repetida que después de la sesión él tome la palabra e intente difamarnos tanto a Andrea Rudín como a mí, en vista de eso busqué tener una réplica y al final se mostró violento, frustrado, por la situación que está ocurriendo en el gobierno local, porque no nos han podido doblegar. Es una muestra de quien está en un cargo durante 30 años como ejerce este cargo y como esta mafia y esa corrupción hacen lo posible por quedarse en las elecciones próximas", dijo Miranda.

 

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El máximo representante del ayuntamiento dijo que él en ningún momento usó la fuerza y menos fue violento, pues a su modo de ver las cosas

"Llegó a encararme y decir que nosotros estábamos perdidos sin saber de qué me estaba hablando. Yo simplemente lo hago a un lado para seguir mi camino, pero él se empieza a hacer la víctima diciendo que no lo empujara pero en el video se puede ver que no había ningún empujón violento, no hay nada, solamente lo tomo de la cintura para poder salir, porque estaba obstruyendo mi salida.

Ahí llegaron los asesores a ofenderme, apareció la otra regidora haciendo tomas de lo que estaba pasando, pero el origen de todo tiene que ver con eso, que ellos votaron en contra de una moción que es absolutamente correcta y que busca proteger los intereses económicos de la municipalidad", comentó.

Sobre el incidente, Araya asegura que fue insultado por asesores del regidor, quienes lo increparon fuertemente sin motivo.

"La actitud de los asesores de él que me insultaron e inclusive la secretaria del Concejo me dice que eso no puede ser, que eso es razón para iniciar un procedimiento de despedido, porque no pueden llegar con ese irrespeto", comentó.

Aquí puede ver la sesión ordinaria completa:

El caso

La PGR sugirió que la Municipalidad de San José no debería pagar la millonaria suma y lo calificó como "un despilfarro contrario a la sana administración".

"Pretender darle cumplimiento a un traslado de recursos hacia una organización que ya no existe y/o no funciona, implicaría no solo un despilfarro contrario a la sana administración de la Hacienda Pública, sino, sobre todo, un abierto incumplimiento del fin público que tomó en cuenta el legislador para la promulgación de la norma", concluye el dictamen PGR-C-133-2023.

La respuesta del órgano procurador se da tras una consulta de la Auditoría Interna Municipal.

En el documento se expone que el PANI desde el 2018 no renovó los permisos del Hospicio de Huérfanos de San José, así como que el hospicio como tal ya no cuenta con una personería jurídica, pues -según el documento- habría venido funcionando con la cédula jurídica de otra organización denominada Fundación Hospicio de Huérfanos.

En agosto pasado quedó en firme un fallo del Tribunal Contencioso Administrativo en donde se ordenó que la Municipalidad debía trasladar al Hospicio de Huérfanos de San José el 50% de las utilidades generadas por los ingresos del redondel de toros de Zapote y la mitad de los ingresos por publicidad que se recibieron entre los años 2009 y 2018.

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