Presión policial en Colombia y Ecuador propicia uso de Costa Rica para trasegar droga a Europa
Ese cuerpo policial, adscrito a la Unión Europea (UE), detalló que las organizaciones criminales están adaptando las rutas y los métodos de ocultación de la droga (principalmente cocaína) para asegurar los traslados por la vía marítima.
La razón de este cambio responde a que autoridades policiales ecuatorianas y colombianas ejercen una mayor presión en los principales puertos de esos países (como Guayaquil en Ecuador o Buenaventura en Colombia).
Así lo detalló este jueves la Europol, en un boletín oficial divulgado tras las detenciones en España y Costa Rica por los casos "Purga" y "Calypso-Guanacaste" (caso Embassy), en los que se desarticuló una agrupación dedicada al trasiego de cocaína en contenedores cargados con fruta y yuca congelada, exportada desde territorio tico y recibida en puertos de España y Portugal.
Este miércoles 11 de junio, la Fiscalía Adjunta Especializada contra la Delincuencia Organizada (FAEDO) y la Policía de Control de Drogas (PCD) del Ministerio de Seguridad Pública (MSP) detuvieron a 12 personas en allanamientos realizados en San Ramón y San Carlos. Según la investigación derivada de ambos casos, los detenidos tendrían relación directa con el envío de droga hacia continente europeo.
El caso "Calypso-Guanacaste" trascendió en diciembre de 2024 en España y Portugal. Las pesquisas fueron realizadas por la Guardia Civil de España y la Policía Judicial de Portugal. De hecho, funcionarios de ambos cuerpos policiales participaron en las acciones desplegadas este miércoles en Costa Rica.
Según Europol, la red criminal utilizó empresas formales en Costa Rica para recibir cocaína desde Colombia y ocultarla en cargamentos de yuca congelada que salían de los puertos de Limón, Terminal de Contenedores de Moín (TCM) y Gastón Kogan de Japdeva, con destino a Europa.
El grupo se valía de cadenas logísticas legítimas para camuflar las actividades delictivas y transportar cocaína, por mar y aire, en pequeñas cantidades para evitar la detección.
"Debido a la intensificación de la presión policial en otros puertos conocidos, como Guayaquil en Ecuador, las organizaciones criminales han buscado cada vez más alternativas, consideradas como lugares más seguros para sus operaciones. En los últimos años, esta organización narcotraficante ha recurrido a Costa Rica como base logística para recibir cargamentos de cocaína procedentes de Colombia, almacenarlos y prepararlos para su envío a Europa", explicó Europol, en el reporte.
El modus operandi más común de la red criminal consistía en esconder la cocaína en finas láminas ocultas en polvo de yuca congelada.
"Debido a la densidad y el color del producto, la cocaína pasaba desapercibida para los sistemas de escaneo durante las inspecciones aduaneras. El uso de carga congelada también hacía que los cargamentos fueran indetectables para los perros detectores de drogas. Esta técnica de ocultación permitió a la organización traficar cocaína repetidamente a Europa", detalló la policía europea.
Golpes previos
El primer golpe a la organización delictiva se concretó en el verano de 2024 en Portugal. La policía judicial de ese país recibió información confidencial sobre el envío de cocaína desde países de América, entre ellos Costa Rica, y permitió entregas controladas de droga a los destinatarios. En esa oportunidad, fueron detenidas 7 personas.
En diciembre de 2024, las autoridades españolas arrestaron a otras 13 personas. Entre ellas, un ciudadano costarricense que permanece detenido en Sevilla.
La investigación sostiene que los sospechosos establecieron empresas de logística para dar a los envíos, efectuados desde los puertos costarricenses, una apariencia legal y que desempeñaban un papel clave en el transporte y la distribución. Entre los arrestados figura un ciudadano dominicano residente en Barcelona que había comprado la cocaína y pretendía distribuirla por toda Europa.
La segunda fase de la operación se ejecutó este 11 de junio en Costa Rica, con el objetivo de atacar al núcleo operativo de la organización criminal.
Hasta este jueves, la operación policial concretó 21 incautaciones de droga en Costa Rica, Bélgica, España, Portugal, Alemania y Países Bajos, con un total de 5,4 toneladas de cocaína decomisadas.
De los decomisos de droga, 5 fueron en Bélgica con un total de 840 kilos de cocaína incautada. Otros 5 en Portugal con un total de 731 kilos de cocaína decomisada; 4 en Países Bajos, con un total de 733 kilos de cocaína; 2 en Alemania, con 60 kilos aprehendidos; 4 ocurrieron en España, con un total de 1.141 kilos de droga decomisados y 7 en Costa Rica, con un total de 1.891 kilos de cocaína decomisados.
En total, se detuvieron a 37 personas: 7 en Portugal, 5 en Alemania, 13 en España y 12 en Costa Rica. Dos de las personas detenidas se consideran objetivos de alto valor para Europol. Uno capturado en España y otro en Costa Rica.
Los arrestos permitieron desmantelar toda la organización criminal, tanto la parte proveedora que operaba en Costa Rica como la parte receptora en Europa.

