Pese a afirmación del Gobierno, desempleo no bajó, más bien aumentó y generación de trabajo se estancó

El desempleo en Costa Rica no disminuyó en los últimos meses, por el contrario, aumentó y el mercado laboral no genera nuevos puestos de trabajo desde septiembre del año pasado, pese a los anuncios que hizo este miércoles el presidente Rodrigo Chaves.

Aunque el ministro de Trabajo, Andrés Romero, aseguró que se creó más empleo el año anterior respecto a 2023, con base en un análisis del mercado laboral realizado por el Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas (IICE) de la Universidad de Costa Rica (UCR), el comportamiento de algunos indicadores del mercado laboral muestra un deterioro desde septiembre de 2024 a febrero de este año.

Romero mencionó que la tasa de desempleo nacional se ubicó en 6,9 % al cuarto trimestre de 2024, siendo la más baja en la historia.

Sin embargo, la tasa de desempleo se situó en 7,4 % en el trimestre que finalizó en febrero anterior, de acuerdo con los últimos datos de la Encuesta Continua de Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

Con este resultado, ese indicador se alejó de las cifras de 6,6 % y 6,7 % registradas en los trimestres que concluyeron en agosto y septiembre de 2024, respectivamente.

Las cifras también demuestran que en el trimestre que terminó en febrero de 2025, un total de 177.277 personas no tenían trabajo en Costa Rica. De ellas, 92.081 eran hombres y 85.196 mujeres.

En la medición que abarcó los meses de noviembre y diciembre de 2024 y enero de 2025, la cantidad de personas desempleadas era de 167.758. De ese total, 94.469 eran hombres y 73.289 mujeres. Es decir, hay más desempleados ahora.

Recientemente, el economista Luis Vargas, reconoció que, aunque todavía no se puede asegurar que haya una aceleración del desempleo, sí es notorio el aumento al comparar los datos de los primeros meses de 2025 con los del cierre del año anterior.

"Hay un aumento leve en el desempleo que genera una alerta sobre los potenciales efectos de la desaceleración de la economía, que tiene un componente cíclico habitual y otro asociado a los choques económicos que estamos afrontando", dijo.

Incluso, otros economistas han alertado de la pérdida de empleos en el sector agropecuario, que acumula cuatro meses consecutivos de decrecimiento en su producción, y en el sector turismo, que lleva ya siete meses seguidos con una caída en el ingreso de turistas por vía aérea a Costa Rica.

Ambos sectores han sido impactados por la caída del tipo de cambio del dólar con respecto al colón y en el caso del turismo se suma la creciente inseguridad en el país.

Estancado

Pese a lo dicho por Chaves y Romero, el mercado laboral costarricense no genera nuevos puestos de trabajo desde septiembre de 2024 y, en febrero de 2025, el empleo incluso disminuyó con respecto a enero.

Así lo señala un análisis realizado por el economista Ronulfo Jiménez, con base en datos de la Encuesta Continua de Empleo del INEC.

El número de personas con empleo en el país en setiembre del año pasado era de 2.255.397, pero comenzó a descender en octubre hasta cerrar en 2.231.365 en diciembre de ese año. La diferencia es de -24.032.

En los tres primeros trimestres de 2024, el empleo aumentó, según los mismos datos del INEC.

Sin embargo, las últimas cifras de la Encuesta Continua de Empleo también muestran que el empleo disminuyó en febrero de este año con respecto a lo observado en enero.

En enero de 2025, la fuerza de trabajo ocupada en Costa Rica era de 2.238.375, pero bajó a 2.214.407 en febrero.

Jiménez explicó que aunque la economía costarricense ha crecido en términos generales en los últimos meses, hay actividades económicas altamente generadoras de empleo que se debilitaron en los últimos meses del año pasado y en los primeros de 2025.

"Hay dos sectores en particular. Uno es la agricultura, que tuvo un decrecimiento al mes de enero, y también están lo que el Banco Central llama actividades de alojamiento y servicios de comida, que incluye el turismo", sostuvo.

Además, hay sectores como el comercio que, aunque no presentó cifras negativas en enero, sí redujo su ritmo de crecimiento; lo mismo ocurrió con las actividades inmobiliarias.

En el caso de la actividad manufacturera, su crecimiento global se mantuvo positivo, pero si se desagrega, se nota que fue el empleo en las zonas francas el que mayormente aumentó. En cambio, la industria que produce para el mercado local y centroamericano mostró incrementos muy bajos.

"Hay un crecimiento global positivo en la producción, pero cuando se analiza la composición y las debilidades en sectores que son importantes generadores de empleo, se puede asociar a los malos resultados laborales que se observan en la Encuesta Continua de Empleo", agregó Jiménez.