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Sobreviviente relata la pesadilla que vivió en accidente en Cambronero

Por Anyi Ospino | 19 de Sep. 2022 | 6:32 pm

(CRHoy.com).-A sus 55 años, Danilo Silva solo le expresa su agradecimiento infinito a Dios; él es uno de los sobrevivientes del trágico accidente en Cambronero.

El hecho ocurrió el pasado sábado 17 de setiembre, en el que 9 personas perdieron la vida, cuando el bus de la empresa Alfaro cayó a un guindo por 75 metros.

Silva menciona que particularmente ese día el bus salió con retraso, tenía que salir a las 1:45 p.m. y media hora después, a las 2:15 pm, lograron iniciar el recorrido; él piensa que si el bus en el que se transportaba hubiese pasado media hora antes por el lugar, no hubiese vivido el trágico accidente del que conserva escenas lamentables.

Los hechos ocurrieron en Los Chorros, en la Ruta 1 a 10 kilómetros de San Ramón.

"En San Ramón empezó a llover, cuando llegamos a Cambronero empezó a llover, a llover y a llover, entonces desde las ventanas uno veía como en las paredes de la montaña empezaba a caer el agua, se hacía más intensa en la parte donde pasó la tragedia.

Nosotros sentimos el estruendo, no sabíamos que era, no sabíamos lo que había pasado, solo sé que sentimos el estruendo y empezamos a girar, a dar vueltas", relata con asombro Silva.

Danilo menciona que mientras que el bus daba vueltas, él solo oraba. "Lo que hice yo fue pedirle a Dios, pedirle que perdonara mis pecados y que hiciera la voluntad", en ese momento Danilo tuvo miedo de morir; aún no se explica como pudo salir por sus propios medios del bus.

"Quedamos todos en un colocho, todos encima de otros (…) yo a como pude saqué mis piernas y le dije al señor que me diera fuerzas para sacar las piernas, yo me dije, si no estoy fracturado, puedo salir, si Dios me da la fuerza de sacar los pies hago algo; porque yo quería buscar a mi hermano", narró el herido.

Silva vive en Alajuela, y ese día se dirigía a Coralillo, de donde es oriundo, él junto a un hermano de 72 años y una sobrina de 55 años quisieron visitar a la familia que tienen allí; y de esta manera pasar este fin de semana largo.

En el momento de la catástrofe, recuerda ver a su hermano con la cara llena de sangre, en ese momento temió; aunque se tranquilizó a los pocos segundos, cuando su hermano le aseguró que estaba bien, que la sangre venía de un corte en la oreja.

Antes de salir del bus, quiso convencer a su hermano de hacer lo mismo, pero este le dijo que se quedaba porque su hija se encontraba atrapada. 

"En el momento que todo el mundo se quiso mover con tal de liberarse, el bus se estremecía un poco, porque estaba entre el árbol y la piedra, y debajo del bus pasaba el río que estaba muy crecido, pero salí por una ventana", detalla Silva.

Pesadillas vividas en el camino

Con un tono angustiado y sin pausas, Silva relata que no fue el primero en salir del bus, antes de él una señora intentó saltar el metro y medio que los separaban de la ladera que el sí pudo cruzar, a diferencia de la mujer que saltó primero y en su intento cayó al río. 

"La señora me grita, me gritaba que por favor le ayudara, yo le decía que no podía hacer nada, ella se estaba ahogando, me sentí impotente, porque no podía hacer nada; porque si le daba la mano a ella me caía yo, no podía, yo me sentía impotente, lo que decía era voy a buscar ayuda, voy a buscar ayuda", recuerda don Danilo.

Cuenta que fueron de los momentos más duros y angustiantes que ha vivido, su decisión fue sobrevivir y buscar ayuda para sus familiares y las 44 personas que quedaban atrás.

A como pudo caminó y gateo ladera arriba, 75 metros que se le hicieron eternos y que aún no se explica como pudo llegar por sus medios a la carretera, pero los momentos traumáticos no paraban: cuenta la desgarradora escena en la que una joven madre pedía ayuda para socorrer a hijo.

"Venía detrás de mí una muchacha que había dejado un chiquito de 5 años, ella pegaba gritos, me decía que la ayudara, porque el chiquito había quedado dentro del bus también y eso eran lamentos tras lamentos", cuenta como queriendo olvidar.

Al llegar a la vía, Danilo recuerda que fue recibido por camioneros quienes lo socorrieron a él y a las personas que venían detrás de suyo, allí le dieron agua y algo de comer.

Desde que inició su viaje a las 2:15 habían pasado casi dos horas, la Cruz Roja fue alertada pasadas las 4:00 de la tarde y las unidades llegaron casi que de manera inmediata; él fue parte del primer grupo en ser atendido, inicialmente fue a la Clínica de Esparza y posteriormente fue trasladado al hospital Monseñor Sanabria en Puntarenas junto a seis sobrevivientes más.

Él solo presentó golpes en la parte derecha de su cuerpo; la espalda baja y su pantorrilla fueron las zonas afectadas, pero en su caso solo fueron golpes, afortunadamente. Su equipaje y teléfono celular quedaron en el fondo del precipicio y en estos momentos no se lamenta por esas pérdidas, porque agradece estar vivo.

 

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