MEIC cuestiona proyecto que propone etiquetado frontal de alimentos
Alegan que iniciativa es contraria a tratados internacionales y sería inconstitucional.
El Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) se opone a un proyecto de ley que obligaría la imposición de etiquetas frontales nutricionales en alimentos y bebidas alcohólicas, reflejando así si estos productos son alta fuente de azúcares, grasas y sodio, dañinos para la salud.
La iniciativa se conoce con el expediente 23.861 y es impulsada por las diputadas del Partido Liberación Nacional (PLN) Andrea Álvarez y Montserrat Ruiz.
En audiencia en la Comisión de Discapacidad y Adulto Mayor, donde se analiza el proyecto, la ministra a.i del MEIC Patricia Rojas Morales, explicó que el proyecto se opone a tratados internacionales firmados por Costa Rica y sería además inconstitucional según lo que indica el artículo 7 de la Carta Magna.
Rojas señaló que el país es parte del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) que, según el Reglamento Técnico Centroamericano, obliga a Costa Rica a discutir cambios en este tipo de legislación desde esa vitrina.
La jerarca señaló que cambios como el propuesto entonces deberían ser discutidos en el Consejo de Ministros de Integración Económica (COMIECO) y no en la Asamblea Legislativa.
Recordó que las leyes nacionales no pueden de manera unilateral dejar sin efecto disposiciones de los tratados regionales.
Rojas no quiso hablar por el fondo de lo que recomienda el texto, y se basó en que cualquier cambio como el sugerido debe analizarse en esta otra instancia.
En el oficio VM-OF-025-2024 enviado por el MEIC a la comisión legislativa sobre su posición oficial del proyecto indicó:
El proyecto propuesto desconoce que la implementación del etiquetado nutricional frontal (FOPNL) como una medida para abordar problemas asociados con la salud, tiene una eficacia limitada por varias razones: La mayoría de los estudios muestran que los consumidores reconocen las advertencias nutricionales y han reducido la compra de productos con múltiples sellos. Sin embargo, no hay evidencia de que esta disminución en la compra de productos procesados se traduzca en mejoras claras en la salud de las personas.
La presencia de múltiples sistemas de FOPNL en diferentes países está generando confusión y dificultan la comparación entre productos. El FOPNL no aborda directamente otros factores determinantes de la obesidad, como la disponibilidad y accesibilidad a alimentos saludables y los hábitos alimentarios y de estilo de vida poco saludables. Se necesitan enfoques integrales que aborden los diversos determinantes de la salud y promuevan entornos alimentarios y de estilo de vida saludables para lograr un impacto significativo en la prevención y el control de estas enfermedades.
La diputada Álvarez señaló que es importante avanzar en esta legislación porque el etiquetado actual de los productos que se ubica detrás de los empaques, no es amigable para su lectura y dificulta la decisión de los consumidores.
Insistió además que el proyecto no violenta el tratado señalado, ya que este recomienda "pisos mínimos" y que los países a partir de esos parámetros pueden decidir.
Agregó que en los países donde se ha implementado las etiquetas negras en forma de rombos, es que las industrias han modificado sus productos precisamente para evitar caer en estas categorías.
Alrededor del 44% de las muertes del Continente, cerca de 3,1 millones de personas, son causadas por la hipertensión arterial, la hiperglucemia en ayunas, la obesidad y el sobrepeso.
La mala alimentación se debe, en gran medida, a la amplia disponibilidad y comercialización de alimentos y bebidas procesados y ultraprocesados que tienen un contenido excesivo de azúcares, grasas y sodio.
