Kliver lloró y festejó con lágrimas directo al cielo

Uno de los jugadores más emotivos con la estrella 39 fue Kliver Gómez.

Hace apenas cinco meses llegó al equipo morado y ya puede decir que es campeón nacional.

Incluso en los dos juegos de la final ante el "Team" fue titular y cumplió a cabalidad con lo pedido por el cuerpo técnico.

En medio de los festejos, Gómez se acordó de su padre, que falleció hace unas semanas, y de la bebé, que perdió meses atrás.

"Darle las gracias a Dios y este triunfo va para mi bebé que perdí y mi papá que está en el cielo, siento que anda celebrando conmigo", afirmó Gómez.

Durante estos meses, Kliver no la ha pasado bien, pero su familia y compañeros de equipo no han dejado que baje los brazos.

"He venido llorando, no es fácil. He tenido más amargas que bonitas, pero me quedo con este título y se lo dedico a mi viejo".