Esposa de magnate británico no quería dejar el yate tras naufragio en Italia

Angela Bacares, esposa del magnate británico Mike Lynch, no quería abandonar el yate sin su pareja y su hija Hannah después del naufragio en Sicilia, Italia.

Así lo comentó el capitán Karsten Borner, quien ayudó a rescatar a los supervivientes de la tragedia.

"No quería irse porque su esposo y su hija todavía estaban abajo", dijo, refiriéndose a que el magnate y la joven de 18 años aún estaban dentro del velero Bayesian que se hundió tras el paso de una tromba marina.

"La recogieron un poco más tarde porque le pedí a la guardia costera que la llevara porque pensé que necesitaba ayuda médica. Luego, en el transcurso de las siguientes 2 o 3 horas (no sé exactamente cuánto tiempo después), llegaron los guardacostas y el resto de la gente de Bayesian se fue con ellos", añadió.

Unos días después del naufragio que ocurrió el lunes 19 de agosto, los buzos encontraron los cuerpos de Hannah y Lynch y otras 5 personas.

Bacares fue una de las 15 personas que sobrevivieron el incidente que ocurrió frente a las costas de la isla de Sicilia.

Borner comentó a la revista People que cuando ocurrió la tormenta la madrugada del lunes, su barco y el velero del magnate eran los únicos que estaban anclados en la costa de Porticello.

"Cuando las cosas se calmaron, la tormenta amainó un poco y el viento disminuyó un poco, miramos a nuestro alrededor y ya no pudimos ver el Bayesian", indicó.

Dos tripulantes y dos pasajeros vieron un objeto en el agua que parecía una ballena y se dieron cuenta de que era el velero que había volcado.

Borner y su primer oficial se subieron a un barco más pequeño y llamaron a un bote auxiliar para dirigirse donde estaba el yate y rescatar a los sobrevivientes.

Él señaló que alrededor del navío había cosas flotando, entre ellas cojines y sillas.

"Y luego vimos una luz parpadeante. Era una balsa salvavidas con una luz en la parte superior. Y también nos saludaron con una linterna", dijo el capitán.

"Fuimos allí y encontramos a la tripulación y parte de los pasajeros: 15 personas en una balsa con capacidad para 12, incluido un bebé", agregó.

Las autoridades están investigando el hecho. Se les abrió un expediente al capitán de la embarcación, así como al mecánico Tim Parker Eaton y al marinero Matthew Griffiths, quien estaba de guardia el lunes.