De joven no la dejaron estudiar agronomía, ahora impulsa las plantaciones de café con tecnología

(CRHoy.com).-Cuando era joven, sus papás no dejaron que Carolina estudiara agronomía porque era una carrera "para hombres", ahora con su emprendimiento logra impulsar las plantaciones de café con herramientas tecnológicas.

Carolina Araya conversó con CRHoy.com y contó los detalles de cómo llegó hasta donde está y la lucha que ha tenido que mantener para que su empresa salga a flote por el bien de los agricultores cafetaleros. 

La vecina de Santo Domingo de Heredia es creadora de Demeter Innovation Lab, una empresa que busca impulsar el mejoramiento de la floración del café, tecnificar a las cafetaleras e impulsar la transformación tecnológica con herramientas de precisión y agregación de valor a la agricultura que será aplicada en los cultivos.

Ella cuenta que desde que estaba muy joven, tuvo una cercanía con la agronomía, pero que en aquella ocasión no pudo estudiar la carrera que quería porque, para sus papás, esa carrera "no era para mujeres", por lo que decidió tomar un rumbo distinto.

"Mi profesión original es chef, eso fue lo que yo estudié y me gusta mucho. Mis papás no me dejaron matricularme hace muchos años en agronomía, no era carrera para mujeres, no me dejaron entrar, entonces ahí empecé a buscar y logré entrar en los 90 a la parte culinaria, entonces por lo menos por ahí me pude ir", contó Araya.

Sin embargo, nunca se imaginó que durante su vida seguiría muy cercana a los cultivos, principalmente al café. 

El esposo de Carolina es ingeniero en software y para el 2010 tenía una empresa de desarrollo de software que se vio afectada por la crisis que se provocó durante el primer gobierno de Barack Obama en Estados Unidos, debido a que gran parte de su trabajo lo exportaban, por lo que decidieron unir fuerzas.

Yo empecé haciendo todo el mercado de la comercialización, empezamos a tocar puertas en las cámaras necesarias y a la fecha, ahora soy la que maneja la parte comercial, indicó la empresaria. 

Pero cuenta que siempre se "quedó con esa espinita" de algo más, de "desarrollar algo para el agro, para comida o algo así", por lo que, en 2018 y 2019 se preparó en un curso que promueve a las mujeres a que se conviertan en líderes de empresas.

"Me acuerdo que en esa época entraron muchas productoras de Pérez Zeledón y algunas hacían cosméticos y solo yo entré en la parte tecnología con la idea de hacer algo para este sector (…) empecé a buscar ideas y a pelotearlas, pero el curso no se terminó de desarrollar por el tema de pandemia. La ONU Mujeres conocía mi proyecto y me recomendó con la INCAE, en donde me sugirieron que si me parecía enfocarlo en el café, porque es de los productos en Costa Rica en donde el 30% de los productores son mujeres que tuvieron que heredar de sus papás, porque no tenían hombres, no les quedó de otra", recordó Carolina.

Además, recordó que ahí pudo conocer la historia de una mujer que tiene su propia finca con cultivos de café en Orosi y que le mencionó que ella debía viajar a subastas porque no tenía equipos para moler el grano y que en alguna ocasión le vendieron un equipo que se encontraba herrumbrado, por falta de conocimiento en el campo. Esto fue que le terminó de generar confianza y crear su empresa. 

"Al final de todo esto venimos con el proyecto de unos sensores que lo que queremos medir 3 variables: el estrés hídrico, que es el más importante de todos, la luminosidad y los nutrientes. Esos 3 factores yo los mido por medio de estos sensores que van a correr los datos en una plataforma y esos datos me llegan a la computadora, al personal en el campo.

Con esos datos en una hectárea se puede determinar si se tiene menos nutrientes o más nutrientes y con eso hago toda la composición necesaria para que yo pueda mejorar y el objetivo específico con esas mejoras es lograr una mejor floración que en buena teoría lograría un 20% más de granos. Lo cual se traduce en beneficio para cualquier productor", explicó Araya.

La empresaria señala que la mayor limitación que tienen las personas es no poder contar con las herramientas necesarias, pero que una vez que se le brinden, con voluntad, se puede llegar muy lejos y alcanzar muchas metas. Además, cuenta que ahora se siente confiada y es capaz de tocar temas que en algún momento no entendía, como es el caso de leer en estado financiero.

A todas aquellas mujeres que luchen por sus esfuerzos, que hay oportunidades en el mercado y que liberen un emprendimiento o una empresa con ese esfuerzo, a uno le cambia la vida, el conocimiento, a uno le cambia el negocio, concluyó Carolina. 

Este 19 de noviembre se celebra el Día Internacional de la Mujer Emprendedora.