Corrupción en tiempos de guerra: el caso que golpea al gobierno de Zelenski en Ucrania
Ucrania atraviesa uno de los mayores escándalos de corrupción desde la invasión rusa de hace tres años. El caso estalló en un momento crítico, cuando su infraestructura energética sufre bombardeos diarios.
La trama, revelada por las agencias anticorrupción del país, apunta a altos funcionarios y, de forma crucial, a un antiguo socio y aliado del presidente Volodimir Zelenski.
La investigación gira en torno a un presunto esquema de sobornos por $100 millones dentro de la empresa estatal de energía nuclear, Energoatom.
Los detalles del caso
La Oficina Nacional Anticorrupción (NABU) y la Fiscalía Especializada Anticorrupción (SAPO) anunciaron la pesquisa. Tras 15 meses de trabajo y más de 1.000 horas de grabaciones telefónicas, las agencias documentaron las operaciones de una "organización criminal de alto nivel".
El mecanismo seguía el patrón clásico de la "mordida": comisiones del 10% o 15% exigidas a contratistas que buscaban acuerdos con Energoatom.
La indignación creció al conocerse que los sobornos provenían de fondos asignados a la construcción de defensas energéticas, vitales para resistir los ataques rusos.
En las grabaciones, los implicados incluso rechazaban invertir en estructuras defensivas, a las que calificaban como una "pérdida de dinero".
Las autoridades detuvieron a cinco personas y notificaron cargos a siete miembros del grupo.
El aliado clave que huyó
En el centro de la trama aparece Timur Mindich, empresario y antiguo socio de Zelenski. La NABU lo identifica como el presunto líder de la organización.
Mindich fue socio y copropietario de la productora Kvartal 95, que lanzó la carrera actoral de Zelenski. Según la SAPO, usó sus lazos con el presidente para manejar el flujo de dinero ilícito del sector energético.
La situación se agravó cuando la NABU registró su residencia. Los investigadores confirmaron que Mindich había huido del país horas antes de los allanamientos, lo que desató especulaciones sobre una posible filtración.
Los ministros implicados
El escándalo golpeó al gobierno de forma directa. Entre los señalados figura German Galushchenko, exministro de Energía y, hasta hace poco, ministro de Justicia.
La fiscalía lo acusa de recibir beneficios personales de Mindich a cambio de cederle el control de los flujos financieros del sector. La primera ministra Yulia Svyrydenko confirmó su suspensión. Galushchenko aseguró estar de acuerdo con la decisión y prometió defenderse "en la arena legal". La ministra de Energía, Svitlana Hrynchuk, también renunció.
Entre los otros nombres vinculados están el ex vice primer ministro Oleksiy Chernyshov y Rustem Umérov, exministro de Defensa y actual jefe del Consejo de Seguridad Nacional.
Las implicaciones para Zelenski y su gobierno
No hay pruebas de que Zelenski participara o se beneficiara del esquema, pero el caso lo obliga a demostrar firmeza. Los fiscales presentaron como evidencia un mensaje de Mindich al presidente, en el que le pedía hablar con Galushchenko antes de una llamada posterior. El contacto sugiere que el empresario intentó aprovechar su cercanía con el mandatario.
Zelenski reaccionó con un mensaje contundente. Respaldó las investigaciones y pidió condenas ejemplares: "Todos los que construyeron esquemas corruptos deben enfrentarse a una respuesta clara. Debe haber condenas", declaró.
Organizaciones anticorrupción advirtieron que cualquier intento de frenar a la NABU o la SAPO sería visto como un encubrimiento. "Zelenski debe elegir entre proteger a sus amigos o defender la justicia y los intereses de Ucrania", señaló una de ellas.
El escándalo estalla en un momento delicado: mientras el país sufre apagones y pérdidas humanas, algunos aliados occidentales, entre ellos Estados Unidos, reavivan las sospechas de corrupción en el entorno presidencial.
La disputa con las agencias anticorrupción
La operación de la NABU y la SAPO también tiene un trasfondo político que no favorece al presidente. En julio, Zelenski impulsó una iniciativa legislativa para colocar a ambas agencias bajo control del Ejecutivo y limitar su autonomía. La propuesta provocó protestas en Kíev y críticas de los aliados europeos.
El presidente finalmente retiró el plan. Los activistas advirtieron que coincidía con las investigaciones a miembros de su círculo cercano, incluido Mindich. La reciente ofensiva de las agencias muestra que mantienen su independencia y refuerzan la vigilancia sobre el poder político.
Corrupción histórica y carrera hacia la Unión Europea
La corrupción ha sido un obstáculo persistente en Ucrania desde el colapso soviético. La Unión Europea exige una lucha efectiva contra este problema como condición para avanzar en la adhesión del país.
Un informe reciente para la UE advirtió que el control ampliado del gobierno sobre el sector energético desde 2022 no redujo la corrupción; en muchos casos, incluso la empeoró.
El ambiente de impunidad se refleja en otros casos.Por ejemplo, el exdirector de la empresa estatal de electricidad Ukrenergo, Volodimir Kudritski, fue detenido por malversación, aunque afirma ser víctima de persecución política por criticar la gestión energética.
Mientras tanto, la población soporta apagones constantes y ve cómo funcionarios se enriquecen durante la guerra. Muchos califican estos hechos como "inconcebibles" y sienten que agravan su sufrimiento.
